Tuvimos que esperar al cuarto partido de la eliminatoria Lakers-Jazz para asistir a la verdadera dimensión de uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto, Kobe Bryant. El escolta de Filadelfia anotó 38 puntos y dejó la serie prácticamente sentenciada a favor de su equipo.
Todos los focos recayeron en un magistral Kobe Bryant, al que secundaron en casi un tercer plano el resto de los jugadores, si bien cabe destacar los dobles-dobles de Odom (10 puntos y 15 rebotes) y Gasol (13 y 10) y el paso adelante de dos jugadores que mejoraron mucho sus anteriores prestaciones, Derek Fisher y Sasha Vujacic.
Utah 94 L.A.Lakers 108 (1-3)
Muchas eran las voces que criticaban la presencia de un Kobe Bryant menor en este inicio de postemporada, y el propio protagonista era consciente de que su aportación al equipo no estaba siendo la deseada, a pesar de lo cual los Lakers dominaban a los Jazz. Por eso, a nadie le extrañó la explosión de juego ofrecida anoche por la estrella angelina, una explosión baloncestística que llegó en el momento justo, en el partido que constituía la verdadera esencia del enfrentamiento. Los Lakers ganaron en Salt Lake City y su pase a la siguiente ronda va a resultar inconstestable.
El inicio del partido ya estableció las pautas del mismo. Y es que si Kobe había iniciado todos los primeros cuartos de forma tímida, sin tirar a canasta, pensando en sus compañeros, anoche -espoleado tal vez por su horrible tercer partido- salió a morder. Primer tiro y primer acierto a los 17 segundos de empezar el partido para un jugador que anotó los primeros 11 puntos de su equipo y que se fue al descanso con ¡24 puntos tras anotar 10 de sus 13 tiros de campo!.
Poco importó que Bryant no mirara tanto a sus compañeros -sólo dio un pase de canasta-. Poco importó porque en este cuarto choque el MVP de la pasada temporada sentía la energía en sus piernas, en su muñeca, pero sobre todo, y esto es lo más importante, en su privilegiada cabeza, convencida de que es capaz de cualquier hazaña que se proponga. Y todos se rindieron ante su exhibición (38 puntos y 6 rebotes con 16 de 24 en el tiro de campo). Tanto sus compañeros, como los rivales, como el ruidoso público del EnergySolutions Arena, que terminó por claudicar.
Sería, de todos modos, injusto pensar que Bryant jugó solo. Hubo otras voces que también tuvieron su importancia, limitada con respecto a Kobe, claro está. Una de esas voces fue la del entrenador de los Lakers, Phil Jackson. Jackson es un motivador nato y sabía muy bien que el equipo precisaba algunos ajustes. El primer y gran ajuste se apreció nada más empezar. Colocó a Odom de titular y prescindió de Bynum.
Bynum no está todavía para marcar diferencias. Su físico no se ha recuperado aún de su grave lesión, porque un parón tan grande ha de notarse obligadamente. Anoche apenas jugó. Fue relegado a la suplencia, disputó sólo 7 minutos y su equipo lo agradeció. Porque a Bynum esta eliminatoria le llega demasiado pronto y porque el juego interior de los Jazz no es el más adecuado para el lucimiento del joven jugador de los Lakers.
Otro que tampoco está para jugar es Okur. El turco regresó ayer a la competición y en los 13 minutos que estuvo en cancha se le vio lejísimos de la mínima forma que se requiere para afrontar los playoffs. Su entrenador, Jerry Sloan, apostó por su quinteto de mayor calidad, incluyendo en él al 'recuperado' Okur y al ruso Kirilenko, que respondió muy bien a esa confianza, sobre todo en la segunda parte.
Pero volviendo a los Lakers, hay que añadir que a la estelar presencia de Bryant y la inteligente puesta en escena de Jackson (colocando a Odom de titular y jugando bastantes minutos con Walton de falso 4) se añadieron los pasos adelante de jugadores como Fisher -que jugó más y mejor- y Vujacic -que por fin aportó algo al equipo-, así como la consolidación de un gran Shannon Brown y la inteligencia de Walton.
Las variantes tácticas de los Lakers no tuvieron frutos aún en el primer cuarto, un cuarto de tanteo que terminó 25-20 y en el que Bryant ejerció un protagonismo brutal en el ataque visitante.
Fue en el segundo cuarto cuando los Lakers pusieron la directa a partir del acierto en el triple de Walton, Vujacic y Brown, 3 suplentes que encendieron la mecha que había colocado en el sitio adecuado durante los minutos anteriores Bryant. Ese segundo cuarto supuso la entrada en acción de Gasol y Odom, que habían estado muy apagados en el primero, y corroboró la asunción máxima de responsabilidades por parte del veterano Fisher.
Se fueron los Lakers con 53-60 a su favor tras anotar 40 puntos en el segundo período. Y eso que en los últimos 5 segundos protagonizaron dos lamentables jugadas que supusieron un parcial de 5-0 en su contra para cerrar los 2 primeros cuartos.
Si el segundo cuarto fue la máxima expresión ofensiva de unos enormes Lakers (40 puntos), el tercero supuso la mejor imagen defensiva del equipo californiano, que dejó en 16 tantos a su rival. Fueron los 2 cuartos centrales los que mostraron la grandeza de un equipo aspirante al título, los que nos dejaron intuir todo el potencial que encierra esta plantilla. El parcial en esos 24 minutos: 44-68 en una de las canchas más complicadas de Estados Unidos.
Ante tamaña demostración de fuerza poco pudieron hacer los locales, a pesar de contar con el mejor nivel de sus dos estrellas: Deron Williams (23 puntos y 13 asistencias) y Carlos Boozer (23 puntos, 16 rebotes y 5 asistencias), un jugador éste último al que se le nota que ha estado en el dique seco durante parte de la temporada, porque ahora está físicamente un punto por encima de todos los demás debido a su menor desgaste en meses pasados.
Los Lakers, con un Ariza discreto (5 puntos, 4 rebotes y 2 robos), no sufrieron acoso alguno en el marcador. Por fin fueron capaces de no dejarse avasallar en el rebote, que cerraron mucho mejor en su propio tablero, y se fueron de Utah ofreciendo una maravillosa imagen y cerrando prácticamente esta primera ronda.
Los números:
- Utah: Boozer 23 pt, 16 reb, 5 as y 3 rob; Williams 23 pt, 13 as y 5 reb (9 de 9 tl); Kirilenko 15 pt, 4 reb y 3 as.
- L.A.Lakers: Bryant 38 pt y 6 reb (16 de 24 tc); Gasol 13 pt y 10 reb; Odom 10 pt, 15 reb y 6 as.
- Odom y Gasol fueron los jugadores visitantes cuya presencia en cancha coincidió con el mejor rendimiento de su equipo (+20 y +15).
- Bryant se convirtió en el séptimo anotador de la historia de los playoffs superando a Havlicek y Olajuwon.
- Kobe Bryant anotó 16 de sus 24 tiros de campo después de haber anotado 5 de 24 en el tercer encuentro.
- Los Jazz asistieron 27 de las 34 canastas que hicieron.