El base de Los Angeles Lakers Derek Fisher y el ala-pívot de los Miami Heat Udonis Haslam seguirán unidos a sus actuales franquicias. En ambos casos, la fidelidad a sus equipos de toda la vida ha podido más que las mejores ofertas económicas realizadas por otros conjuntos.
A punto de cumplir los 36 años, Derek Fisher jugará el año que viene su temporada número 15 en la NBA. De las 14 anteriores, en 11 ha vestido la camiseta de los Lakers, los mismos colores que parece querer vestir hasta el día de su retirada.
Ha firmado por 3 años el que seguramente será ya su último contrato como jugador y aunque aún no se conocen las cifras del acuerdo, él mismo ha revelado que lo ha hecho perdiendo dinero y por lealtad a la estrella del equipo, Kobe Bryant, junto al que ha ganado 5 campeonatos.
“Él y yo hemos jugado juntos durante 11 temporadas, llegamos a la liga juntos cuando éramos unos chavales y ha sido leal conmigo incluso cuando otros tenían dudas”, ha dicho Fisher de Bryant tras revelar que el escolta le pidió que se quedara aunque también le aseguró que apoyaría cualquier decisión que tomara. “Aunque no es el contrato más lucrativo que me han ofrecido en esta postemporada, es el más valioso”, ha dicho el base sobre el acuerdo alcanzado.
Haslem, 5 años más en Miami
También Udonis Haslem ha preferido la fidelidad al dinero y finalmente ha decidido renovar por Miami Heat, el equipo en el que ha jugado sus 7 temporadas como profesional. Lo ha hecho por 5 años y 20 millones de dólares, casi 15 millones menos de lo que le habían ofrecido potentes equipos como Dallas Mavericks o Denver Nuggets.
El ala-pívot ha preferido quedarse donde está y seguir unido al equipo de su ciudad natal a pesar de que, en principio, pasará de la titularidad a ser el suplente de Chris Bosh, algo que ya ha dejado claro que no es un problema para él.
En este caso, también ha sido importante la intervención de otra estrella, Dwyane Wade, con quien Haslem ha jugado en Miami desde la temporada 2003-04 en que ambos llegaron al equipo y con quien tiene una muy buena relación. “Estaría cambiando mi ADN si me hubiera ido sólo por dinero”, ha asegurado tras anunciarse el acuerdo.