Los aficionados de Toronto pueden ser los primeros que vean a Allen Iverson luciendo su nueva camiseta. Iverson jugará esta noche en el partido que enfrenta a Raptors y Pistons siempre que Billups le deje, ya que, según las reglas de la NBA, éste ha de pasar el examen médico con su nuevo equipo esta tarde, podría hacerlo mañana, para que a aquél se le permita jugar.
Iverson se ha mostrado tremendamente ilusionado con su nueva etapa en Detroit donde cree que puede intentar lograr el anillo que corone su brillante carrera en la NBA. Su disposición es total: “Voy a hacer lo que el entrenador quiera que haga”, declaraba en rueda de prensa. “¿Incluso entrenar?”, le preguntó con humor el GM del equipo Joe Dumars.
En Denver también esperan con ansiedad el debut de Chancey Billups, pero el base no será probalemente de la partida en el encuentro que les enfrenta esta noche a los Warriors. Su bautizo con el equipo de su localidad natal se podría producir el viernes contra los Mavs.
Su nuevo técnico George Karl se mostraba emocionado por “tener a un base que es especial”. Un “orquestador de victorias” según Karl que “ayudará a todos a conseguir mejores tiros”.
A Karl tampoco le desagrada tener a Antonio McDyess en el equipo, pero la idea de la franquicia es otra y todo indica que está negociando la rescisión de su contrato. Si McDyess queda libre tendrá muchos pretendientes y no es descartable que el jugador vuelva a Detroit.