Jornada muy dispar para los jugadores hispanos. Mientras que el argentino Nocioni destacaba en el triunfo de los Bulls en Toronto, donde no jugó Calderón, Rodríguez hacía un partido gris en la derrota de los Blazers, donde Rudy Fernández estuvo ausente.
Los españoles Calderón y Fernández no pudieron intervenir anoche debido a sendas lesiones, un problema muscular en la pierna derecha el primero y una lesión en un pie el segundo.
Mientras, el puertorriqueño José Juan Barea no estuvo fino, y además perdió. Dallas cayó en su feudo ante la exhibición portentosa de Chris Paul que, con 33 puntos, 10 rebotes, 11 asistencias y 7 robos, rozó el cuádruple-doble y llevó a los Hornets al éxito.
Toronto 98 Chicago 102
Encuentro entre dos equipos en situación preocupante, tal y como demuestran sus guarismos. Tras este partido, los Raptors quedan con 16 triunfos y 24 derrotas y los Bulls con un balance de 17-22. No son los mejores números, ni lo que se esperaba en ambas franquicias al principio de temporada.
No fue de la partida el base titular de Toronto, el español José Manuel Calderón, y bien que lo notó su equipo. Primero, porque ni Solomon ni Ukic fueron capaces de apoderarse del ritmo del partido y segundo, porque el base rival, el novato Derrick Rose, les hizo un roto de consideración.
Rose fue el hombre del partido. El jugador de primer año acabó con 25 puntos y 10 rebotes, pero lo más notable de su actuación fue que 17 de esos 25 tantos los consiguió en el último cuarto, el cuarto en el que a los Raptors se le volvió a escapar un partido y ya son...
Los locales habían defendido con intensidad y coordinación hasta ese último acto, pero llegados esos 12 minutos finales su defensa empezó a presentar algunas vías de agua que terminaron por hundir el barco, un barco que al final del cuarto tenía 34 vías de agua en forma de puntos recibidos.
Junto a la gran labor de Rose, hay que destacar el papel de Luol Deng, que regresó a la titularidad y lo celebró con 16 puntos y 14 rebotes, y la formidable presencia del argentino Andrés Nocioni.
El ex de Tau de Vitoria estuvo firme, sólido y en más de una ocasión brillante. Terminó con 16 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias, asumió responsabilidades en ataque y, como nos tiene acostumbrados, se fajó a lo grande en defensa. Fue el santafesino el lugarteniente perfecto de Rose en el último período, ya que fue en los minutos cruciales cuando el ‘Chapu’ se creció. Sus 8 puntos en el último cuarto resultaron importantísimos.
Como importantísimo fue el tapón que el joven y díscolo Joakim Noah le colocó a Chris Bosh a 5 segundos del final cuando el marcador favorecía 98-100 a los visitantes. Ese tapón impidió el empate y permitió que 1 segundo más tarde Luol Deng finiquitara el compromiso con 2 tiros libres.
Así es el deporte. Bosh hasta ese tiro crucial había hecho un partido bastante acertado en ataque (25 puntos), aunque no había estado contundente en el rebote, mientras que su verdugo, Noah, había pasado prácticamente desapercibido.
El que no pasó desapercibido fue el italiano Andrea Bargnani, que ha puesto definitivamente la directa y está explotando como jugador NBA. Ante Chicago logró su récord anotador en la liga con 31 puntos, que acompañó con 10 rebotes.
Los números:
- Toronto: Bargnani 31 pt y 10 reb (10 de 14 tc); Bosh 25 pt; Parker 15 pt, 6 reb y 4 as.
- Chicago: Rose 25 pt y 10 as; Deng 16 pt y 14 reb; Nocioni 16 pt, 4 reb y 3 as.
- Los Bulls asistieron 33 de las 40 canastas que anotaron.
Philadelphia 100 Portland 79
Si el español José Manuel Calderón estuvo ausente en Toronto, su compatriota Rudy Fernández siguió el mismo camino y no jugó con Portland. Una dolencia que viene arrastrando en un pie desde hace algún tiempo le dejó definitivamente fuera del choque, como fuera del mismo se quedó el base titular de su equipo en la primera parte al sufrir una lesión en su hombro derecho.
Estas dos circunstancias dejaron tocado a los Blazers, pero no pueden ser excusa para no asumir la verdad: Portland hizo en Filadelfia un partido horrible.
Lo cierto es que en realidad no hubo partido en el Wachovia Center, ya que los locales apabullaron a su rival en el primer cuarto (31-15) y alcanzaron el ecuador del encuentro con todos los deberes hechos (55-33).
Sólo Brandon Roy estuvo a la altura en Portland (27 puntos) y en menor medida también lo estuvo LaMarcus Aldridge. Pero el resto no secundaron a sus dos estrellas ni en un lado ni en el otro de la cancha.
Los mejores ejemplos a nivel individual del desastre colectivo fueron el novato Greg Oden, desaparecido en combate, y los 2 bases que deberían haber suplido a Blake con inmensos deseos de demostrar su categoría, el español Sergio Rodríguez y el novato Jerryd Bayless. Pero tal vez esos deseos pudieron con la pareja.
El ‘Chacho’ Rodríguez estuvo mal. Jugó 15 minutos desangelados en los que no anotó, capturó 4 rebotes, dio 2 asistencias y perdió 3 balones. Partido para archivar y meterlo en un cajón bien escondido.
No le fue a la zaga Jerryd Bayless, que lo hizo incluso peor. Bayless jugó más minutos que Sergio, ya que se desenvolvió como base y como escolta, ausente Rudy. Pues bien, el novato se jugó en 25 minutos 11 tiros y sólo anotó 1. Encima, en toda esa minutada no dio a sus compañeros ni una sola asistencia. Ahora, McMillan tendrá que decidirse por uno u otro para suplir a Blake o bien colocar a Roy de base y a Bayless de alero al estar ausente Fernández. Lo cierto es que si Rodríguez no juega ante los Nets como titular será la prueba definitiva de su final en Portland.
Volviendo al partido, hay que decir que los Sixers fueron mejores de principio a fin liderados por un brillante Andre Iguodala (29 puntos), bien apoyado por el resto de sus compañeros, con especial mención para los suplentes Williams y Speights.
Algunos datos estadísticos no dejan lugar a dudas. Los visitantes sólo anotaron el 39,4% de sus tiros, Philadelphia logró 11 triples por sólo 3 Portland y, el más espectacular, los 76ers robaron 10 balones y sólo perdieron 9 y los Blazers arrebataron a su rival 2 veces el balón y lo perdieron en 16 ocasiones. Lo dicho, partido para olvidar del equipo de Oregón.
Los números:
- Philadelphia: Iguodala 29 pt, 6 as y 4 tr; Williams 14 pt y 6 as.
- Portland: Roy 27 pt, 5 reb y 6 as; Aldridge 15 pt y 9 reb; Przybilla 9 reb en 14 min.
- Los Blazers sólo lograron 2 puntos al contraataque.
Dallas 97 New Orleans 104
El que hubiera sido el año pasado un partido de campanillas, esta temporada lo era menos, ya que mientras los Hornets son un equipo ascendente en la liga que aspira a todo, los Mavericks son un conjunto en franco declive que a día de hoy está fuera de los playoffs en el Oeste. Y esos distintos rangos adquiridos por uno y otro equipo se notaron anoche en la pista.
El primer rango de superioridad sin posible contestación por parte de Dallas fue el ejercido por el mejor base de la NBA, Chris Paul, que le dio un repaso de los que no se olvidan al otrora grande Jason Kidd.
Cada vez parece más claro el monumental error cometido por Mark Cuban al desprenderse del joven Devin Harris para quedarse con el veterano Jason Kidd. La realidad está siendo muy cruel con Cuban y ese fichaje, con más lógica mediática en su día que lógica deportiva.
El caso es que Paul lo bordó y a punto estuvo de conseguir un cuádruple-doble. Su partido asusta: 33 puntos, 10 rebotes, 11 asistencias, 7 recuperaciones de balón y sólo 2 pérdidas en 42 minutos de juego.
Con su excepcional dirección de juego, su equipo, aunque sin holguras, supo derrotar a los Mavs. El reparto de juego de Paul fue un misil inteligente que destrozó la defensa local y permitió entrar como Pedro por su casa en dicha defensa a jugadores como West o Stojakovic, aunque preferentemente el agujero anotador lo hizo el propio Paul, omnipresente toda el partido.
Dallas, por su parte, naufragó en ataque en la segunda parte, se mostró incapaz de robar balones e infundir respeto a su rival y si terminó perdiendo por estrecho margen fue porque tiene piezas individuales de una calidad incontestable. Sobre todo 2, el alemán Dirk Nowitzki (20 puntos y 13 rebotes) y Jason Terry, un suplente falso disparado hacia el galardón de Mejor Sexto Hombre de la liga (28 puntos ante los Hornets).
El resto poco aportaron. Excepto Antoine Wright, que hizo un partido mucho más que decoroso, los demás se perdieron no se sabe dónde. Entre todos esos jugadores sin rumbo se hallaba el puertorriqueño José Juan Barea, que en los 13 minutos que estuvo en la pista apenas sobresalió en algo. Anotó 2 puntos, dio 3 asistencias y contempló, impotente, una nueva derrota de su equipo.
Los números:
- Dallas: Terry 28 pt y 4 tr; Nowitzki 20 pt y 13 reb; Wright 15 pt (3 de 3 tr).
- New Orleans: Paul 33 pt, 10 reb, 11 as y 7 rob; West y Stojakovic 16 pt; Chandler 10 pt y 14 reb.
- Chris Paul es el primer jugador que logra al menos 30 puntos, 10 rebotes, 10 asistencias y 7 robos desde que lo hiciera Alvin Robertson en noviembre de 1986.
- Dallas anotó los 14 tiros libres de los que dispuso.
- Los locales robaron 1 balón y perdieron 14 y los visitantes recuperaron 10 y sólo extraviaron 6.
Los Thunder vapulean a los Jazz
La sorpresa de la jornada fue la amplia victoria de Oklahoma City Thunder ante Utah Jazz (114-93).
Los visitantes acusaron sus esfuerzos a lo largo de la temporada por las continuas ausencias de sus figuras y perdieron en un mal partido en el que sólo su base Deron Williams, con 25 puntos, y los suplentes Korver y Koufos estuvieron al nivel exigido.
Los Thunder, que se escaparon en el tercer cuarto, contaron con las actuaciones estelares de los jóvenes Jeff Green (23 puntos y 8 rebotes), Russell Westbrook (22 tantos, 7 asistencias y 3 robos) y Kevin Durant (21 pt y 9 reb), así como con las colaboraciones de Watson, Collison y un gran Krstic, que hizo su primer doble-doble con su nuevo equipo (14 puntos y 11 rebotes).