La boda de Kim Kardashian con un jugador de baloncesto de la NBA nada ha tenido que ver con la de su hermana Khloe con otro jugador de la NBA. Mientras que el matrimonio entre Khloe y Lamar Odom parece sólido, el de Kim con Kris Humphries ha sido un visto y no visto.
La pareja se casó el 20 de agosto y 72 días después ya se anuncia su divorcio. Kim Kardashian, según han publicado medios como TMZ o People, ha presentado hoy una demanda de separación y el cuento feliz, no sabemos hasta donde la palabra cuento está bien empleada, ha pasado a mejor vida.
Se casaron en Santa Bárbara (California) a bombo y platillo, por todo lo alto, sin reparar en gastos. Acudieron casi 500 invitados, entre ellos muchas caras ultraconocidas, contrataron a un chef del máximo nivel, se gastaron sólo en la tarta 20.000 dólares... pero todos los fastos y gastos salvajes de la ceremonia fueron amortizados a base de la venta de los derechos del enlace matrimonial a la televisión y posteriores exclusivas jugosas.
Ahora, algo más de 2 meses después de la faraónica celebración, Kim Kardashian ha asegurado que se separan al existir "diferencias irreconciliables", expresión manida donde las haya, pero advierte de que siguen siendo amigos.
Lo cierto es que en los mentideros del famoseo ya se habla de las exclusivas que va a vender la Kardashian con su divorcio. Y es que no hay que olvidar que, además, toda la familia sigue de plena actualidad mediática porque tienen un espacio de telerrealidad que se llama "Keeping up with the Kardashians", al que seguro que la separación le viene muy bien desde el punto de vista de las audiencias.
Mientras, Kris Humphries no ha abierto la boca en el día de hoy. Permanece en silencio.
Curiosamente, el jugador completó la campaña pasada su mejor temporada de las 7 que lleva en la NBA, promediando con los Nets de Nueva Jersey 10 puntos, 10,4 rebotes y 1,1 tapones en 27,9 minutos. Metió el 52,7% de sus tiros de campo y disputó 74 partidos. Grandes estadísticas coincidiendo con su relación con Kim.
El ex de la Universidad de Minnesota no había funcionado hasta ahora a ese nivel pese a su buen desempeño universitario, que le llevó a ser elegido en el puesto 14 de su draft. Humphries, que todavía es joven, 26 años, cobró 3,2 millones de dólares en su última temporada y ahora mismo está sin contrato.