Milagro en Portland. O desastre de San Antonio, según se mire. Los Spurs ganaban 92-96 a 35 segundos del final y tenían la posesión del balón, pero acabaron perdiendo al anotar Batum 4 puntos en las últimas 9 décimas de segundo del partido a través de 2 tiros libres y un alley-oop.
Ver para creer. De nada sirvieron los 21 puntos de un Manu Ginóbili que brilló con fuerza hasta que en los últimos segundos su estrella languideció al perder un balón decisivo ante Matthews. Rudy Fernández sumó 7 puntos y vio el milagro desde la banda.
Mientras, en Boston, nueva derrota de los Celtics, que cayeron inesperadamente ante los Bobcatas, a los que dominaban por 13 en el último cuarto. Arroyo y Nájera jugaron, pero su presencia fue más bien testimonial.
Además, victoria de los equipos de Florida. Miami se impuso a Philadelphia gracias al partidazo de Wade y James, especialmente del primero, y Orlando ganó a New Jersey, aunque perdió por lesión a Jameer Nelson. Nocioni jugó 5 minutos improductivos con los Sixers.
Portland 98 San Antonio 96
Para quedarse con la boca abierta y no ser capaz de cerrarla. Lo que sucedió anoche en el Rose Garden fue de traca. Los Spurs ganaban 92-96 con 35 segundos por jugar y tenían la posesión, pero acabaron perdiendo. En el lado de los héroes: Batum y Miller. En el lado de los villanos: Parker y Ginóbili.
La victoria parecía asegurada, pero con 30 segundos por jugar Parker se durmió en los laureles, Miller le robó el balón y anotó el 94-96. El resto sucedió en un suspiro.
Con 94-96, balón para Ginóbili que se juega un uno contra uno ante Matthews y pierde el balón. El contraataque termina con falta sobre Batum a 0,9 segundos del final. Y Batum, con una serenidad gélida, anotó los 2 libres para empatar a 96. El desastre de los Spurs no había acabado.
Tiempo muerto de Popovich, jugada ensayada y el saque de banda de Novak con destino a Ginóbili se va a la grada perdiéndose por el fondo de la canasta. El reloj no corre.
Tiempo muerto de McMillan, que diseña en la banda una jugada ejemplar. Miller saca desde la banda, los movimientos de jugadores sin balón desajustan la defensa rival, Ginóbili pierde su marca y alley-oop desde la banda de Miller para que Batum, marcado por Parker, anote una bandeja sobre la bocina. Brutal, 4 puntos de Batum en 1 segundo y triunfo local. El Rose Garden estalla.
De este modo, los 2 mejores jugadores visitantes, Ginóbili y Parker, arruinan sus partidos. El argentino termina con 21 puntos, 7 asistencias y 4 de 8 triples en 34 minutos, pero con cara de pocos amigos. Parker hace 15 tantos, pero también se va con gesto de incredulidad. Splitter, que fue titular y logró 11 puntos y 7 rebotes con 5 tiros de 2 sin fallo, tampoco es feliz.
La alegría en el otro bando. Los dos héroes son los dos máximos encestadores del equipo: Batum (21 puntos) y Miller (21 con 8 asistencias y 6 rebotes). Aldridge, Wallace y Matthews funcionan bien. Y Rudy lo ve todo desde el banquillo tras terminar con 7 puntos y 1 rebote en 20 minutos, en una noche desacertada desde el triple.
Boston 81 Charlotte 83
Otro grande que tropezó por escaso margen fue Boston y nuevamente lo hizo en el Garden tras haber caído anteriormente con Memphis. Ahora, el triunfo se lo llevó Charlotte a pesar de que jugaba sin Stephen Jackson.
Tropiezo grave el de los Celtics, mucho más grave que el de los Spurs, porque Chicago se va y Miami acecha. Están a punto de caer a la tercera plaza del Este. Desde los cambios de febrero, el equipo no funciona como antes.
La derrota fue doblemente inesperada, por el rival y por cómo se produjo. Porque los de Rivers dominaban por 13 puntos en el último cuarto y sufrieron un parcial de 0-16 que adelantó por primera vez a los Bobcats en el marcador a algo menos de 4 minutos del final (75-76).
A partir de ahí, se instaló la emoción y los locales tuvieron la última jugada para ganar, pero ni Ray Allen primero, ni Kevin Garnett después acertaron en sendos triples lanzados a 5,9 y 0,9 segundos del final. Y la sorpresa se cumplió.
Por parte local, destacó Pierce con 18 puntos. Allen hizo 14. El equipo jugó de forma desangelada. Por parte visitante, el factor sorpresa fue D.J.White (17 puntos y 6 rebotes en 24 minutos). Henderson hizo 15 tantos y Augustin, 14.
Hubo doble participación hispana, aunque sin protagonismo: Arroyo hizo 2 puntos en 5 minutos y Nájera se quedó en blanco tras ver la acción durante 6 minutos.
Miami 111 Philadelphia 99
Miami derrotó a Philly y está cada vez más cerca de arrebatar la segunda plaza del Este a Boston. Eso sí, el triunfo no fue sencillo. De hecho, los Heat tuvieron que hacer un esfuerzo supremo en el último cuarto para remontar el partido gracias a un demoledor parcial de 34-17.
En ese esfuerzo, el papel estelar le correspondió a Dwyane Wade, que hizo un partido colosal que se resume en números de leyenda: 39 puntos, 11 rebotes, 8 asistencias, 5 tapones y 3 robos. En los últimos 25 años, sólo Shaquille O'Neal había logrado ese tipo de cifras en un partido en esos 5 apartados estadísticos. Tras Wade, los 2 de siempre: James (32 puntos, 10 rebotes, 3 robos y excelentes porcentajes) y Bosh (20 puntos y 10 capturas en los aros).
Es decir, nuevamente Miami fue más un trío que un equipo. Entre sus 3 estrellas: 91 de los 111 puntos anotados, 58 de los 83 tiros intentados y 31 de los 49 rebotes capturados. El resto, 'de miranda'. El cuarto mejor anotador del equipo no pasó de 6 puntos.
Los Sixers no supieron hacer frente en los tableros a su rival y terminaron perdiendo pese a jugar en clave colectiva. Lou Williams hizo 24 puntos en 25 minutos, anotando 4 triples y dando 5 asistencias, Thaddeus Young sumó 15 y 8 rebotes y otros 3 jugadores superaron la decena, mientras que Nocioni jugó 5 minutos y erró el único lanzamiento que hizo.
Las tenistas Caroline Wozniacki y Serena Williams estuvieron en el choque aprovechando su participación en el torneo de Miami.
Orlando 95 New Jersey 85
Victoria de Orlando que tuvo como punto negro la lesión en el segundo cuarto de su base Jameer Nelson cuando Jordan Farmar cayó sobre su rodilla.
Dwight Howard dominó los tableros (21 puntos y 14 rebotes), empequeñeció a un gris Brook Lopez, pero volvió a las andadas y tras una serie de partidos tirando de forma excelente los tiros libres, anoche hizo 7 de 18. Su perfecto lugarteniente fue Turkoglu, que ejerció de base real con 20 puntos y 13 asistencias. Y buen partido de Ryan Anderson, autor de 15 puntos -todos desde el triple- y 9 rebotes. Sólo tiró desde más allá del arco (5 de 8).
En los Nets, 19 puntos de Anthony Morrow, 15 y 16 asistencias de Jordan Farmar y 8 pases de canasta de su ex compañero en los Lakers Sasha Vujacic. Kris Humphries no flaqueó y concluyó con 14 tantos y 10 rebotes.