José Pañeda es la voz inquebrantable. Lo es porque lleva 1.362 partidos consecutivos de temporada regular narrando en español en la radio los partidos de Miami Heat. Cuando va a comenzar su decimoctava campaña como locutor llega el momento de rendir un merecido tributo a “La Voz”.
“La Voz” se inició en el mundo de la radio y la televisión de forma ciertamente curiosa, ya que su formación no era periodística sino empresarial.
Pañeda, hijo de exiliados cubanos, nació en La Pequeña Habana, ese Miami que le ha dado todo y al que tanto quiere. Fue allí donde creció y recibió una enseñanza bilingüe que le llevó hasta la universidad. Nuestro protagonista se graduó sin salir de su estado natal, lo hizo en la Universidad Internacional de Florida. Lo suyo iba a ser la empresa, y en parte su futuro quedó ligado a esa ocupación.
Nada más salir de la universidad ingresó en los Heat. Corría el año 1987. Sus comienzos en el equipo de la NBA estuvieron ligados a sus estudios, ya que trabajó como representante de venta de boletos sin que por entonces se pudiera atisbar ninguna aspiración por convertirse en narrador de partidos.
Sin embargo, en su fuero interno había un gran comunicador, y él lo sabía. Por eso, cuando los Heat empezaron a buscar narradores para sus partidos en español José se armó de valor, compró una pequeña grabadora y narró un partido de exhibición que los Heat jugaron en Boca Ratón. Sin encomendarse ni a Dios ni al Diablo, el joven Pañeda presentó la cinta al club (eran tiempos de cassettes) y se limitó a esperar una respuesta.
“Pasé muchas noches sin dormir esperando una respuesta”, rememoró muchos años después el ahora prestigioso locutor. Pero para su sorpresa los ejecutivos del club dieron el sí y se le abrieron todas las puertas. Así fue como Pañeda se convirtió en la voz española de los Heat de Miami.
Una vida agitada llena de alicientes
Fue éste el inicio de una vida distinta que se resume en un notable cambio: Pañeda hasta entonces apenas había volado en avión, pero a partir de ese momento se convirtió en un asiduo de los aeropuertos estadounidenses.
Buena parte de su éxito se lo debe, todo hay que decirlo, a su mujer. Ana, que así se llama, soportó durante muchos años la ‘locura’ narradora de su esposo. Tal fue así que Pañeda no dejó de retransmitir un partido ni siquiera cuando nacieron sus hijos mellizos.
No es que el locutor abandonara a su mujer, ni mucho menos. Lo que ocurrió es que asistiendo al parto y sin poder acudir a las canchas, Pañeda se las ingenió para retransmitir los partidos observándolos por la televisión.
Así es fácil explicar el porqué de que Pañeda haya llegado a narrar casi 1.400 partidos consecutivos de temporada regular, a los que hay que sumar 102 de playoffs, incluidos los que dieron el título de la NBA a los Heat en el año 2006.
Son cifras que suponen un récord en español no solo de la franquicia de Florida, sino también de toda la NBA.
Un hombre afortunado
“He sido un bendecido”, aseguraba Pañeda poco antes de alcanzar su partido consecutivo número 1.000. Un número redondo que logró precisamente en un duelo estatal de alta intensidad, ya que fue en un partido que enfrentó a los dos equipos de Florida, los Miami Heat y los Orlando Magic.
Fue entonces un buen momento para recordar sus comienzos, sus inseguridades en la primera temporada como narrador, su larga trayectoria en la WQBA (radio en español en la que trabaja actualmente y que es propiedad de Univisión) y el gran apoyo que le ofreció en sus inicios el que entonces era el narrador de los Heat en televisión, Eric Read, al que siempre consideró un fuera de serie.
A partir de entonces, de esos inicios, su voz encadenó temporada tras temporada hasta acercarse a las dos décadas en el oficio. Un desempeño en el que está acompañado desde hace ya bastantes años por Joe Pujala, que ejerce de analista en los partidos.
Trayectoria admirable
La trayectoria de Pañeda resulta impresionante. A su larga implicación con la WQBA 1140 AM se une un buen ramillete de éxitos.
Pañeda fue el primer narrador en español de un partido de Miami Heat en televisión. Corría el año 1998, año en el que Sport Illustrated le nombró como uno de los cinco narradores más rápidos de la NBA. Y es que cuando Pañeda pone la directa es prácticamente imparable. Su fluidez verbal es legendaria, especialmente cuando inserta en la narración sus anuncios, que para eso es responsable de publicidad en la franquicia.
El locutor nacido en Miami ha narrado también partidos de TV en español para la WJAN Canal 41 y para la TNT Latino, haciendo llegar su voz a un buen número de países hispanoamericanos, hecho que también ha logrado al acercar sus narraciones de la WNBA (NBA femenina) a 21 países hispanohablantes.
Pero su trabajo ha ido más allá. Ha narrado en español 9 finales de la NBA y 11 Partidos de las Estrellas para Estados Unidos y el extranjero.
Algo más que un narrador
Pero sería una equivocación si la figura de Pañeda quedara limitada a su portentoso trabajo en el micrófono. Pañeda es mucho más en Miami Heat, donde 21 años después de su llegada al equipo ocupa el cargo de Consejero Principal de Mercadeo y Medios Hispanos. Él se encarga de ser el portavoz de la franquicia en el campo de la publicidad y constituye el nexo entre los Heat y la comunidad hispana.
Nadie duda, hoy por hoy, de que el mercado hispano está en auge no solo en un estado clásico en este sentido como es Florida, sino también en el resto del país, especialmente en las zonas con una rica tradición hispana.
La prueba está en las 9 emisoras de radio que retransmiten en directo los partidos de la NBA en español para otras tantas franquicias. Además de Miami, otros 8 equipos son retransmitidos en español: Orlando (con el dúo Joey Colón y Ramón Rivas), Dallas (Víctor Villalba), Houston (Adrián Chavarría), San Antonio (Paul Castro), Phoenix (con la pareja Arturo Ochoa-Gerardo Romo), Sacramento (Armando Botello) y los dos equipos de Los Angeles, los Clippers (Hipólito Gamboa- Rolando González) y los Lakers (con Fernando González y José Mantilla, que retransmiten para la KWKW, la radio en español más antigua de todo el área metropolitana angelina).
Todos esos nombres hacen grande el español en Estados Unidos y, en concreto, en la NBA, una máquina empresarial cada día más interesada en el mercado hispano. Pero por encima de todos esos nombres está el ilustre apellido de un clásico entre los clásicos: Pañeda, de nombre José.
La suya ha sido una inesperada carrera de fondo, una carrera a la que le quedan, visto lo visto, bastantes años a juzgar por las palabras de nuestro protagonista: “Mis días vuelan. Muchas personas desean que llegue el fin de semana, pero yo tengo algo emocionante que ver cada día”.