Andrei Kirilenko vivió hoy una jornada doblemente emotiva. Y es que el jugador ruso volvió a vestir la elástica de su último equipo antes de embarcarse en la NBA, CSKA de Moscú, y lo hizo enfrentándose al equipo con el que inició su carrera, el Spartak San Petersburgo.
El resultado, como decimos, tuvo su componente sentimental, pero resultó agridulce para el ex de Utah Jazz. En su regreso a Europa, Kirilenko hizo un partido muy completo en lo personal (15 puntos y 5 rebotes en 22 minutos de juego), pero su equipo terminó perdiendo. El resultado final: 83-81 para el Spartak.
Fue el debut de Kirilenko en la Liga VTB rusa. Un debut con la vista medio puesta en Estados Unidos y el lockout. AK-47 cobró la temporada pasada la friolera de 17,8 millones de dólares de las arcas mormonas de los Jazz, pero este verano se acababa su contrato y quedaba como agente libre. En eso, llegó el cierre patronal y terminó firmando por 3 temporadas con el todopoderoso CSKA de Moscú, pero con cláusula de salida a la NBA.
En la derrota ante el Spartak, Kirilenko fue el máximo anotador de su equipo junto a sus compañeros Milos Teodosic y Aleksey Shved, que también metieron 15 tantos.
En el partido, disputado ante cerca de 5.000 espectadores, el estadounidense de origen dominicano Sammy Mejía no participó del juego moscovita.