Debutó Pau Gasol y lo hizo a lo grande. El español jugó ante los Bulls el que fue su primer partido de la temporada, tras perderse los 11 primeros, y el equipo de Chicago bien que lo sintió. Victoria de los Lakers guiados por Gasol, el mejor de su equipo con 24 puntos y 13 rebotes.
El excelente inicio de campaña del internacional español contrasta con el cada vez más problemático arranque de los Spurs de San Antonio, que perdieron en casa ante los Jazz sintiendo en sus carnes las poderosas bajas de Manu Ginóbili, que estará de baja 1 semana, y Tony Parker.
Mientras, en Nueva Orleans, los Hornets agradecieron las mejores prestaciones del serbio Stojakovic, que masacró desde la línea de 3 a Phoenix Suns. Y los de Arizona sufrieron su tercera derrota de la temporada.
L.A.Lakers 108 Chicago 93
Por fin se vistió Pau Gasol y su equipo lo agradeció de veras. La aparición estelar del jugador español sirvió para suavizar cualquier situación de duda, y el público del Staples Center disfrutó de un encuentro de lo más placentero en el que los locales dominaron por completo y llegaron a tener una ventaja de 24 puntos.
En ese paseo triunfal tuvo mucho que ver la presencia de Gasol. Con él en pista, la ofensiva angelina mejoró notablemente, el juego adquirió mayor fluidez y cada pieza del engranaje Jackson se reubicó en su justo lugar. Además, el ala-pívot catalán ofreció un trabajo extra en la comprensión colectiva de la defensa y su equipo mejoró notablemente su labor en la retaguardia.
Pero fuera de las aportaciones de Pau al juego colectivo de su equipo, hay que resaltar también su contribución a nivel individual, su paso adelante como líder de estos Lakers.
Como si fuera una deferencia hacia sus galones, Kobe Bryant dejó que el inicio del partido fuera de Pau, que su segundo de a bordo entrara en la competición con merecido protagonismo, Y Pau no falló.
A los 38 segundos, el español inauguró el marcador del partido con un palmeo y en el ecuador del primer cuarto Gasol ya acumulaba cifras de escándalo: 10 puntos y 4 rebotes. Mientras, Kobe no anotó su primera canasta hasta transcurridos casi 10 minutos de partido.
Se fueron los Lakers al primer descanso con 25-19 en el luminoso, defendiendo con intensidad y creando serios problemas al rival en el rebote ofensivo. Y el segundo cuarto supuso el primer despegue local. Los Bulls seguían sin cerrar bien el rebote en su aro y Derek Fisher anotó 5 puntos consecutivos para colocar un 45-33 a 3:46 del descanso.
Sólo el esfuerzo de John Salmons (18 puntos en la primera parte, aunque 0 en la segunda) permitió que los Bulls aguantaran el tipo en el ecuador del choque (53-42). Para entonces, Gasol ya acumulaba 14 puntos y 5 rebotes y había tirado 11 veces a canasta.
El resto fue coser y cantar. En el tercer acto, los de Phil Jackson pisaron un poquito más el acelerador y se fueron a las primeras de cambio de 17 (59-42) tras una canasta fácil de Gasol tras regalo en forma de pase de Noah. Y todo fue a peor para Chicago, que llegó a acumular en este cuarto 20 puntos de desventaja en un vaivén continuo que demostraba que si los Lakers lo hubieran precisado se hubieran ido de 30.
Poco antes de concluir el cuarto, Gasol ya llevaba un 20-10 en sus estadísticas.
El último cuarto fue puro trámite. Los Lakers alcanzaron un máximo colchón de 24 puntos y Chicago nada pudo hacer.
El quinteto inicial de los Lakers y su sexto hombre, Lamar Odom, hicieron dobles figuras en anotación. Gasol fue el mejor con 24 puntos, 13 rebotes y 3 asistencias en 35 minutos, con 9 de 15 en el tiro de 2 y 6 sin fallo en el libre para un total de 33 de valoración. Y Kobe Bryant rozó el triple-doble aunque tuviera una noche discreta en el tiro (21 puntos, 9 rebotes y 8 asistencias). La estrella local se colocó como segundo máximo anotador de la franquicia tras superar a Jabbar. Ahora sólo tiene por delante a Jerry West.
El resto funcionó en su justa medida. Artest acumuló 15 tantos, Odom (11 puntos y 8 rebotes) y Farmar (8 tantos y 3 pases de canasta) fueron los mejores suplentes y hasta Fisher mejoró sus prestaciones. Y es que el único damnificado con la presencia de Pau fue Bynum, que bajó sus números, aunque no jugara mal.
Los Bulls no cuidaron bien las cercanías del aro y recibieron 60 puntos en la pintura. Rose fue el máximo anotador yendo de menos a más, aunque se puso en acción demasiado tarde. Tras firmar un horrendo 2 de 11 en el primer tiempo, el jugador de segundo año terminó con 20 tantos.
El caso contrario fue Salmons, 18 puntos al descanso y en blanco en la continuación. Miller hizo 15 puntos y Noah acabó con 12 más 15 rebotes, 4 asistencias y 4 robos. Y la peor parte se la llevó Deng, cuyo partido resultó un fiasco.
San Antonio 83 Utah 90
En San Antonio suenan las alarmas. Las estrellas del equipo arrastran problemas físicos y el AT & T Center se ha convertido en una cancha vulgar en la que se puede sacar una tajada antes impensable. Si no que se lo digan a los Jazz, que llevaban una década sin ganar en San Antonio. La última vez jugaban en Utah unos tales John Stockton y Karl Malone. Corría el año 1999.
Los Spurs van a menos y su arranque es descorazonador (4 triunfos y 6 derrotas). Ante Utah, sin Parker ni Ginóbili, el grandioso Tim Duncan intentó echarse el equipo a las espaldas, pero casi muere aplastado.
El de las Islas Vírgenes intentó multiplicarse (21 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias), pero ni por esas fue posible una victoria. Sólo George Hill -18 puntos- y Richard Jefferson -16- intentaron echarle una manita. Infructuoso.
Utah supo hacer valer sus bazas. El partido llegó al último cuarto con empate a 60, pero a partir de ahí los de Sloan forzaron la ofensiva y los Spurs bajaron alarmantemente su nivel defensivo. La escasa agresividad de los locales quedó reflejada en un dato: robaron 1 balón en todo el partido.
Si a eso le unimos su lamentable proceder en el perímetro (4 de 20 triples) no es difícil de explicar el desastre de un equipo que no encuentra su sitio.
Aún así, el partido llegó vivo al final, pero con 83-84 Carlos Boozer completó un 2 más 1 crucial (83-87). Luego, a 21 segundos del final, Kirilenko mató el partido.
Sin Okur, los Jazz tuvieron como valedores a Deron Williams (21 puntos, 10 asistencias y 4 de 5 triples), el suplente Paul Millsap (20 y 7 rebotes) y Carlos Boozer (18, 11 rebotes y 5 asistencias). Kirilenko y Brewer completaron la faena.
Stojakovic destroza a los Suns
Sin Paul en pista y con West desquiciado (6 puntos con 2 de 11 en el tiro) tuvo que ser el inigualable Peja Stojakovic el que provocara una tremenda sorpresa, pues sorpresa es que estos Hornets ganen a los enrachados Phoenix Suns (110-103).
El serbio anduvo más que caliente desde la línea de 3 puntos (7 de 11 triples) para sumar 25 puntos, pero es que encima capturó 13 rebotes. Junto a él, saltaron a la palestra jugadores como Devin Brown -19 tantos, 6 rebotes y 5 pases finales-, el novato Marcus Thornton -19 tantos en 20 minutos- y Darren Collison, que suplió bien a Paul -15 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias-. Y Okafor acabó con doble doble.
Los Suns no supieron defender el perímetro -recibieron 13 triples- y terminaron perdiendo su tercer partido de la temporada. Stoudemire hizo 23 puntos, Jared Dudley se fue a 17 con 5 de 6 triples y Jason Richardson sumó 16. Mientras, Nash y Frye hicieron sendos dobles dobles con puntos y asistencias y puntos y rebotes.