Monstruosa actuación de Emanuel Ginóbili. El argentino salió de titular y la rompió desde el primer momento para acabar con 38 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias y cara de circunstancias por la derrota. Barea y Nájera lo hicieron bien con los Mavericks, pero el primero se lesionó.
Fue al final del partido cuando el armador puertorriqueño se lastimó el tobillo izquierdo tras haber dado antes 9 asistencias. Sin duda, fue el lado triste de una nueva victoria de Dallas, que lleva ya 12 consecutivas.
En cuanto a los Spurs, cayeron en un final apretadísimo ante unos Cavs sin LeBron James, Shaquille O'Neal, el tal vez hijo pródigo Ilgauskas y con Jamison perdiéndose la segunda parte por lesión. Ante la ausencia en San Antonio de Parker, Ginóbili demostró que aún es aquel que todos recordamos que fue. Lo suyo resultó simplemente tremendo.
Cleveland 97 San Antonio 95
Habían transcurrido apenas 56 segundos de juego cuando Manu Ginóbili encaró su primer tiro, un triple, y lo enchufó. Había partido de titular, ausente Parker, y ya en la concentración de su mirada y en su tensión gestual se veía que iba a ser una de esas noche inolvidables.
Al hilo de las declaraciones de su agente USA, Herb Rudoy, acerca de su renovación o no con los Spurs, el bahiense trazó un escenario perfecto para la renovación o la subasta al alza en un mercado libre plagado de ojos abiertos. Porque lo que anoche hizo el 'Manudo' fue para quitarse el sombrero y no volvérselo a poner más.
Tras esa canasta inicial vinieron otras. Tantas, que a los 6 minutos de juego el argentino ya llevaba 11 de los 13 puntos de su equipo, y ya no paró. Las metió de todos los colores, con predilección por la línea de 3 desde donde enchufó 7 triples en el partido. Y defendió y habló con sus compañeros y gritó a quien se le pusiera delante. Resultado: 23 puntos al descanso. Aunque ya los había anotado cuando aún restaban por jugarse más de 5 minutos del segundo cuarto.
Manu no tuvo freno anoche, en el Quicken Loans Arena, ante la atenta mirada desde fuera de LeBron James, ausente ayer de nuevo por simple descanso.
El tercer cuarto resultó como de asueto para el bueno de Gino -3 puntos- para volver a la carga en el último con 12 tantos más. Sus totales extraordinarios: 38 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 2 robos, 5 de 12 en los dobles, ¡7 de 11 en los triples!, 7 de 7 desde la línea de castigo... Es decir, 39 de valoración en 37 minutos de juego. Y la impresión de estar delante del Ginóbili de antaño.
Lástima que muchos de sus compañeros no tuvieran su misma percepción, la de que estaban ante una oportunidad única para ganar en una de las más difíciles canchas de la NBA, aunque no contaran con Parker. Porque a los Cavs les faltaba de todo, desde James a O'Neal, pasando por la lesión que inutilizó a Jamison en la segunda parte o por la morriña de un hombre alto como Ilgauskas.
Tuvieron que tirar los locales de otras piezas. Fundamentalmente de sus bases Mo Williams (17 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias) y Delonte West (16 tantos y canastas decisivas en la parte final), pero también de Jamison, que hizo 17 puntos a pesar de solo jugar 21 minutos. El resto de ayudantes, jugadores como Anderson Varejao, Jared Williams o J.J.Hickson.
A pesar de ello, rompieron la maldición, que decía que en ausencia de LeBron la derrota era segura. Algo que les hará mucho bien psicológico de cara a playoffs.
En San Antonio, ausente Parker, dieron un paso adelante Ginóbili y George Hill (23 puntos), que además se aprovecharon del hecho de que la defensa local se focalizara en Duncan, que solo pudo anotar 13 tantos. El resto de jugadores, perdidos en ataque, con especial mención para Jefferson, 3 vulgares puntos, y Mason (0 de 8 en triples), dato éste capital, ya que se jugó los más importantes tiros de su equipo.
Con 93-90, jugada clave. Mason falla un triple, Duncan atrapa el rebote y Ginóbili, no se sabe cómo, rodeado de contrarios, se inventa un triple imposible para empatar a 14 segundos del final. Pero la repetición revela que está pisando y la canasta se rebaja a 2 puntos, dato no exento de una enorme trascendencia. Aún así, segundos después, los Spurs tienen una oportunidad nueva para empatar el partido, la bola la traslada Gino, le presionan y descarga magistralmente a Mason, solo, pero su tiro no entra. Restaban 3 segundos y los Spurs decían adiós al partido ante el acierto en los tiros libres en los últimos segundos de Williams y Varejao.
Pero fíjense cómo sería el partido que con todo ya decidido, Ginóbili lanzó a la 'remanguillé', como de broma, un triple sobre la bocina y lo anotó. Y se fue con su cara triste a vestuarios tras tan fantástica exhibición, pero con su tremendo orgullo intacto.
Minnesota 112 Dallas 125
Imparable máquina de ganar partidos estos Mavericks, que ayer sumaron su duodécimo triunfo consecutivo, que están más que afianzados en la segunda plaza del Oeste y que ya amenazan seriamente a los Lakers por el cetro occidental.
No fue fácil el triunfo en el Target Center, pero llegó en cumplimiento de todos los pronósticos. Llegó a pesar de que Dallas encajara 60 puntos cerca del aro y no dominara los tableros. Pero es que los Wolves perdieron ¡25 balones!. 8 fueron de la mano del joven Flynn.
Sin Dampier, Haywood y Terry, los Mavericks como si nada. Con el mejor Marion de la temporada (29 puntos, 14 rebotes y más participativo que nunca con 25 tiros a canasta). Y con Nowitzki -24 tantos- y Butler -23-. Pero también con Kidd, doble doble de puntos y asistencias- y con un nuevamente solvente titular llamado Beaubois.
Y en este baile festivo entraron los hispanos a saco como sexto y séptimo hombre de un equipo triunfal. Barea estuvo estupendo con 9 puntos, 9 asistencias y 4 rebotes en 30 minutos en los que encestó 4 de sus 8 tiros. La mala noticia llegó casi al final cuando se lastimó el tobillo izquierdo. Habrá que estar atento a las noticias que nos lleguen de Dallas. También Nájera brilló.
Porque el mexicano está en su mejor momento de los últimos 2 años y está jugando muchos minutos en un equipo puntero de la NBA. ¡Vaya cambio salirse de los Nets para llegar a los Cavs!. El de Chihuahua hizo 9 puntos y 3 rebotes en 26 minutos con 3 de 5 en el tiro de campo, incluido 1 triple. Y defendió y luchó como siempre. Un gran jugador de equipo este veterano Nájera.
La nota triste la puso Ryan Hollins, expulsado en el cuarto período tras golpear en la cabeza a Nowitzki. Cada uno juzgará la intencionalidad o no del golpe.
En Minnesota volvió Jefferson tras sus 2 partidos de sanción y lo hizo a lo grande, como no se le recordaba: 36 puntos y 13 rebotes con 15 de 21 en el tiro doble.
Otros 5 jugadores rebasaron la decena, pero muy lejos. Love sólo jugó 12 minutos, desconociendo en estos momentos la razón de tan corta estancia en la pista. Con él los Wolves son más Wolves. Pero ayer había un señor equipo enfrente, el equipo más en forma de la NBA.