El ala-pívot de los Golden State Warriors David Lee ha tenido que ser intervenido quirúrgicamente por segunda vez para tratar de solventar la infección que sufre en el codo izquierdo. Lee, que no ha jugado desde el pasado miércoles, estará como poco 10 días más de baja.
El jugador deberá permanecer ingresado varios días en el hospital sometido a un tratamiento de antibióticos y vigilado por los médicos para garantizar que la infección no se reproduzca y una vez reciba el alta, deberá descansar hasta que la herida se cure por completo.
Afortunadamente, la infección de la herida que sufre en la parte interior de su codo izquierdo ha sido atajada a tiempo y ha afectado únicamente a la piel y los tejidos superficiales, sin alcanzar músculos ni huesos, por lo que se espera que su recuperación sea plena y no queden secuelas.
Los problemas de Lee empezaron el pasado miércoles en el partido ante su antiguo equipo, los Knicks, cuando su codo alcanzó de forma accidental la boca de Wilson Chandler. El impacto provocó una herida en la extremidad del ala-pívot a la que en principio no se dio mayor importancia.
Pero con el paso de los días, su situación empeoró y el pasado sábado tuvo que ser ingresado en el Hospital Stanford ante la evidente necesidad de tratar la infección que sufría antes de que se extendiera y causara un daño mayor. Según los médicos que están tratando al jugador, la infección de heridas causadas por contacto con la boca, como ocurre en el caso de un mordisco, es habitual dada la concentración de gérmenes existente en esa zona.