La NBA, como es habitual, no ha tardado en reaccionar a las duras críticas que el entrenador de los Cleveland Cavaliers, Byron Scott, dirigió al trío arbitral del encuentro que enfrentó a su equipo con los Orlando Magic, saldado con victoria de estos por 111 a 100.
Scott no se cortó a la hora de hablar ante los medios de la actuación de equipo arbitral formado por Ed Malloy, Bennie Adams y Kevin Fehr a quienes culpó de la derrota de los suyos pese a que su equipo estuvo casi todo el encuentro lejos de acercarse a la victoria.
“Resulta difícil cuando tienes que jugar contra 8”, afirmó un enfadado Scott, “Hay 5 con camisetas blancas y 3 con rayas (en referencia al uniforme arbitral). Es difícil jugar ahí fuera contra todos ellos”.
Pero no se quiso quedar ahí. “Soy consciente de que va a haber errores arbitrales. Es parte del juego, son humanos. Pero no durante 48 minutos”, prosiguió, abundando en lo que consideraba inexplicables decisiones arbitrales para terminar recomendando a los colegiados que se "buscaran otro trabajo".
Toda esa diatriba soltada por Scott ante los medios el pasado viernes es la que le ha costado la sanción que ahora ha hecho pública la NBA y que le obligará a abonar 35.000 dólares de multa.