El argentino Luis Scola se salió. En un partido lleno de sutiles y no tan sutiles muestras de su calidad y carácter ganador, el jugador de los Rockets dio el triunfo a su equipo con números de All-Star: 20 puntos y 16 rebotes en 35 minutos. Suya fue la pintura ante los Wolves.
Ariza también ayudó a los texanos, pero muchas veces más por la cantidad que por la calidad, pues anduvo bastante errático en el tiro.
El que no pudo ayudar fue el lesionado Fabricio Oberto a Washington. Pero Fabri pudo, al menos, contemplar la gran y sorprendente victoria de los suyos ante Cleveland en el debut de la temporada de Antawn Jamison, que estuvo tremendo.
También sorpresa en el Conseco Fieldhouse de Indiana, donde los Pacers naufragaron en el último cuarto ante los Knicks.
Minnesota 84 Houston 97
Al Jefferson hizo uno de los mejores partidos de la temporada. Pero por encima de este auténtico crack estuvo la sapiencia baloncestística de un gran Scola. Luisito hizo anoche un partido para enmarcar en el Target Center. ¡Qué conocimiento del juego el suyo!.
El jugador bonaerense se fue en 35 minutos a los 20 puntos, 16 rebotes y 3 asistencias tras anotar 10 de 21 en el tiro. Tuvo, por lo tanto, un gran protagonismo en la ofensiva, que se hizo más patente en los momentos decisivos. Y es que cuando había que decidir el compromiso dio el internacional albiceleste un paso al frente: 8 puntos llevaron su rúbrica en los últimos 5 minutos del encuentro. Suya fue media victoria.
También colaboró lo suyo Trevor Ariza, aunque su nuevo rol de referente ofensivo de un equipo NBA le ha llegado tan de sopetón que a veces confunde las cosas y se le va la mano en el tiro. Ayer le sucedió y terminó anotando 6 de 19 en el lanzamiento tras emborracharse de triple (4 de 13). Aún así, terminó con 18 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias. Porque una vez más los 2 hispanos de Houston fueron los 2 máximos encestadores del equipo.
Un equipo que superó bien la mala noche de su base Brooks (8 pérdidas de balón) y una actuación más discreta de lo habitual de su fantástica segunda unidad. Pero hubo compensaciones, como las buenas contribuciones de Hayes o Lowry.
Los Rockets anotaron 12 triples y rebotearon de cine en el aro contrario (18 rebotes ofensivos por 24 capturas del rival en esa lucha). Pero el partido resultó a veces alocado y sin freno: 43 pérdidas (¡28 en la primera parte!) y sólo 27 personales para 20 tiros libres.
Todo se decidió en el último cuarto (17-29), allí donde los Wolves volvieron a toparse con su naturaleza perdedora, que ya les ha hecho acumular 11 derrotas consecutivas.
Este equipo es una pena. Flynn sigue desinflándose como armador, pero es que es complicado que un chico tan joven pueda dirigir el rumbo de este desaguisado que tiene en las manos Rambis. Jefferson fue esta vez más Jefferson que otras veces (20 puntos y 12 rebotes). Sessions ayudó -16 tantos en 24 minutos-. El resto no se supo muy bien dónde estuvo.
Washington 108 Cleveland 91
Monumental sorpresa en un Verizon Center que se volvió loco en la segunda parte. Los más de 20.000 espectadores que se dieron cita en el pabellón no podían creer lo que veían. Los Wizards bailando a los Cavaliers con un parcial absolutamente increíble: 64-40 en la segunda mitad.
Oberto, lesionado, se tuvo que conformar con admirar el debut de un sensacional Jamison, el mejor de su equipo con 31 puntos y 10 rebotes. Pero es que en los Wizards casi nadie falló: Butler hizo 19 tantos, Arenas, 18 con 8 asistencias, aunque 6 de 22 en el tiro, Mike Miller anduvo excelente -17 puntos, 8 rebotes y 6 pases de canasta- y Haywood luchó en la pintura -11 capturas-.
Cleveland se hundió en esa segunda parte en la que ni defendió ni atacó. Y sumó su cuarta derrota de la campaña.
De nada sirvió esta vez la aportación especial de LeBron James, que terminó con 34 puntos, 9 rebotes y un montón de hielo sobre una de sus muñecas después del partido.
Sin Shaq O'Neal y Anderson Varejao en la pista, los de Ohio perdieron el rebote y la actuación calamitosa en la dirección de Mo Williams -2 de 13 en el lanzamiento- poco ayudó a mejorar las cosas.
De este modo, el equipo de Brown se llevó un serio correctivo en su visita a la capital del país. Y es que su segunda mitad fue simplemente bochornosa.
Los Knicks ganan por fin
También fue sorprendente el desenlace en Indiana. Los Pacers acumulaban 5 victorias seguidas y los Knicks sólo habían ganado 1 partido hasta la fecha. Pero el Conseco Fieldhouse terminó mudo.
No es para menos. Su equipo mostró sus mejores virtudes anotando 43 puntos en el segundo cuarto y luego se borró del partido al recibir un 34-66 en la segunda parte, incluyendo un brutal 17-34 en un último cuarto en el que Al Harrington barrió a su ex equipo al anotar 13 de sus 26 puntos.
Harrington -26 tantos-, un enorme Larry Hughes -22 con 10 rebotes y 7 asistencias-, Chandler -18- y Lee -17 más 8 rebotes- fueron los arietes neoyorquinos. Mientras, en los Pacers brillaron los de siempre: Granger -33 puntos-, Dahntay Jones -25- y Roy Hibbert -14 y 12 rebotes-. También cabe mencionar el buen papel del novato Hansbrough, que hizo 14 puntos en 21 minutos.