No se recuerda un 'big three' tan poderoso. El colapsado mercado de agentes libres de este verano ha generado un equipo casi imposible, unos Heat de Miami que contarán la próxima campaña con LeBron James, Chris Bosh y Dwyane Wade. Palabras mayores, idea gigante.
James anunció su decisión en un programa de la ESPN, un hecho más que cuestionable que marca una vez más la realidad de un héroe propio del siglo XXI al que le falta la emoción real de los héroes del siglo XX.
La decisión del 'Rey' desequilibra el mercado y desequilibra tal vez la competición, aunque habrá que ver si Miami puede hacer un equipo competitivo alrededor de 3 superestrellas que van a cobrar tanto como algunos equipos con su plantilla al completo.
El paso dado por Bosh al unirse a Wade había desatado todos los rumores. James quería no sólo el anillo, sino hacer historia a medio y largo plazo. Y ahora tiene mimbres para conseguir en Miami lo que no ha conseguido en Cleveland.
Los números del joven James en Cleveland asustan a nivel individual: 27,8 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias y 1,7 robos en 548 partidos de temporada regular. El chico de Akron, que todavía tiene 25 años, ha acumulado 7 temporadas en los Cavs, vistiendo la elástica del equipo de su tierra natal, engordando su estadística individual y suspirando por un anillo que no ha llegado, aunque fue una vez finalista de la NBA sin haber pasado nunca por la universidad.
Sus 113 kilogramos de puro músculo viajan ahora a Florida, equipo campeón de la NBA en 2006 con el dúo Wade-Shaquille O'Neal.
Con esta ruptura brutal de la situación, los dobles campeones y dominadores del torneo -Los Angeles Lakers- ven como una amenaza inmensa se coloca sobre su cabeza. Se llama Miami Heat y cuenta con 3 megaestrellas. Lo nunca visto.
Habrá un antes y un después. Y es que no se recuerda una conjunción de jugadores tan mediáticos en un mismo equipo. Desde esta noche, el equipo con mayor generación económica de la historia de la NBA se llama Miami. Nunca un equipo moverá tanto dinero como el que van a mover estos enloquecidos Heat, los nuevos Midas del deporte de la canasta que querrán traducir todo este potencial en títulos y la composición de una era dorada en el terreno deportivo.