El baloncesto no es una ciencia exacta. Miami había perdido sus últimos 5 partidos y los Lakers no cedían desde el All-Star, habiendo ganado 8 consecutivos. Sin embargo, anoche, en Florida, los Heat volvieron a ganar el duelo directo con su gran rival, al que ya vencieron en L.A.
A diferencia del partido del Staples, éste fue un choque igualadísimo que no se decidió hasta el final, momento en el que Wade y James tiraron de galones para decidir la suerte del partido. Pau Gasol anotó 20 puntos, siendo el segundo mejor anotador angelino tras Kobe Bryant.
Además, Dallas ganó sin contemplaciones a New York por 18 puntos de ventaja con 8 tantos y 3 rebotes de Barea y Denver venció también sin complicaciones a domicilio a los Suns con titularidad de Gary Forbes, que jugó 21 minutos y terminó con 5 puntos y 9 rebotes.
Miami 94 L.A.Lakers 88
Las trayectorias anteriores, los precedentes de enfrentamientos directos... nada cuenta cuando se enfrentan dos equipos de este calibre. Cada partido entre ellos es una historia distinta.
Anoche lo fue. Ni los Heat fueron los frágiles Heat salidos del All-Star, ni los Lakers fueron los inabordables Lakers surgidos de la cita de las estrellas. Y la cosa estuvo muy, pero que muy igualada.
La primera parte fue un catálogo de buenas maneras ofensivas y escaso rigor defensivo. Se fueron los contendientes al descanso con un apretado 55-53.
En los 2 primeros cuartos, Bosh dominaba la ofensiva local con 16 puntos, pero los elementos extra que permitían la buena acción de Miami fueron Chalmers y Miller. El primero empezó a lo grande y pronto alcanzó los 9 puntos, todos desde el triple (ya no metió más puntos en el partido); el segundo hizo una extraordinaria primera mitad en la que estuvo hiperactivo, metió 11 puntos y capturó 5 rebotes en sólo 9 minutos. James y Wade permanecieron en un segundo plano.
Los Lakers tiraban de Kobe y Pau: 31 puntos entre ambos, 17 de Bryant y 14 de Gasol. Pero tenían graves problemas: su banquillo estaba siendo inferior al banquillo local y, fundamentalmente, el equipo andaba lastrado por un muy deficiente trabajo en el rebote defensivo. Tanto fue así, que al descanso en el aro visitante los Lakers habían capturado 10 rebotes y los Heat, 12. Gasol anduvo algo perdido en esa faceta, pero peor le fue a Bynum, que en los primeros 24 minutos capturó 1 rebote cuando venía de atrapar 50 en los últimos 3 encuentros.
El tercer cuarto supuso un giro radical. Se pasó de la ofensiva de los dos primeros a la racanería total. Miami tardó casi 5 minutos en meter sus primeros puntos y entre los dos equipos sumaban 2 tantos en los primeros 4 minutos de un cuarto que se fue hacia derroteros defensivos y juego espeos, muy espeso. Parcial final de 13-17 y los de Phil Jackson empezaban el cuarto final 2 arriba (68-70) tras una canasta sobre la bocina de LeBron James.
Todo siguió transcurriendo con igualdad y todo se decidió a última hora. Miami minimizó en la segunda parte el alcanza de Bryant y Gasol, que pasaron de anotar 31 puntos en la primera mitad a sólo hacer 13 en la segunda. También debilitó la presencia de Artest, muy activo en la primera parte. Sólo Bynum resucitó tras el descanso, pero bien podía hacerlos si Miami paraba a cambio a Kobe y Pau, objetivo que logró.
El final, sin embargo, fue un cara o cruz. La cara fue para Wade y James y la cruz para Bryant.
Wade metió un canastón importantísimo a 46 segundos del final que puso a Miami 4 arriba (92-88). Acto seguido se sucedieron 2 pérdidas de balón, la primera de Kobe Bryant y la segunda de Dwyane Wade. Y llegó entonces 1 tiro vita, 1 triple de Kobe para poner el partido en un puño, 1 triple frontal que se quedó corto y que dio paso a 2 tiros libres de LeBron James, que mató el partido al anotarlos (94-88 a 19 segundos del final). Miami había superado sus miedos.
Al final, victoria de los Heat en un partido tan equilibrado que la máxima diferencia de cada equipo en el marcador fue de 6 puntos. Los Lakers mejoraron en el rebote tras el descanso, pero terminaron perdiendo la batalla, como perdieron la batalla en la pintura (46 puntos locales por 30 visitantes).
En Miami, el trío estelar estuvo ahí: Bosh terminó con 24 puntos y 9 rebotes y tuvo el protagonismo que pedía (lanzó 17 veces), Wade logró 20 con 4 robos de balón, aunque hizo un 9 de 23 en el tiro merced a una mala primera parte, y James sumó 19 puntos, 8 rebotes y 9 asistencias. Destacable, como ya dijimos, el papel en el primer cuarto de Chalmers y en toda la primera mita de Mike Miller, que sólo disputó 16 minutos.
En los Lakers, 24 tantos de Bryant, con 4 de 8 triples, y 20 de Pau Gasol, que jugó 40 minutos y acabó con 5 rebotes (aquí estuvo flojo) y 8 de 16 en el tiro de campo. Bynum resucitó en la segunda mitad para acabar con 13 puntos y 12 rebotes (1 rebote en la primera parte y 11 en la segunda) y Artest concluyó con 9 puntos, 9 rebotes y 6 pases de canasta. Odom sólo jugó 19 minutos.
Dallas 127 New York 109
Esta vez no hubo un Carmelo Anthony salvador. Victorias sin contemplaciones de Dallas ante unos Knicks bastante planos y excesivamente frágiles en defensa. Un triunfo que unido a la derrota de los Lakers en Miami afianza a los Mavericks en la segunda plaza del Oeste.
No hubo mucha historia. Dallas endosó 72 puntos a los Knicks en la primera parte (72-51) y el partido se acabó para siempre. Defensa de papel de los neoyorquinos, que llegaron a perder durante el partido por 26 puntos. La emoción brilló por su ausencia.
Dominio local en todas las facetas del juego con Nowitzki como mejor anotador con 23 puntos a los que añadió 9 rebotes, aunque no tuvo buenos porcentajes en el tiro de campo. Marion sumó 22 y 8 rebotes y Terry volvió a ejercer de sexto hombre con 21 tantos en 27 minutos. Muy bien el francés Beaubois (14 puntos y 6 asistencias en 21 minutos) y nuevamente notable Barea, que no flaquea: 8 puntos y 3 rebotes en 17 minutos. Anotó 2 triples.
Stoudemire fue la gran figura de los Knicks. Acabó el ex de los Suns con 36 puntos, siendo de largo el más productivo de los visitantes. Fields añadió 19 tantos, Anthony 18 con 10 rebotes y 5 pases finales y Douglas se fue también a 18 y repartió 8 asistencias.
Phoenix 97 Denver 116
13 años llevaba el técnico George Karl sin ganar en Phoenix. Pues bien, anoche ganó y lo hizo bien, sobrado, con total tranquilidad.
El partido llegó al descanso con un 49-59 para los visitantes, pero el magnífico tercer cuarto de los de Colorado rompió para siempre cualquier atisbo de emoción. Y los Nuggets comenzaron el cuarto final 24 puntos arriba (66-90). El US Airways Center era suyo.
Lo más notable para nosotros fue la titularidad inesperada del panameño Gary Forbes aprovechando las ausencias de Gallinari y Afflalo. Forbes disputó 21 minutos, anotó 5 puntos con 1 de 5 en el tiro y colaboró de forma decisiva en el rebote al capturar 9 rechaces. Es decir, cumplió sobradamente.
Nene, mientras, fue un mazo en las cercanías del aro (22 puntos en 26 minutos) y Lawson, el perfecto director del juego: 20 tantos, 11 asistencias y 4 recuperaciones de balón. Mozgov y Koufos jugaron 5 minutos cada uno.
En los Suns, llegaron a jugar al hilo de la circunstancias Dowdell y Siler, lo que habla bien claro de la debacle local, a la que contribuyó el más que gris partido de Steve Nash y el horrible ejercicio ofensivo de Vince Carter (2 de 11 en el tiro). Los mejores, dos suplentes: el polaco Gortat, abonado al doble doble (14 puntos y 18 rebotes) y Dudley -13 tantos-.