Los Lakers en general y Pau Gasol en particular dejaron atrás anoche algunos fantasmas. La última vez que visitaron el Garden perdieron 131-92 y se quedaron sin título. Hace unas horas, ganaron en la prórroga en Boston (109-110) con un Gasol pletórico, que acabó con 24 puntos y 14 rebotes.
Gasol formó un consorcio extraordinario con Kobe Bryant y Lamar Odom para hacer olvidar la dura baja de Andrew Bynum. Y es que sin Bynum, con el equipo del año pasado prácticamente, ya que el hispano Trevor Ariza volvió a tener una mala actuación y sólo disputó 11 minutos, los de Phil Jackson demostraron que han madurado como grupo y también lo han hecho uno por uno a nivel individual. Y es que de las derrotas es de donde más se aprende, sobre todo si son tan duras como la que sufrieron la pasada temporada.
Estos Lakers han ganado los 2 enfrentamientos de esta temporada a los Celtics, y lo han hecho cortando, curiosamente, las 2 mejores rachas de victorias fabricadas por los bostonianos. En Navidad, los angelinos cercenaron una racha de 19 triunfos consecutivos de Boston en la liga y anoche cortaron otra fantástica cadena de éxitos célticos, que en esta ocasión se cifraba en 12 victorias seguidas.
Y en ambas derrotas bostonianas ha tenido mucho que ver Pau Gasol. Si en Los Angeles anotó los puntos más importantes del final del partido, hoy ha conseguido 5 de sus 24 puntos en la prórroga. Pero a esos 5 tantos ha añadido 3 jugadas cruciales a nivel defensivo, 1 en el cuarto tiempo, que acabó con empate a 101, y otra en el tiempo extra.
Brillo defensivo de Pau
La primera de ellas fue el doble toque de balón que hace en su defensa a Garnett cuando restan más de 4 minutos para el final del tiempo reglamentario. Garnett pierde el control de la bola y termina haciendo su sexta falta personal. Esa jugada implicó que Boston tuviera que jugar los últimos 9 minutos y 22 segundos -contando la prórroga- sin su estrella. Toda una ventaja para los visitantes.
La segunda y la tercera jugadas defensivas vinieron en los últimos segundos de la prórroga, un momento en el que Gasol y Odom suplieron la incapacidad de Bryant para anotar -se quedó en blanco en los últimos 5 minutos-. La segunda fue un tapón que le puso a Glen Davis a 17 segundos del final y la tercera llegó en la jugada postrera cuando sus largos brazos puntearon el triple de Ray Allen sobre la bocina, que casi no emprendió ni el camino del aro. Con la bocina, las cámaras se fueron a por el español, que fue felicitado por todos sus compañeros.
Además de ese buen tono defensivo, que mantuvo durante todo el partido ante Garnett, Gasol hizo 5 de los 9 puntos de su equipo en el tiempo extra, aunque los 2 más decisivos vinieran de la mano de Odom en forma de 2 tiros libres a 16 segundos del final en la jugada originada por el tapón del español a Davis. Odom se vio acosado por las personales todo el partido, pero en la segunda parte del mismo fue creciendo paulatinamente hasta convertirse en protagonista de la definición del encuentro en el cuarto período y la prórroga.
Kobe tuvo un día errático
Pau Gasol y Lamar Odom (20 puntos y 6 rebotes) fueron, como decimos, los hombres cruciales, pero ello no quita para saber valorar el esfuerzo y gran partido de Kobe Bryant, que fue el máximo encestador de los suyos con 26 puntos y apoyó decididamente el rebote -capturó 10-. Sin embargo, no fue su día en el tiro. Tuvo propensión a lanzar desde posiciones forzadas y acabó con un muy pobre 10 de 29 en el lanzamiento de campo.
El partido resultó igualadísimo. Nadie pudo dispararse en el marcador y alcanzar ni siquiera la decena de puntos de ventaja, como nadie fue capaz de ganar un cuarto por más de 4 puntos de diferencia. Por eso, cobran importancia acciones que a primera vista parecerían banales, tales como los 2 triples que anotaron en el tercer cuarto Farmar y Vujacic cuando los locales se habían ido por 59-51. Ese tipo de reacciones instantáneas impidió que la emoción desapareciera de un choque que por momentos resultó tenso.
La tensión se mascaba en el ambiente. Se trataba de algo más que un partido, y es que su importancia psicológica radicaba en que los Celtics buscaban terminar de hundir a su gran rival y los Lakers perseguían reivindicarse y dar un toque de atención a los campeones. Y lo consiguieron, no sin alguna que otra alteración del orden público.
El partido estuvo trufado de técnicas -se pitaron 4, pero pudieron ser más- y de algún que otro enganchón. A 9:01 del final del tercer cuarto Bryant y Rondo se las traen, el segundo empuja al primero, éste se encara con el base y se montra un barullo que se resuelve rápido. A 7:02 de la conclusión de ese mismo período, bronca entre Garnett y Odom, que se encaran de forma altiva... tampoco pasa a mayores. El partido, como ven, tenía todos los ingredientes para enganchar a la audiencia.
Destacados en Boston
Si en los Lakers funcionó el Big Three Bryant-Gasol-Odom, en Boston también estuvo a buen nivel el Big Three original. Ray Allen anotó 22 puntos, Paul Pierce hizo 21 y Kevin Garnett se quedó en 16, ya que sólo pudo jugar 33 minutos. Pero a ellos se añadieron jugadores que tuvieron una gran noche, especialmente Rajon Rondo (16 puntos, 12 asistencias y 8 rebotes) y Eddie House (16 tantos con 4 de 6 triples), que fueron 2 baluartes en el sistema de Doc Rivers.
Sin embargo, a pesar de todas estas contribuciones, los Celtics se fueron a la ducha con una sensación bien distinta a la que tuvieron en el sexto partido de la final 2008, cuando se sintieron en la cima del mundo. Lo bueno para ellos es que están a tiempo de rectificar. Por el momento, la temporada regular ha sido de los Lakers. Resultado: 2-0 para los angelinos.
Los números:
- Boston: R.Allen 22 pt; Pierce 21 pt, 8 reb y 5 as; Rondo 16 pt, 12 as y 8 rob; House 16 pt (4 de 6 tr); Garnett 16 pt, 6 reb y 3 tp.
- Lakers: Bryant 26 pt, 10 reb y 5 as (10 de 29 tc); Gasol 24 pt y 14 reb (10 de 14 tc); Odom 20 pt y 6 reb.
- Los Lakers cortaron una racha de 12 triunfos consecutivos de los Celtics.
- El equipo angelino sólo anotó un 58,6% de sus tiros libres (17 de 29).
- Bryant no anotó en la prórroga.