El gran choque tejano de la noche estuvo marcado por el choque entre 2 hombres grandes, Nowitzki y Landry, que mandó a los dos al vestuario. Dallas fue el más perjudicado por la ausencia de su estrella y terminó perdiendo pese al gran encuentro de José Juan Barea (23 puntos).
También fueron excelentes los números de Scola y algo menos, aunque también buenos, los del otro hispano de la noche, Trevor Ariza. Brooks y Lowry fueron los mejores Rockets.
Los Bucks a punto estuvieron de remontar en Cleveland, pero la precipitación de Jennings se lo impidió en un encuentro en el que Delfino tuvo una buena actuación aunque sin protagonismo de cara a canasta. Quienes sí remontaron fueron los Sixers en Boston, rompiendo una racha de 11 triunfos del equipo de Doc Rivers.
Dallas 108 Houston 116 (tras prórroga)
El choque entre dos de los grandes equipos texanos, Dallas y Houston, estuvo marcado por otro choque, pero éste en un sentido nada metafórico. Dirk Nowitzki y Carl Landry colisionaron de forma violenta a los pocos minutos del comienzo del segundo cuarto y el resultado de ese impacto condicionó el partido.
El alemán se disponía a entrar a canasta cuando al intentar esquivar a Landry, plantado delante del aro, su codo derecho golpeó con violencia la cara del ala-pívot de los Rockets. Tan violento fue el golpe que ambos tuvieron que retirarse. Landry con varios dientes rotos y Nowitzki con un serio corte en su codo. El alemán anotó con su mano izquierda, la mala, 1 de los 2 tiros libres que los árbitros le concedieron y se retiró para no volver.
De la pérdida de ambos jugadores salieron peor parados los locales, que se quedaron sin su estrella. En ausencia de Nowitzki, fue el puertorriqueño José Juan Barea quien tomó la iniciativa en el ataque. El base boricua, que ya había anotado 8 puntos en su excelente arranque del primer cuarto, terminó como máximo anotador de los Mavs con 23 puntos.
Lástima que Carlisle no apostara por él en la prórroga, a la que se llegó después de que los Rockets desperdiciaran los 10 puntos de ventaja de que disponían a 3 minutos del final. Si hubiera sido así, tal vez el resultado hubiera sido otro, o tal vez no, pero lo cierto es que los Mavs se hundieron en el tiempo extra y terminaron desquiciados, con Dampier y el técnico Rick Carlisle expulsados en el último minuto por dobles técnicas.
Aaron Brooks fue el hombre decisivo de los Rockets en los 5 minutos definitivos, anotando 9 de sus 25 puntos y haciendo olvidar así el balón decisivo que se le escapó por la banda en el último segundo del tiempo reglamentario. Antes, había sido Kyle Lowry quien desde el banquillo impulsó el juego de Houston, con 26 puntos, 10 asistencias, 6 rebotes y 5 robos de balón.
En cuanto a los hispanos, Scola volvió a ser la referencia interior de estos poco interiores Rockets y el mejor hombre junto a los 2 bases, firmando 19 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias. Ariza, más comedido en ataque de lo habitual, lanzó únicamente 10 veces a canasta y sumó 13 puntos y 8 rebotes. En ausencia de Landry, su habitual mejor anotador desde el banquillo, a Houston le vino muy bien la aportación de un hiperactivo David Andersen (16 puntos).
En los Mavs, junto a Barea, destacaron los 17 puntos de Howard y Marion y el casi triple-doble de Jason Kidd (8 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias).
Cleveland 85 Milwaukee 82
Se podría decir que el excesivo afán de protagonismo de Brandon Jennings le costó anoche a los Bucks la posibilidad de, al menos, haber forzado la prórroga y luchado por la victoria en un partido que los Cavs estuvieron a punto de echar por la borda por sus numerosos errores en los últimos 6 minutos, incluyendo los de su estrella, LeBron James, que perdió 2 balones y falló un par de lanzamientos en tan delicados momentos.
Los Cavs ganaban de 15 (83-68) a 6:33 para el final del encuentro, pero a partir de ahí encadenaron un error tras otro y sólo fueron capaces de anotar 2 puntos. Tamaña sequía y el acierto de Ersan Ilyasova, que anotó 9 puntos, 7 de ellos seguidos, en ese mismo periodo, permitió a los visitantes disponer de 9 segundos para jugarse un tiro que les llevase a la prórroga.
Pero Brandon Jennings decidió, con escaso criterio, ser él quien se lo jugase, pese a su horrible noche en el tiro (5 de 21). El resultado fue el que cabía esperar, un horrible lanzamiento, con 4 segundos todavía en el reloj y Mo Williams encima suyo, que ni siquiera tocó el aro y acabó con la remontada de los Bucks.
Jennings e Ilyasova fueron, de muy diferentes maneras, los máximos anotadores de los Bucks con 18 tantos, Bell sumó 16 y Carlos Delfino aportó 6, con 6 rebtoes y 5 asistencias, en los 24 minutos que estuvo en pista. Los Bucks tuvieron el lastre de los problemas de personales de su mejor y casi único hombre interior, Andrew Bogut, que sólo pudo jugar 17 minutos y se quedó en 4 puntos.
James, pese a su escaso acierto en el final, fue el mejor de Cleveland con 26 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias. Mo Williams anotó 17.
Los Sixers sorprenden a los Celtics en Boston
Los Sixers de Filadelfia sorprendieron a los Celtics en el Garden (97-98) poniendo fin a una racha de 11 victorias consecutivas de los célticos. Un palmeo de Brand a 7,7 segundos del final dio la victoria a los visitantes.
Los mal pensados dirán que la ausencia de Allen Iverson, aquejado de artritis en su rodilla izquierda, favoreció el juego de los suyos, pero lo cierto es que el exceso de confianza de los locales y la expulsión de Rasheed Wallace en el segundo cuarto por perder, por enésima vez, los nervios, tuvieron una contribución más directa. Los Celtics llegaron a tener 15 puntos de ventaja para ver como ésta se desvanecía poco a poco.
Brand, 23 puntos y 8 rebotes, Iguodala, 18 tantos, Green, 16, y Speights, 17 y 10 rebotes en 22 minutos, fueron los mejores entre los vencedores. En los Celtics, Garnett, 21 puntos, 10 rebotes y 4 tapones, puso los mejores números.