Luis Scola sigue obteniendo el reconocimiento de los especialistas como consecuencia de la fantástica temporada que está protagonizando. Esta vez fue nominado como aspirante a mejor jugador de la semana en el Oeste, galardón que finalmente se llevó Brandon Roy.
El premio cayó en manos, con todo merecimiento, del líder de los Trail Blazers de Portland, que entre el 6 y el 12 de abril ganaron sus 4 partidos, en los que el escolta promedió 22,3 puntos, 5,5 asistencias y 1,5 robos.
Pero lo realmente notable desde el lado del baloncesto hispano fue la aparición de Scola como aspirante al galardón, un puesto que compartió con jugadores de la talla de Dirk Nowitzki, Jason Terry (ambos de Dallas) y Chris Paul (New Orleans). Casi nada.
Extraordinario rendimiento
Los Rockets jugaron en ese período 3 encuentros y los ganaron todos, uno en casa ante Orlando y dos fuera ante Sacramento y Golden State.
El jugador porteño promedió cifras notabilísimas: 18,3 puntos, 8,7 rebotes, 2,3 asistencias y 1,3 robos en 33,3 minutos. Y tiró con indudable acierto: 57,1% en el tiro de campo y 83,3% en el tiro libre.
Ante Orlando, Luisito hizo 12 puntos y 9 rebotes el 7 de abril. Un par de días después se marchó hasta las 15 unidades con 8 rechaces en el aro ante los Kings de Andrés Nocioni y Francisco García. Y el 10 de abril, el 4 de los Rockets bordó el baloncesto y batió su mejor marca anotadora en la NBA con 28 puntos, a los que añadió 9 rebotes y 4 asistencias en una actuación colosal que doblegó a los Warriors.
El ala-pívot argentino, que cumplirá 29 años el 30 de abril, está realizando una campaña extraordinaria en uno de los equipos punteros de la NBA, un conjunto que está disputando la tercera plaza del Oeste y que cuenta con individualidades del calibre de Yao Ming, Ron Artest o el lesionado Tracy McGrady.
'Luifa' es, por ahora, el hombre inquebrantable, el jugador-roca, pues ha disputado los 81 encuentros que ha jugado su equipo y en los 81 ha partido como titular, siendo por lo tanto la pieza indispensable de estos Rockets de Adelman. En ese largo recorrido, el internacional argentino ha promediado 12,8 puntos y 8,8 rebotes. Un auténtico primor para un jugador de segundo año. Y ahora llegan los playoffs.