Fiesta dominicana en el Palace of Auburn Hills con premio final para un impresionante Charlie Villanueva. Y es que Al Horford brilló, pero sufrió una dolorosa derrota con sus Hawks. Otro triunfador de la jornada fue Luis Scola, que estuvo inmenso.
El argentino lideró de forma excepcional a los Rockets en su sencillo encuentro ante los Kings de Sacramento de Francisco García, que estuvo bien. Al de Buenos Aires le bastaron 3 cuartos, ya que los últimos 11 minutos del encuentro los pasó saboreando el éxito particular y colectivo desde el banquillo.
Por otro lado, Philadelphia ganó en Nueva Jersey sin la participación de Andrés Nocioni y los Warriors cortaron su mala racha de resultados al imponerse a Minnesota en el partido más anotador desde que está en la NBA de Darko Milicic.
Detroit 103 Atlanta 80
Tremendo desastre de los Hawks en el último cuarto. Recibieron los de Larry Drew 39 puntos en esos últimos 12 minutos de juego. El parcial de 39-19 arruinó directamente las opciones del conjunto de Georgia, que fue aniquilado por Charlie Villanueva y un renacido Tracy McGrady. El primero anotó en ese último cuarto 16 de sus 23 puntos y fue un vendaval ofensivo imparable; el segundo hizo sus 4 triples del partido en una soberana exhibición desde el perímetro.
Atlanta tuvo numerosos problemas. El más grave fue su incapacidad para poner en aprietos a Detroit en el aro local, donde el reparto del rebote resultó doloroso para los visitantes: 33 a 3.
Tamaña desigualdad marcó el devenir de un partido en el que los Halcones se desinflaron de mala forma en la recta final sin que nada sirvieran los 26 puntos de Josh Smith o el partido más que notable de Al Horford, que casi nunca falla. El dominicano acabó con 17 tantos y 12 rebotes en 43 minutos de juego, pero terminó, como el resto de sus compañeros, desarbolado e impotente. Y además tuvo que ver cómo el protagonismo se lo llevaba otro dominicano, Charlie Villanueva, el jugador de la noche.
Villanueva lo bordó. Salió como es habitual de la banca y no disputó más allá de 28 minutos. No precisó más para embarrar la felicidad de Atlanta. En esos 28 minutos hizo de todo -menos asistencias-. Su espíritu egoísta salió a relucir en su máxima intensidad, pero esta vez para bien y logró 31 de valoración en esos 28 minutos de ensueño.
El de Queens estaba caliente, ardía. Sus números así lo dicen: 23 puntos, 11 rebotes, 1 tapón, 3 robos sin pérdida alguna de balón, 3 de 7 desde el triple. Y, sobre todo, ejecutor preciso en los momentos cruciales, pues 16 puntos llevaron su firma en el decisivo último cuarto. ¡Qué tremenda exhibición del jugador hispano!.
Junto a él, Richard Hamilton -24 puntos- y el resucitado T-Mac, autor de 16 puntos, 6 rebotes y 4 de 6 triples, todos ellos, esos 4 triples, logrados en ese último período. Además, Stuckey sumó 16 tantos y 10 pases de canasta.
Houston 118 Sacramento 105
Otro que anoche estuvo en ganador, absolutamente 'on fire' fue Luisito Scola. El bonaerense lideró el triunfo de Houston Rockets y lo hizo a lo grande, sobrado, lo que le permitió descansar y saborear su gran partido desde la banda en los últimos minutos.
Los Rockets rompieron a los Kings en los cuartos centrales. Lo hicieron con un parcial de 64-42 que les dejó en el inicio del cuarto final con 19 puntos de ventaja (91-72). Hasta 7 jugadores locales lograron 10 o más puntos. Pero sobre todos ellos destacó 'Luifa'.
Scola hizo una aceptable primera parte en la que sumó 9 puntos, aunque con 4 de 12 en el tiro doble. Tal vez por eso, salió encorajinado en el tercer cuarto, un tercer acto en el que bordó el baloncesto y levantó al Toyota Center. Porque el argentino hizo en ese tercer cuarto 14 puntos con 6 de 7 en el tiro y con su actuación deslumbrante derrumbó la resistencia de Sacramento.
Acabó el ex del Tau Vitoria con 23 puntos, 10 rebotes y 3 asistencias en sólo 29 minutos. Excelentes números para un excelente partido en el que tras su exhibición del tercer cuarto, jugó 1 minuto del cuarto final y se retiró a descansar los últimos 11 minutos del partido. Todo ello bajo la atenta mirada de un mito llamado Hakeem Olajuwon, que presenció el partido de su ex equipo.
Junto a Scola, destacaron los 18 puntos de Chase Budinger, aunque las ayudas ofensivas vinieron de muchos sitios al ser hasta 7 jugadores los que anotaron dobles dígitos. Y todo ello a la espera de Ming y sin poder contar tampoco con Brooks.
Por parte californiana, los mejores fueron el novato Cousins y Carl Landry, ambos con 17 puntos, que el primero acompañó con 7 rebotes. Los Kings no pudieron contar con Tyreke Evans y el dominicano Francisco García lo hizo bien durante los 26 minutos que vio pista (10 puntos y 2 asistencias con 5 de 7 en el tiro de campo).
New Jersey 77 Philadelphia 82
No jugó Nocioni, ahogado por los vientos juveniles que soplan en estos Sixers y que también han enterrado al lituano Songaila.
No jugó el argentino, pero al menos esta vez el equipo de Doug Collins ganó a unos Nets muy pobres que apenas acertaron el 34% de sus tiros, pero que equilibraron ese defecto luchando encarnizadamente y con éxito por el rebote gracias a la productividad en este campo de Derrick Favors y Kris Humphries, que capturaron 26 (13 rebotes cada uno).
Dos tiros libres anotados por Iguodala a 15 segundos del final resolvieron el choque. Un Iguodala que hasta ese momento había vivido un partido gris tirando a negro. Y es que los mejores de los Sixers fueron el joven base Holiday -19 tantos-, el pívot Hawes -18- y Brand -15-. El número 2 del draft, Evan Turner, volvió a hacer agua y no anotó en los 15 minutos que estuvo en acción. Al menos, reboteó bien.
En los Nets, el máximo anotador fue Brook Lopez con 16 puntos y el más feliz de la plantilla ni siquiera jugó. Era el veterano Joe Smith, que ya se sabía de camino hacia los Lakers. ¡Menudo cambio!.
Golden State 108 Minnesota 99
El Oracle Arena respiró tranquilo. Su equipo vencía a los Timberwolves y rompía así una racha de 7 derrotas consecutivas. Minnesota era el cliente ideal, pues de 14 partidos como visitante ha perdido 13.
Con este panorama, dos equipos por ahora menores, se desarrolló un partido tan celérico como impreciso. Hubo 39 pérdidas de balón y los locales, por lo menos, anduvieron certeros en el tiro y especialmente felices desde más allá del arco (11 de 22 triples).
La pareja exterior Ellis-Williams fue decisiva. Monta Ellis jugó los 48 minutos y encestó 34 puntos; Reggie Williams volvió a sustituir con éxito al lesionado Curry y aportó 26 puntos con 4 triples, 22 de esos puntos encestados en la segunda mitad. Mientras, el dúo interior Lee-Biedrins no amenazó en ataque pero sí se empleó a fondo en el rebote (11 y 12 capturas), lo que ayudó a la victoria.
En Minnesota, Darko Milicic vivió su partido más pródigo en anotación desde que está en la NBA (25 puntos y 11 rebotes), Beasley sumó 19, Martell Webster hizo 17, Kevin Love se fue a 13 y 14 rebotes (aunque falló muchos tiros) y Ridnour repartió 11 asistencias.