Luis Scola firmó su más bella noche en la NBA. Fue su mejor partido de esta temporada en un escenario ideal, un San Antonio-Houston. El jugador argentino firmó unos números bárbaros y resolvió el partido al anotar 5 puntos en los últimos 30 segundos del choque.
El ala-pívot de los Rockets montó una conexión letal con Yao Ming en las jugadas cruciales del partido. El chino le pasó 2 veces al argentino y éste aprovechó esas 2 asistencias. Además, capturó Scola el rebote decisivo que sentenció el encuentro, terminando con 19 puntos y 17 rebotes. Un sueño hecho realidad.
La otra cara de la moneda vino de la mano de su compatriota Fabricio Oberto, que vivió la cara amarga del deporte no ya por la derrota, sino por la falta de respeto de su técnico, Gregg Popovich, que le sacó 1 segundo para defender un saque del contrario desde el otro lado de la cancha.
Lejos de Texas, en Ontario, Toronto Raptors se reencontró con la victoria de una forma contundente. Claro que el rival eran los Clippers. Fue tan rotundo el triunfo que bastó con que Calderón jugara 27 minutos. Lo hizo muy bien el español, que finalizó con 15 puntos y 6 asistencias.
San Antonio 85 Houston 87
Noche redonda para los Rockets gracias a la noche redonda de Luisito Scola. El argentino llevó a su equipo no solo a la victoria ante San Antonio a domicilio en el duelo texano de más altos vuelos que ahora mismo se pueda ver en la NBA, sino que además proporcionó a los suyos el liderato de la División Suroeste y la segunda plaza de la Conferencia Oeste, ambos a costa de los Spurs, que notan, sin duda, la baja de Ginóbili.
El partido se planteaba igualado, con un toque de favoritismo para los locales por eso de su historial, porque jugaban en casa y porque su espíritu competitivo está fuera de toda duda. Pero los de Adelman pusieron desde el principio los puntos sobre las íes al 3 veces campeón de la NBA.
La primera parte resultó extrañamente ofensiva, pues todas las conjeturas anteriores al partido hablaban de un partido a pocos puntos, como así fue al final. Pero esos 2 primeros cuartos se jugaron a un notable ritmo ofensivo y acabaron con 47-51 para los visitantes. Para entonces Luis Scola ya estaba allí. Al descanso, el bonaerense ya andaba por las alturas con 12 puntos, 8 rebotes y 3 asistencias. Él y Ron Artest (13 tantos) llevaban la manija del juego ante la falta de fluidez en la dirección de Brooks y la escasa producción de Yao Ming.
Hasta ese momento, la segunda unidad de Houston estaba rindiendo a un grandísimo nivel, con nombres propios como Lowry, Barry y Hayes. Mientras, la segunda unidad local funcionaba a otro nivel, inferior sin duda, y sólo Udoka aportaba valores al juego de los Spurs, excesivamente centrado en la pareja Duncan (17 puntos al descanso) y Parker (11 y 8 asistencias).
Se fueron los jugadores al descanso y en los vestuarios Popovich y Adelman apretaron las tuercas defensivas, y el partido fue más como los analistas pensaban que podría ser. El parcial de la segunda parte (38-36) lo dice todo. Se jugó a muerte, con la severidad de la postemporada, con un AT&T Center volcado en la refriega. Y los Rockets salieron vivos.
Los Rockets jugaron al baloncesto Spurs. Defensas sólidas, ataques controlados, con gusto por el balón y agresividad, mucha agresividad bien entendida. Y demostraron que están configurados para hacer ese baloncesto. No en vano tienen jugadores como Artest, Battier y Scola... y el gigante Ming, claro. Todos ellos defensores de verdad, especialmente los 3 primeros.
El partido fue desgranando sus minutos. Los Rockets llegaron a tener algunas ventajas en el tercer cuarto que nunca llegaron a pasar de los 9 puntos y el encuentro, equilibrado, desembocó en un final a cara o cruz.
Entonces surgió la conexión, la perfecta sintonía entre 2 hombres altos, una de las mayores bellezas de este deporte. La técnica y la inteligencia de 2 jugadores, Yao Ming y Luis Scola, se pusieron al servicio de un equipo, los Rockets, y ese equipo ganó.
La primera conexión acabó con una entrada a canasta de Scola por el centro de la zona culminada con una bandeja con la derecha. Vino precedida de un gran pase de Ming (83-84 a 29 segundos del final). A continuación Tony Parker hizo una gran penetración por la derecha (85-84 a 20 segundos de la conclusión). Lo de Parker fue un simple paréntesis individual para que todos pudiéramos disfrutar de una nueva conexión en las alturas: el balón llega a Ming, que situado a 6 metros del aro, en su frontal, espera a que se muevan los defensores mientras ve cómo Scola levanta la mano cerca del aro porque está solo. Un pase perfecto va de Ming a Scola y éste resuelve con facilidad contra tablero (85-86 a 11 segundos).
Luego llega la decisión. Mientras en Houston decide una pareja, en San Antonio quiere decidir 1 jugador. Nuevamente es Parker el que busca la victoria, pero su tiro cercano a 2 segundos del final fracasa y el crucial rebote acaba en manos de ¡Scola!. Luife se queda con el balón y le hacen falta. Con 3 décimas por jugar anota 1 de los 2 tiros libres de los que dispone y coloca el 85-87 en el marcador tras anotar los últimos 5 puntos de los suyos en el último medio minuto del encuentro. Tras 1 tiempo muerto, todavía intentarán el triple imposible los Spurs, pero no ha lugar. La victoria es de Houston y la gloria es de Luisito Scola.
Houston gana con 24 puntos de un gran Artest y con el mejor partido de la temporada de Scola, que acaba con 19 puntos, 17 rebotes, 4 asistencias, 3 robos y sólo 1 pérdida en 37 minutos de juego en los que totaliza 32 puntos de valoración global.
En los locales, Duncan y Parker absorben el juego. El primero acaba con 23 puntos (sólo 6 en la segunda parte) y 6 rebotes y el segundo con 22 puntos y 12 asistencias. Entre los 2 lanzan 46 veces a canasta. Sólo Udoka desde el banquillo les apoya en la ofensiva. Mientras, Finley vive en sus carnes la marca de Battier y lanza 1 solo tiro a canasta en los 25 minutos que está en la cancha.
El que se va de ella, de la cancha, con cara de pocos amigos es Oberto. Parecía imposible batir la marca del partido ante Charlotte, cuando Popovich le sacó 2 segundos. Pues lo hizo ante Houston. El de Las Varillas saltó a la pista 1 segundo. Fue al final del segundo cuarto para defender un saque de banda del rival desde el otro lado de la cancha. Algo que no debió gustar mucho al cordobés.
Los números:
- San Antonio: Duncan 23 pt y 6 reb; Parker 22 pt y 12 as; Udoka 16 pt y 7 reb.
- Houston: Artest 24 pt; Scola 19 pt, 17 reb, 4 as y 3 rob; Ming 13 pt y 8 as.
- Yao Ming sólo hizo 2 asistencias en todo el partido, los 2 pases de canasta decisivos que finalizaron con las 2 canastas de Scola en los últimos 30 segundos.
- Duncan y Parker protagonizaron 46 de los 82 tiros de los Spurs, anotando sólo 17, la mitad de los tiros encestados por el equipo (34).
- Houston arrebata el liderato de la División Suroeste a San Antonio y se coloca segundo en la Conferencia Oeste.
Toronto 100 L.A.Clippers 76
Tuvieron que llegar los Clippers a Toronto para apaciguar la crisis de los Raptors. Y es que no se sabe muy bien a qué juegan estos Clippers, que da la impresión de que a algo menos de 1 mes para finalizar la temporada regular van ya en busca de un buen puesto en la lotería del draft.
Lo cierto es que al partido jugado en el Air Canada Centre le sobraron muchos minutos. Tantos que José Manuel Calderón tan solo estuvo en pista 27 minutos, lo que le vino muy bien, con total seguridad, a sus isquiotibiales. El español fue una de las fuentes ofensivas más importantes del equipo canadiense, pues estuvo más activo que de costumbre en el tiro. 15 puntos, 6 asistencias, 3 rebotes y 2 robos de balón por 1 sola pérdida fueron sus credenciales en un partido en el que probó 13 tiros a canasta y encestó 7.
Tanto él como Chris Bosh asumieron el papel estelar en la primera parte, momento en el que los Raptors ya habían sentado las bases de su triunfo (54-40). Calderón ya había anotado para entonces 11 puntos ante la indiferencia de un tal Baron Davis y Bosh alcanzó el descanso con 12 puntos y 10 rebotes (terminó el partido con 16 y 13).
El tercer cuarto disparó la ventaja hasta los 23 puntos (77-54). Y Marion se despidió del partido con 14 puntos y 13 rebotes y Parker rellenando buenos números en todos los apartados estadísticos. Y todo ello sin Bargnani, que fue baja por lesión y fue suplido en el quinteto titular por Jake Voskuhl.
El cuarto período no sirvió nada más que para que la segunda unidad local se exhibiera, aunque algunos ya lo habían hecho con anterioridad. Graham, Ukic y Mensah-Bonsu no desaprovecharon la ocasión para hacer muy buenos estadísticas.
Mientras, en los Clippers Camby dejó sentado en el banquillo a Kaman y Jones suplió la baja de Thornton. Pero en este equipo da igual quien juegue, eso parece lo de menos. Salvo Zach Randolph (20 puntos y 7 rebotes), el resto hicieron simple y llanamente el ridículo.
Pero donde los angelinos alcanzaron la cúspide de la desvergüenza fue en el rebote ofensivo. Poca intensidad, poca agresividad y nula ambición ha de tener un equipo que en la canasta contraria atrapa 2 rebotes por 43 del rival. Al descanso, los Clippers no habían capturado ni un solo rebote ofensivo (21-0) y habían robado 1 balón. Lo dicho, a por la lotería del draft.
Los números:
- Toronto: Bosh 16 pt y 13 reb; Calderón 15 pt y 6 as; Marion 14 pt y 13 reb; Graham 13 pt; Parker 10 pt, 8 reb, 5 as y 4 rob.
- L.A.Clippers: Randolph 20 pt y 7 reb.
- Los locales capturaron 57 rebotes por 34 de los visitantes, dominando el rebote defensivo 43-2.
- Toronto lanzó 100 veces a canasta, 25 más que su rival.
- El equipo canadiense robó 11 balones y perdió 10, mientras que los Clippers recuperaron 4 y perdieron 15.