Oklahoma frena a Nowitzki, pero no puede con sus compañeros

Tercer partido de la final de la Conferencia Oeste entre Thunder y Mavericks y victoria de los texanos, que dominaron desde el inicio gracias a una gran defensa en un partido muy diferente a los anteriores, marcados por el juego ofensivo. Barea sumó 4 puntos.

Dallas pudo en esta ocasión con sus vecinos de Oklahoma City, apenas 300 kilómetros separan a ambas ciudades, que ofrecieron un recital de malos tiros desde la línea de 3 para terminar con 1 de 17. Ni Nowitzki, ni Durant estuvieron finos en esta ocasión, pero el alemán encontró más colaboración de sus compañeros y los Mavs fueron siempre por delante en el marcador.

Oklahoma City 87 Dallas 93 (1-2)

Decepcionante papel de los Thunder en su primer partido en casa, tercero de la eliminatoria ante Dallas. Los jugadores que dirige Scott Brooks parecieron saltar al campo como si el partido no fuera con ellos y los Mavs no tuvieron problemas para dominar el encuentro de principio a fin, pese a la remontada en los último minutos de los Thunder, imponiendo su defensa y su experiencia.

De nada sirvió que la defensa de Oklahoma amordazara a la estrella rival, Dirk Nowitzki. El alemán falló mucho, 7 de 21 en el tiro para 18 puntos, perdió 7 balones, recibió 4 tapones y no tuvo en esta ocasión el favor de los árbitros, que sólo le concedieron 3 tiros libres aun cuando tuvieron ocasión de señalar más.

El problema para los Thunder fue su horrible comienzo. Salieron fríos, fallando tiros y sobrepasados claramente por un rival mucho más centrado que se puso por delante desde la primera canasta, un triple de Stevenson, y alcanzó su máxima diferencia a los 2 minutos de iniciarse el segundo cuarto (35-12).

También influyó que si Nowitzki no tuvo una buena noche, mérito en buena parte del trabajo defensivo de Collison, tampoco le fue mucho mejor al referente local, Kevin Durant, que finalizó con 24 puntos, pero un 7 de 22 en el tiro y un horrible 0 de 8 en el triple que le lleva a sumar 13 errores consecutivos desde más allá del arco en los últimos 2 partidos.

La diferencia estuvo en que el alemán encontró mejor soporte para esa mala noche en sus compañeros que el que halló Durant, que sólo tuvo a Westbrook -30 puntos, pero más pérdidas (7) que asistencias (4)- como aliado en el ataque ante el desacierto, cuando no la inhibición, del resto de sus compañeros salvo el mencionado Collison, que hizo diana en sus 4 lanzamientos a canasta para sumar 9 puntos. Los Thunder firmaron un horripilante 1 de 17 en el tiro triple, y evitaron el cero tras fallar sus 16 primeros intentos con un acierto de Westbrook en el último minuto, cuando ya no servía de nada.

A pesar de todo, los locales tuvieron sus oportunidades cuando el juego ofensivo de los Mavs se bloqueó en la segunda mitad y las canastas de Durant y Westbrook estrecharon a 6 puntos la diferencia (74-80) mediado el último periodo.

La clave llegó a menos de 3 minutos del final. Con 78 a 84 en el marcador y los Mavs naufragando en ataque, Westbrook y Cook dispusieron de sendas oportunidades de poner la victoria a tiro, pero sus respectivos lanzamientos triples fueron a cual peor ejecutado y a menos de 2 minutos del final, Jason Terry redimió su mala noche (3 de 12) anotando la canasta de la tranquilidad para el equipo de Rick Carlisle, que aguantó la diferencia sin problemas en el último minuto.

Marion, con 18 tantos, fue el máximo anotador visitante junto a Nowitzki. Kidd terminó con 13 puntos y 8 asistencias y Chandler brilló en el rebote con 15 capturas. El puertorriqueño Barea cumplió, aunque estuvo más discreto que en anteriores ocasiones. Sumó 4 puntos y 4 asistencias en 14 minutos de juego en los que se cargó con 5 faltas.

Los Thunder lanzaron el doble de tiros libres que el rival y lo hicieron con acierto (32 de 36) lo que les permitió llegar con vida a los últimos minutos pese a quedarse en un pobre 37% de tiro de campo. Pagaron su falta de intensidad en el inicio y su reacción llegó ya muy tarde. Ahora, la ventaja de campo ya está de nuevo en Texas.