La imagen de Greivis Vásquez sentado en la pista, desconsolado, rumiando una derrota sobre la bocina no hace justicia a la exhibición dada por el venezolano en los 2 últimos minutos de partido. Maryland ha caído eliminada ante Michigan State, pero Vásquez se ha ido a lo grande.
¡Qué grande es el 21 de los Terrapins!. Lo que ha hecho en la segunda ronda del Torneo de la NCAA merecía haber sido recordado en la historia de la Universidad de Maryland con una victoria, pero no ha sido así.
Maryland 83 Michigan State 85
Se enfrentaban el cabeza de serie número 4, Maryland, y el 5, Michigan St, en pos de llegar lo más lejos posible en la Región Medio Oeste. No era nada fácil para Maryland, pues delante estaban los Spartans, el equipo que el año pasado alcanzó la Final Four y que está entrenado por uno de los técnicos más reconocidos de la competición colegial, Tom Izzo.
De hecho, si alguien mereció ganar el partido fue Michigan St, que estuvo siempre por delante. Pero Greivis Vásquez estuvo a punto de firmar uno de los momentos más gloriosos del Torneo de la NCAA al anotar ¡10 puntos en los últimos 2 minutos de juego y dejar a su equipo al borde de la victoria!.
Perdía Maryland 51-67 a 12 minutos del final. Llevaba el equipo de Vásquez presionando formidablemente durante toda la segunda parte el saque de fondo, pero las pocas veces que los del estado de Michigan escapaban de la presión el balón acababa en Durrell Summers, que con sus triples machacó al rival.
Se llegó a los últimos 2 minutos con 71-80 para Michigan State y fue entonces cuando empezó el espectáculo Vásquez. Los Terrapins hicieron un parcial de 8-0 en 34 segundos y se metieron en el partido y la locura llegó con la serie del venezolano.
Vamos con esos 120 segundos mágicos: canasta maravillosa y tiro adicional, 2 más 1 (74-80 a 1:54 del final), triple tras un tuya mía al sacar de fondo (79-80 a 1:27), jugada personal y otra cesta doble que pone por delante a los suyos (81-80 a 39 segundos de la conclusión) y decisión intransferible, con el corazón, con todo, para hacer un uno contra el mundo y anotar la canasta que parecía de la victoria (83-82 a 6 segundos de la bocina). Locura en las gradas.
Pero llegó Korie Lucious y sobre la bocina anotó el triple que hundió a Maryland y alejó a Vásquez para siempre de su etapa universitaria.
Michigan State ganó anotando un 55,6% de sus tiros y 10 de 18 triples, pero perdiendo 18 balones por la presión del rival. Y ganó a pesar de quedarse buena parte del encuentro sin su estrella, Kalin Lucas, que se lastimó un pie y tuvo que seguir toda la segunda parte desde la banda.
Durrell Summers (26 puntos con 6 de 8 en el triple) y Raymar Morgan (17 tantos, 9 rebotes y 3 tapones) fueron sus mejores hombres, junto al héroe Lucious (13 puntos).
En Maryland, el base Eric Hayes sumó 18 puntos, 7 asistencias y 4 triples y los hombres altos -Jordan Williams y Landon Milbourne- ayudaron, aunque Milbourne flojeó en el rebote, capítulo en el que Maryland se dejó medio partido. Y luego estuvo Greivis, antológico, genial hasta el final, memorable. Sus números de despedida: 26 puntos, 8 asistencias, 4 rebotes y 3 robos, con 9 de 20 en el tiro de campo, 2 de 6 en el triple y 6 de 7 en el libre.
Acabó Vásquez sentado en la pista, destrozado, pero seguro que sus padres, Gregorio e Ivis, no cabían en sí de orgullo, porque habían visto desde las gradas la proeza de su hijo.