Dirk Nowitzki anota 40 y deja a Dallas a un paso de la gran final

En Oklahoma City aún se estarán preguntando cómo pudieron perder este partido. Los Thunder ganaban por 15 puntos (99-84) a 5 minutos del final del último cuarto, pero la genialidad de Nowitzki, que anotó 40 tantos, llevó el encuentro a la prórroga y al triunfo de Dallas.

Caras de incredulidad, rostros perplejos indagando sobre las razones de una derrota que prácticamente deja fuera de juego a los Thunder. Eso es lo que se podía ver en el banquillo local y en las gradas. Los Mavericks acababan de dar un golpe letal a la Final de la Conferencia Oeste: victoria a domicilio en la prórroga y 3-1 a su favor, a un paso de la gran final.

Nowitzki volvió a ser el héroe del equipo de Carlisle con sus 40 puntos y su portentosa actuación en esos últimos 5 minutos del cuarto cuarto que llevaron el encuentro al tiempo extra. J.J. Barea sumó 7 puntos en 16 minutos de juego.

Oklahoma City 105 Dallas 112 (tras prórroga) (1-3)

Ver para creer. Y es que estos playoffs están resultando apasionantes e imprevisibles. Los locales se las prometían muy felices cuando Kevin Durant acertó con un triple frontal a 5:06 del final del tiempo reglamentario. Adquirían los Thunder una ventaja prácticamente definitiva (99-84), el 2-2 en la serie estaba casi cerrado. Pero surgió la sorpresa, la magia, llámenlo como quieran. Surgió, en definitiva, el baloncesto.

Porque el baloncesto tiene estas cosas tan suyas y que lo hacen tan propio. El vuelco inesperado en un abrir y cerrar de ojos. Eso fue lo que sucedió anoche. En esos 5 minutos finales, parcial de 2-17 para Dallas y encuentro empatado que se tuvo que dilucidar en la prórroga.

Fueron los 5 últimos minutos del cuarto parcial inenarrables, con OKC completamente atascado bajo el yugo defensivo de los texanos y con Nowitzki desatado para sumar 12 puntos en 5 minutos con canastas imposibles superando a un Nick Collison que le estuvo defendiendo encima, muy encima, al máximo nivel. Pero es que el alemán...

Ese genio derrochado por el internacional teutón culminó a 6 segundos del final cuando Collison le hizo falta y al gran 'Robin Hood' no le tembló el pulso. Anotó los 2 tiros libres y empató a 101. Aún tuvieron los locales la oportunidad final, pero el triple lejano y sin posición de Durant fue taponado por Marion. Partido prolongado 5 minutos.

En esos 5 minutos de prórroga, no le fue mejor a los de Brooks, que encajaron un pacial de 4-11 para sumar en los 10 minutos finales del partido un resultado de ¡6-28!. Eso es marcar terrritorio. Tremendos los Mavs y encogidos los Thunder. Nada que ver con el inicio del encuentro, que recorrió un camino bien inverso: 18-8 para Oklahoma que metió sus primeros 9 tiros de campo en los primeros 5 minutos del encuentro.

En la prórroga, Kidd y Terry, la veteranía al servicio del colectivo, tiraron de galones y marcaron el rumbo. En el minuto final, un triple lateral de Kidd y un tapón de Chandler terminaron de hundir a Oklahoma City, que por entonces ya andaba malherido por la pista.

De nada le sirvió a OKC arrasar en los tableros (55 a 33 en el rebote con 20 ofensivos por 5 de Dallas), anotar mucho más en la pintura (54-36) o presentarse con 15 de ventaja en la recta final del choque. Porque prevalecieron otras cosas.

Para empezar, los 40 puntos de un Nowitzki que fue el rey de la finta y el rey de la pista: 12 de 20 en el tiro de campo y 14 de 15 en los libres. El alemán anduvo intratable en los minutos cruciales y contagió a su equipo, propagó la fe en la victoria.

Pero además de esos 40 tantos de Nowitzki, los Thunder fracasaron porque no supieron atacar en los minutos finales, ahogados por una gran defensa, porque anduvieron muy flojos desde el triple -2 de 13-, porque la segunda unidad, salvo Collison, aportó bien poco y, sobre todo, porque sufrieron una sangría en el control del balón.

Oklahoma perdió 25 balones y Dallas, tras perder 11 en la primera mitad, obró un milagro pocas veces visto: ¡extravió sólo 2 balones en la segunda parte y la prórroga, es decir, 2 posesiones en 29 minutos!.

Kevin Durant fue el mejor local con 29 puntos y 15 rebotes, pero perdió 9 balones, y Russell Westbrook sumó 19 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias, pero se dejó 6 bolas por el camino. Entre ambos, perdieron 15 posesiones y metieron sólo 16 canastas de 44 intentos. Mucho mejor, eso sí, Durant, que hizo un muy buen partido.

El problema es que a Durant apenas le secundó un gran Ibaka (18 tantos, 10 rebotes y 5 tapones) y un considerable Collison (12 puntos, 7 rebotes y un gran desgaste defensivo). Sefolosha tuvo sus momentos y Perkins no se movió de su esperpento habitual.

En Dallas, además de Nowitzki, gran rendimiento de la experiencia y calidad de Jason Kidd y Jason Terry. Los Jason fueron capitales en la prórroga. Además, el primero terminó con 17 puntos, 7 asistencias y 4 robos y el segundo con 20 puntos y 4 recuperaciones. Mientras, Barea concluyó con 7 puntos y 2 rebotes en 16 minutos, aunque sólo encestó 3 de sus 10 tiros. Poco importó. Al final, la felicidad se reflejaba en su rostro.