El proceso de reclutamiento y el historial académico del base de la Universidad de Kentucky Eric Bledsoe están bajo sospecha. La NCAA ha abierto una investigación ante los indicios de que se falsearon datos y se violaron las reglas a las que están sometidas las universidades.
Bledsoe formó pareja en el juego exterior de Kentucky con el favorito para liderar el draft de este año, John Wall. Los Wildcats terminaron como primeros cabezas de serie del torneo de la NCAA tras sumar 35 victorias y sólo 3 derrotas, pero cayeron inesperadamente en la final regional del Este ante West Virginia.
El base ha abandonado ya la universidad, tras sólo 1 año, y al igual que Wall, aspira a ser seleccionado en el draft del próximo junio aunque bastante por detrás de su compañero ya que las proyecciones le sitúan entre el final de la primera ronda y el comienzo de la segunda.
Dinero y notas infladas
Según la información publicada por el New York Times, las investigaciones se estarían centrando en una posible alteración del expediente académico del jugador en su etapa en el instituto, en los pagos realizados por el apartamento que compartieron él y su madre durante el pasado año y en la posibilidad de que su entrenador en el instituto, Maurice Ford, hubiera pedido dinero a las universidades que trataban de reclutarlo.
Al parecer, Bledsoe se cambió de instituto en el último año previo a su paso a la universidad. En su nuevo centro, el instituto A.H. Parker de Birmingham (Alabama), el jugador, según las informaciones, necesitaba lograr una “improbable” mejora de su notas para conseguir el mínimo requerido para poder entrar en la universidad, algo que finalmente logró.
El director del instituto, Joseph Martin, ha negado que las notas de Bledsoe se inflaran, como también ha negado el que fuera su entrenador que solicitara dinero para el jugador a universidad alguna. “Siempre que un negro intenta ayudar a otro negro, hay algo malo detrás”, ha asegurado Ford al Times.
Ni el jugador, ni el entrenador de los Wildcats, John Calipari, ni ningún otro responsable de la universidad de Kentucky han querido comentar las informaciones publicadas. Tampoco la NCAA, cuyas investigaciones no se hacen públicas, ha entrado a confirmar o desmentir lo publicado por el Times.