Cleveland Cavaliers es un equipo imparable, y las condiciones que se está encontrando camino de una hipotética final son inmejorables. En primera ronda se midió a unos pobres Pistons y en segunda se está enfrentando a unos Hawks disminuidos por las lesiones.
Atlanta se presentó en el segundo partido sin Al Horford y Marvin Williams, dos de sus titulares, y en el transcurso del encuentro, cuando éste ya estaba decidido ciertamente, perdió a su hombre clave, Joe Johnson, que se torció un tobillo.
Cleveland 105 Atlanta 85 (2-0)
Dos partidos, dos palizas. Así ha empezado una eliminatoria que carece en principio de color. Y es que anoche no hubo partido en el Quicken Loans Arena, ese feudo que los Cavs han convertido en inexpugnable.
Encarar el partido sin Horford y Williams fue demasiado para unos Halcones que no se caracterizan precisamente por la extensión de su plantilla, y bien que aprovechó esta circunstancia Cleveland, un equipo que es un rodillo en defensa, como volvió a demostrar en este segundo partido, en el que su rival superó los 80 puntos porque los locales se relajaron enormemente en los últimos minutos, una vez decidido el partido.
Los dos primeros cuartos resultaron demoledores. Un 26-17 y un 33-18 para irse al descanso con 24 puntos de ventaja (59-35). Ahí es nada. LeBron James lideró la paliza al anotar 18 de sus 27 puntos en la primera mitad y Delonte West brilló en esos minutos decisivos al encestar 12 de sus 14 tantos en el momento del cómodo despegue local.
Atlanta era un peluche en manos de Cleveland. El equipo de Mike Woodson se mostraba incapaz de franquear la poderosa retaguardia del equipo de Ohio, una incapacidad que procedía de su inexistente amenaza en el juego interior, lo que perjudicó también la capacidad de penetración de los hombres exteriores, acabando los visitantes con sólo 24 puntos anotados desde la pintura.
Mientras, los Cavaliers hacían camino para dejar expedita la vía de la victoria y poder sestear en la segunda parte, en la que llegaron a alcanzar una diferencia de 36 puntos que más tarde maquilló su rival.
De la agresividad defensiva de los locales dan fe los 11 tapones que colocaron a lo largo del partido y el pobrísimo 34,9% de efectividad con el que el equipo contrario concluyó la noche. Si a eso añadimos la soltura ofensiva de los de Mike Brown (un 53,5% en el tiro de campo) poco más hay que explicar. Y eso que los locales se permitieron el lujo de perder 17 balones y conceder 18 rebotes ofensivos a los Hawks, que a su vez cerraron también bastante mal el rebote en su propia canasta.
James, con 27 puntos en 31 minutos, fue el faro ofensivo de Cleveland, que disfrutó también del buen juego del suplente Wally Szczerbiak (17 puntos en 21 minutos) y de Mo Williams -15 tantos- y Delonte West -14-, así como del buen desempeño en la zona del brasileño Anderson Varejao.
Atlanta apenas incordió. El mal partido de la trío Mike Bibby-Joe Johnson-Josh Smith resultó crucial teniendo en cuenta las bajas de Horford y Williams. Y es que lo único positivo para los Hawks fue saber que la lesión de Johnson no reviste importancia y ver cómo un suplente, pero que muy suplente, Thomas Gardner, anotaba 12 puntos en 16 minutos. Eso sí, no se cortó Gardner, que en esos 16 minutos se tiró hasta las zapatillas.
Los números:
- Cleveland: James 27 pt, 5 as, 4 rob y 3 tr (6 de 12 tl); Szczerbiak 17 pt en 21 min (7 de 9 tc); Williams 15 pt, 5 reb y 5 as; West 14 pt; Varejao 12 pt, 8 reb y 4 tp.
- Atlanta: Evans 16 pt, Gardner 12 pt en 16 min (4 de 11 tc); Pachulia 7 pt y 12 reb.
- Cleveland acumula en los playoffs 6 victorias en 6 partidos.
- Bibby, Johnson y Smith sumaron 29 puntos con 10 de 36 en el tiro de campo.
- Los locales pusieron 11 tapones a través de 6 jugadores, siendo Varejao, con 4, el máximo taponador.
- Cleveland anotó el 53,5% de sus tiros y Atlanta hizo el 34,9%.