Raymond Lesniak, senador estatal del estado de New Jersey por el Partido Demócrata, ha presentado una demanda ante un Tribunal Federal en Newark(New Jersey) con el objetivo de legalizar las apuestas deportivas en todo el territorio norteamericano.
La demanda presentada por Lesniak alega la inconstitucionalidad de la Ley de Protección de los Deportes Aficionados y Profesionales de 1992 -que sólo permite las apuestas deportivas en los 4 estados que entonces lo solicitaron (Nevada, Montana, Oregón y Delaware) y las prohíbe en los otros 46- por discriminatoria.
Lesniak busca de esta forma que todos los estados puedan dar forma legal a un negocio que ahora mismo se estima que mueve cerca de 380.000 millones de dólares al año en los Estados Unidos, la mayor parte de ellos de forma ilegal, y con ello recaudar los correspondientes impuestos.
Para Lesniak, la existencia de este tipo de apuestas por toda la nación es un hecho y su prohibición por parte de las autoridades federales sólo beneficia a los operadores extranjeros y al crimen organizado, que controla las apuestas ilegales.
Los responsables de la mayor parte de las ligas profesionales y de otras competiciones, como la NCAA, se han mostrado tradicionalmente en contra de la legalización por entender que podría fomentar la manipulación de los partidos en favor de las apuestas.
En cualquier caso, nadie puede garantizar que eso no esté ocurriendo ahora mismo en el contexto de las apuestas ilegales, sobre las que no se puede ejercer control alguno. Baste recordar los numeros escándalos sobre el tema que han salpicado las propias ligas americanas, así como diversas competiciones europeas.