Dos veteranos de la liga, 26 años de experiencia entre ambos, se han quedado sin equipo a las puertas del comienzo de la liga regular. Los Rockets han cortado a Brent Barry para hacer hueco a Pops Mensah-Bonsu y los Wolves han despedido a Antonio Daniels.
Ambas decisiones se esperaban ya desde hace días y ahora se han hecho oficiales. Barry, de 37 años y con 14 temporadas NBA a sus espaldas, no entraba en los planes de Houston que ha decidido cortarle para conceder un puesto en la plantilla a Mensah-Bonsu, tratando de reforzar así un juego interior muy debilitado por la ausencia de Yao Ming.
El contrato de Mensa-Bonsu, al contrario que el de Barry, no estaba garantizado, pero el jugador parece haberse ganado el favor del técnico, Rick Adelman, tras realizar una buena pretemporada en la que ha promediado 8,4 puntos por encuentro y más de un 50% de efectividad en sus lanzamientos a canasta.
Otro veterano con 12 temporadas en la liga, Antonio Daniels, ha visto también como los Wolves prescindían de él. Daniels llegó a Minnesota este verano procedente de los Hornets como pieza de intercambio en un traspaso, pero la franquicia, enfocada a un proyecto de reconstrucción basado en sus jugadores jóvenes, le comunicó ya hace días que no contaba con él.
La imposibilidad de concertar algún tipo de traspaso que facilitara su salida, dificultado por los 6,6 millones que debería de cobrar Daniels la próxima campaña, ha hecho que finalmente los Wolves hayan optado por cortarle. Un camino que puede seguir en los próximos días otro veterano, el pívot Mark Blount.