Noche de espectáculo a medias, y por momentos mediocre, la que se vivió en el American Airline Center de Dallas. Los concursos de mates, triples y habilidades entretuvieron al público congregado y poco más. Nate Robinson se proclamó campeón en los mates por tercera vez.
El pequeño base de los Knicks volvió a dar una demostración de su portentosa capacidad de salto, sobre todo en la fase final del concurso, y se impuso en esa final al novato de los Raptors, DeMar DeRozan. El alero de los Bobcats, Gerald Wallace, y el base suplente de los Lakers, Shannon Brown, quedaron eliminados en la primera ronda.
“No habrá más títulos. He terminado. Éste es el último”, afirmó Robinson tras convertirse en el primer hombre en sumar 3 galardones.
Lo cierto es que el concurso de este año resultó soso, aburrido, sin imaginación y con poco sentido del espectáculo, dejando más bien fría a la grada. Nada que ver con el duelo mantenido el año pasado por Robinson y Dwight Howard.
Decepcionantes resultaron las actuaciones de Wallace y, especialmente, Brown, que para muchos era el favorito. Ambos pasaron con más pena que gloria y por momentos provocaron el estupor en los aficionados, que esperaban mucho más de ellos.
Los únicos que alcanzaron un nivel acorde con las exigencias fueron los dos finalistas, ¡lástima que lo alcanzaron en momentos distintos! (DeRozan lo hizo en la primera fase con dos estupendos mates y Robinson en la final, alcanzando su mejor nivel en la última volcada).
DeRozan obtuvo la máxima puntuación, 50 puntos, en su segundo intento, lo que le permitió llegar a la final con Robinson.
En ese intento, DeRozan capturó desde la línea de fondo el balón lanzado por su compañero Sonny Weems contra el canto del tablero y realizó un espectacular mate por el lado contrario de la canasta. Fue de lo mejor de un concurso al que faltó entre los jugadores la creatividad de otras ocasiones para hacer participar al público del espectáculo.
Kobe también ayudó
Además de Weems, también colaboraron Kobe Bryant con un tristísimo Shannon Brown, Flip Murray con su compañero Gerald Wallace y Danilo Gallinari con Robinson.
En la ronda final, donde decidían los votos del público, Robinson se impuso con toda justicia, aunque no con claridad, dado que obtuvo el 51% de los votos para llevarse el trofeo tras cerrar el concurso con un mate de espaldas a 2 manos tras hacer rebotar el balón en el tablero.
El mate final de DeRozan para buscar el título fue simplemente decepcionante, por utilizar para su calificación un término elegante. Porque resultó un fiasco.
El jurado, que votó en la primera fase, estuvo compuesto por 4 ex miembros de los Mavericks de los 80 y 90 (Mark Aguirre, Rolando Blackman, Derek Harper y Sam Perkins), a los que se unió el precursor de Robinson, el bajito ex jugador de los Hawks Spud Webb.