El último partido de la eliminatoria más competida de los playoffs no tuvo la emoción esperada y los Thunder se impusieron con claridad a los Grizzlies haciéndose con el pasaporte a la final del Oeste. Durant, 39 puntos, lideró a los de Oklahoma.
El puertorriqueño José Juan Barea queda pues como único representante en las finales de conferencia de este año, toda vez que la eliminación de los Grizzlies supone la despedida de Marc Gasol y Greivis Vásquez que, como el resto de su equipo, no vivieron una noche brillante en su último partido.
Oklahoma 105 Memphis 90 (4-3)
Los Thunder serán finalmente el equipo que dispute la final de la Conferencia Oeste frente a los Dallas Mavericks tras imponerse con claridad en el séptimo y último partido de la serie que les enfrentaba a la gran sorpresa de esta fase final, los Memphis Grizzlies.
Fue una victoria clara en un partido que durante muchos minutos tuvo muchos más errores que aciertos por parte de ambos equipos como consecuencia de la tensión propia de un encuentro en el que Thunder y Grizzlies se jugaban todo a una carta.
Ya en el segundo cuarto, los locales tomaron la iniciativa animados por el ensordecedor ambiente que se vivía en un Oklahoma City Arena lleno hasta la bandera con las camisetas azules de los aficionados de los Thunder. Fue un primer estirón de 11 puntos (40-29) que puso en evidencia los problemas que durante toda la noche sufrió el juego de los Grizzlies.
Ambos equipos se movieron en bajos porcentajes de tiro durante buena parte del encuentro como consecuencia en muchos casos de la precipitación y también de la permisividad arbitral con las defensas, especialmente con la local. Pero en la sucesión de errores, eran los Thunder los que parecían tener más claro el guión del encuentro, con Durant llevando la iniciativa del juego ofensivo y un Westbrook mucho más comedido de lo habitual en ataque y generoso en el reparto de juego.
Aun así, los Grizzlies sujetaron el marcador hasta mediado el tercer cuarto, pese a la continua sensación de estar caminando en la cuerda floja que daba el conjunto que dirige Lionel Hollins. Ese delicado equilibrio se rompió justo después de que un triple de Conley pusiera a los Grizzlies a tiro de piedra del rival (52-49) con menos de 5 minutos por jugar en el tercer cuarto.
Esos 5 minutos resultaron letales para las aspiraciones de los Grizzlies. Los Thunder endosaron un parcial de 17-4 a los visitantes impulsado por el acierto de Durant, 10 puntos en ese parcial, y Harden, que anotó 3 triples tremendos en los 2 minutos y medio finales del cuarto. Aunque Memphis trató de reaccionar, los Thunder finalizaron el cuarto con un 72-58 a su favor y la sensación de que el partido era suyo.
Una sensación que creció en el inicio del último periodo, con la diferencia aumentando y unos Grizzlies sin la intensidad defensiva de otras ocasiones y con las ideas tan poco claras en el ataque como en los anteriores 3 cuartos. Con el juego interior limitado por una defensa local a la que el trío arbitral permitió más manos de las debidas debajo de canasta, los Grizzlies no supieron encontrar en el exterior el aire que necesitaban.
Al final, no hubo emoción alguna. Los Thunder llegaron a tener 20 puntos de ventaja y los minutos finales terminaron siendo de basura, para decepción de quienes esperaban un final tan emocionante como el que habían deparado otros encuentros de la serie y para alegría de los aficionados de la franquicia de Oklahoma que dispusieron de tiempo de sobra para celebrar su clasificación.
Durant cerró la noche con 39 puntos y 9 rebotes en una exhibición de poderío ofensivo ante una defensa rival que en esta ocasión no pudo con él y Westbrook culminó con 14 puntos, 14 asistencias y 10 rebotes el primer triple doble de un séptimo partido de playoff desde que Pippen lo lograra ante los Knicks en 1992. En el banquillo local, destacaron Harden, 17 puntos, y Collison, 8 puntos y 12 rebotes, que fue el encargado del trabajo sucio ante el limitado tiempo de juego de Serge Ibaka, tocado físicamente.
En los Grizzlies, Conley sumó 18 puntos, pero no consiguió sacar a los suyos del atasco ofensivo, y Randolph terminó con 17, pero lejos de la brillantez de otras ocasiones. Tampoco fue brillante el papel de Marc Gasol, 12 puntos y 7 rebotes, aunque el catalán peleó cuanto pudo intentando sobreponerse a la inhibición arbitral respecto a sus defensores. Un problema éste que el pívot de los Grizzlies ha venido sufriendo toda la temporada, falto aún en la NBA del respeto arbitral del que gozan otros hombres altos.
Finalmente, el venezolano Greivis Vásquez estuvo flojo, como casi toda la segunda unidad de los Grizzlies, especialmente en el lado ofensivo. No consiguió entonarse en su primera salida a pista durante la primera parte y Hollins prescindió de él en la segunda. Sólo salió para disputar los 2 minutos y medio finales, con el partido ya decidido, y al menos, se despidió con el triple que cerró el marcador a menos de 9 segundos del final.
Aun así, tanto Gasol como Vásquez pueden irse a casa satisfechos por la labor realizada en una temporada culminada con una gran fase final. Grizzlies y Thunder son 2 equipos jóvenes destinados a dar que hablar en años venideros y los de Oklahoma están ya dispuestos a hacerlo en éste. Dallas es su último obstáculo para llegar a la final de la NBA. Será un duelo entre veteranía y juventud.