Los Grizzlies siguen mostrando un gran nivel de juego. Anoche, sin Gay ni Mayo, ganaron en la prórroga a los Thunder en Oklahoma City, un triunfo de relumbrón. Menos emocionante fue el Milwaukee-Toronto, que se saldó con victoria local por 18 puntos de ventaja.
Marc Gasol hizo 12 puntos en Oklahoma y Greivis Vásquez disputó 17 minutos. En Milwaukee, 9 de Delfino, que no fue titular, y desastrosa noche de José Manuel Calderón que acabó con un incomprensible 2 de 15 en el tiro, una efectividad casi nula impropia de un base que suele ofrecer muy buenos porcentajes.
El que estuvo efectivo al máximo fue LeBron. James terminó con 41 puntos, 11 rebotes y 8 asistencias y dio con su juego una victoria muy sufrida a Miami frente a unos sorprendentes Pacers.
Oklahoma City 101 Memphis 105 (tras prórroga)
Valiosísima victoria de los Grizzlies en una de las canchas más complejas del Oeste por la calidad del rival. Valiosísima porque le sirve para estar ahí, en plena pugna por los playoffs, el gran objetivo del equipo de Hollins. Un equipo, por cierto, que cada ve juega mejor. Sin ir más lejos, anoche ganó a los Thunder de Kevin Durant y Russell Westbrook sin poder contar con Rudy Gay (lesionado) y O.J.Mayo (sancionado). No importó. Los sustitutos lo bordaron.
El sustituto que más protagonismo tuvo fue Tony Allen, que estuvo inmenso. Allen y Randolph fueron las 2 piezas básicas del triunfo. El escolta, ex de Boston, se fue a los 27 puntos, 5 robos y 3 tapones con muy buenos porcentajes, pero es que, además, completó una labor defensiva extraordinaria. Mientras, Randolph puso sobre la mesa 31 puntos y 14 rebotes en otra demostración de clase.
Fueron los más destacados, pero sus compañeros no se apartaron. Sam Young estuvo bien, Mike Conley superó sus problemas de faltas personales para resultar crucial en los últimos segundos de la prórroga y Marc Gasol terminó con 12 puntos y 5 rebotes. Jugó 44 minutos, lo que da una idea de la importancia que Hollins dio al español, porque su universo de intangible resultó anoche infinito. Nada dicen los números de lo muy importante que fue Gasol.
Todos los componentes del quinteto inicial de Memphis acabaron con dobles dígitos en anotación. El contrapunto, la floja labor de la suplencia, que sólo aportó 8 tantos. Greivis Vásquez estuvo en ese tono gris. Dispuso de muchos minutos -17- por los problemas de faltas de Conley en momentos puntuales, pero no terminó de romper. Acabó el caraqueño con 4 puntos, 2 rebotes y 3 asistencias. En defensa, tuvo más de un desliz.
Los pujantes Thunder no terminaron de verlo claro nunca. La solidez mostrada por los Grizzlies en el tercer cuarto (17-30) sembró de dudas al equipo de Brooks, que dominó a su antojo el rebote, faceta en la que Memphis naufragó (58 capturas a 30). Sin embargo, los locales cometieron 34 faltas personales (una cifra demencial) y perdieron el partido en su descontrol de las posesiones (3 robos y 23 pérdidas por 11 y 10 de Memphis).
Durant anotó 31 puntos con 10 rebotes y Westbrook hizo 21 con 11 asistencias, pero perdió 8 balones. Buen inicio de Krstic que no cuajó después, destellos de calidad puntuales y por rachas de Harden y crudeza en los tableros de un gran Ibaka (14 rebotes y 3 tapones), que peleó lo suyo con Marc Gasol, quién sabe si en el futuro compañeros de selección.
Tony Allen, que tuvo una noche sembrada, anotó un 2 más 1 a 58 segundos del final del último cuarto para empatar a 95 y así se llegó al final del tiempo reglamentario, gracias sobre todo a una defensa brutal en uno contra uno del propio Allen sobre Kevin Durant. ¡Qué demostración de recursos defensivos!.
En el tiempo extra, Randolph y Conley dieron un paso adelante, siendo el base el que cerró el partido con 2 tiros libres quedando 5 segundos para el final.
Milwaukee 92 Toronto 74
Si en Oklahoma hubo emoción, en Wisconsin escaseó. Porque los Bucks fueron muy superiores. Eñ equipo de Skiles contaba por fin con su rotación casi al completo. Esa plantilla recompuesta incluía el que afrontaran el partido juntos Jennings, Salmons, Maggette, Delfino y Bogut. Lo nunca visto esta temporada. Con todos ellos disponibles, el equipo fue otro.
Salmons ocupó el puesto de titular y dejó a Delfino en la banca de inicio. El argentino no respondió mal, aportando al final 9 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias en 22 minutos de acción.
El dominio local resultó incontestable. El equipo de Skiles defendió de cine y jugó de modo coral: muchos anotando y todos defendiendo. Salmons hizo 17 puntos y Maggette, 16 con 9 rebotes, pero Bogut, Jennings (que empezó a lo grande para ir diluyéndose) y Mbah a Moute (tremendo con 10 puntos y 14 rebotes) también alcanzaron o superaron la decena.
Toronto, un desastre. Desastre que empezó por su propio director de juego, porque Calderón tuvo una noche para olvidar. El extremeño hizo 6 puntos, 4 rebotes y 7 asisetencias en 33 minutos, pero es que estuvo especialmente desafortunado, como pocas veces lo ha estado: ¡2 de 15 en el tiro de campo y 6 pérdidas de balón, 3 en un nefasto primer cuarto!. Ese inicio le marcó. Calderón erró sus primeros 7 tiros a canasta, incluidos 6 en ese primer cuarto en el que también perdió 3 balones.
Los Raptors anotaron 74 puntos y estuvieron mal toda la noche (38 tantos en la primera mitad y 36 en la segunda). Hicieron un 36% en el tiro de campo y 0 de 10 en el triple. Llevaban más de una década los canadienses anotando al menos un triple por encuentro. Pues bien, en unos días se han quedado 2 veces en blanco. Crisis total en el tiro triple.
Bargnani -23 puntos- y DeRozan -18- no estuvieron mal. Pero el mal día de Calderón y Weems fue decisivo. Amir Johnson capturó 11 rebotes y el brasileño Barbosa tuvo un triste regreso a las canchas.
Miami 117 Indiana 112
Los Pacers habían tenido un fantástico e inmaculado arranque con su nuevo entrenador, Frank Vogel. Hasta ahora, todo eran parabienes. Y a partir de ahora, más, aunque perdieran. Y es que cayeron en Miami ante los Heat sin merecerlo. Perdieron los Pacers porque no se creyeron que pudieran ganar a James, Wade y Bosh.
Indiana llegó a acumular 14 puntos de ventaja, pero terminó sucumbiendo ante sus propios miedos y el poderío de un imparable LeBron James, que terminó con 41 puntos, 11 rebotes, 8 asistencias, 3 robos y 15 de 23 en el tiro de campo.
Al protagonismo total de James, le acompañó un ejército de secundarios de lujo: Bosh (19 puntos y 7 rebotes), Wade (17 y 7 asistencias) y Chalmers (16 puntos). Carlitos Arroyo no saltó a la pista.
Indiana dejó una gratísima impresión con un gran Hibbert (20 puntos y 10 rebotes) y un tremendo Hansbrough (18 puntos en 22 minutos con 6 de 6 en el tiro). Buena la dirección de Darren Collison y 19 tantos de Danny Granger.
El partido se decidió por un suspiro. James colocó el 115-112 a 8,9 segundos del final. Sacaban para buscar el empate los Pacers, pero a Dahntay Jones se le nubló el entendimiento, quedó cegado y no sacó. Se cumplieron 5 segundos sin soltar la bola, los visitantes perdieron el balón y con ello, el partido.