Expectación como pocas veces se ha visto en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Sacramento. Se votaba la aprobación o no del plan de financiación que permitirá construir un nuevo pabellón para los Kings. Hubo sí y celebración de los aficionados.
Más de medio millar de aficionados, vistiendo camisetas especiales para la ocasión, abarrotaron desde horas antes del comienzo el escenario de la reunión. Acompañándoles estaban también Gavin Maloof, copropietario de los Kings, y el base novato Isaiah Thomas. Todos esperaban la decisión de las autoridades municipales sobre el acuerdo no vinculante alcanzado hace unos días para financiar la construcción de la nueva instalación. Un proyecto valorado inicialmente en 391 millones de dólares.
Finalmente, el plan fue aprobado con más holgura incluso de la esperada, 7 votos a favor y 2 en contra, lo que hizo estallar de alegría a los asistentes, que celebraron con cánticos lo que el alcalde de la ciudad, el ex jugador de la NBA Kevin Johnson, no dudó en calificar de “momento histórico para Sacramento”.
Los detractores del proyecto, que lo consideran un serio riesgo para la futura estabilidad financiera de la ciudad, quedaron en minoría tanto en el debate como en la votación, aunque aún restan por delante varias votaciones críticas para el futuro del proyecto que deberán celebrarse en los próximos meses.
Por el momento, la aprobación inicial del acuerdo permite que el proyecto siga adelante y autoriza al Ayuntamiento a comprometer los 13 millones de dólares necesarios para el diseño de la nueva instalación, la planificación urbanística y de infraestructuras y los estudios medioambientales necesarios para que la construcción pueda comenzar el año que viene.
Luego vendrá lo más importante, establecer cómo y de dónde va a obtener la ciudad los 255,5 millones de dólares que ha de aportar según el plan de financiación aprobado ahora. Algo que también necesitará del futuro visto bueno de la mayoría de los representantes municipales.