Jornada insulsa la disputada en la NBA. Miami se impuso a Atlanta en el único duelo de la noche en el que hubo participación hispana, pero ni Arroyo ni Horford tuvieron actuaciones destacables. Mientras, Oklahoma City se queda en solitario en la octava plaza del Oeste.
Además, Portland, lastrada por sus muchas bajas, no aguantó el ritmo de los Clippers en el último cuarto y acabó perdiendo en L.A.
Miami 92 Atlanta 77
Único partido con participación hispana en la jornada de ayer, y por partida doble, con la presencia de Carlos Arroyo en las filas locales y Al Horford en las visitantes.
El encuentro apenas tuvo vida, toda vez que los Heat cortaron de inicio las pretensiones de unos pobrísimo Hawks, que flaquearon desde los primeros compases del encuentro.
El 30-14 con el que acabó el primer cuarto fue una pesada carga que los visitantes ya no pudieron levantar en todo el partido, un partido que fue una pesadilla para la ofensiva de los Halcones, que encalló de forma espectacular: 75 puntos con un 35,2% de acierto en el tiro. Ante semejante desacierto, Atlanta pudo asirse como tabla de salvación al rebote, pero no fue así, pues en esta faceta los locales no encontraron oposición alguna: 52 a 30. Así es prácticamente imposible ganar.
Dominaron de cabo a rabo los Heat, y eso que Spoelstra no pudo contar con Jermaine O'Neal. No hizo falta. Dwyane Wade -28 puntos y 8 rebotes- y Michael Beasley -22 y 8 con 20 tantos anotados en la decisiva primera parte- se bastaron para domar al equipo de Mike Woodson.
A ese dúo se unió otro desde el banquillo, el integrado por los veteranos Haslem y Magloire. Los 2 hombres altos locales demostraron una solvencia a prueba de bomba y se fajaron como jabatos en el tablero, algo que agradecieron sus compañeros y el público del AmericanAirlines Arena, que disfrutó de la noche con la mejor exhibición defensiva de los suyos.
En este escenario, ni siquiera fue necesaria la participación estelar de más jugadores. De hecho, algunos ni siquiera estuvieron en la línea del equipo. Fue el desgraciado caso de Carlos Arroyo, que fue titular pero no tuvo peso alguno en la victoria. Acabó el boricua con números prácticamente inexistentes: 2 puntos y 1 pérdida en 19 minutos.
Pero si en Miami hubo algún desaparecido, en Atlanta la desaparición fue masiva. Sólo Crawford -23 puntos- se mostró a un nivel bueno. Baste decir que el segundo anotador de los Hawks fue un desafortunado Joe Johnson -11 puntos con 4 de 15 en el tiro-. El resto, para olvidar.
Entre ese resto estuvo Al Horford, que no tuvo su noche. Acabó con 8 puntos y 6 rebotes tras errar 7 de los 10 tiros de 2 que hizo. Y no fue de los peores.
Atlanta pierde gas y ya acumula 4 derrotas consecutivas.
L.A.Clippers 105 Portland 95
Bastante hizo Portland con aguantar el partido hasta el último cuarto. La plantilla de los Blazers, a causa de las lesiones, ha quedado hecha trizas. Anoche se notaron esas bajas, que abarcan todas las líneas del campo, pero especialmente afectan a los hombres altos de garantías.
De este modo, la única satisfacción que le quedó a Portland fue ver en la pista al novato australiano Patrick Mills, que jugó 5 minutos recién salido de una importante lesión.
Lo demás fue un calvario, que se acentuó al ver que su mejor hombre, Brandon Roy, no tenía su noche. Roy aportó sólo 6 puntos en 40 minutos en uno de sus peores partidos y tuvieron que ser Martell Webster (25 puntos con 5 triples) y un gran Andre Miller (22 con 16 asistencias) los que tiraran del carro.
Los Clippers se sintieron cómodos casi toda la noche. Anotaron el 57,7% de sus tiros y 8 de sus 13 intentos triples. Y llegado el último cuarto se despegaron con un parcial de 12-0 que situó el marcador en un holgado 95-80 a 5:41 del final.
Destacaron en los locales Kaman (20 puntos y 8 rebotes), Gordon (19 y 4 de 6 triples) y Baron Davis (15 puntos y 9 asistencias, pero 8 pérdidas de balón). Aunque el hombre más completo fue Marcus Camby, que acabó con 9 puntos, 15 rebotes, 6 asistencias, 3 tapones y 3 robos.
Oklahoma deja atrás a Utah
El duelo por la octava plaza del Oeste se dirimía en un doble enfrentamiento: Chicago-Oklahoma City y Utah-New Orleans. La victoria de los Thunder y la derrota de los Jazz hace que los primeros se alojen en solitario en la octava plaza y expulsen a los segundos de los puestos de playoff.
Los Thunder se impusieron en Chicago (85-98) merced a un gran tercer cuarto (14-32) y gracias al acierto de jugadores como Westbrook (29 puntos, 7 rebotes y 6 pases de canasta) y Durant (25 y 8 rebotes). A ellos se sumó el buen papel desde el banquillo de 2 novatos: Harden e Ibaka.
Los Bulls, mal. Acertaron sólo el 35,4% de sus tiros y su segunda unidad fracasó con estrépito.
Rose fue el mejor anotador local con 19 puntos, a los que añadió 7 asistencias. Deng hizo 15 tantos y 10 rebotes y Joakim Noah aportó 14 puntos y 14 rebotes.
Mientras, Utah perdía en casa ante los Hornets (87-91) a pesar de que Deron Williams le ganó la partida en su duelo individual a Chris Paul.
Los Hornets equiparan su número de victorias y derrotas -16-. Lo hacen gracias a la gran actuación de Devin Brown, que anotó 30 puntos. David West, mientras, hizo 20 con 9 rebotes. Y es que la gran defensa visitante hizo que ni siquiera precisara New Orleans de las mejores prestaciones ofensivas de Stojakovic, Okafor o Paul, aunque éste estuvo en su sitio en los momentos cruciales.
Los Jazz empiezan a perder comba a pesar de que anoche Boozer -18 puntos y 14 rebotes- y Williams -17 y 11 asistencias- pusieran bastante carne en el asador. Miles y Kirilenko sumaron 15 unidades y Millsap atrapó 13 rebotes.