Chris Paul y Gilbert Arenas han renovado sus contratos con sus equipos, los New Orleans Hornets y los Washington Wizards. Lo han hecho por cifras astronómicas. Paul cobrará 68 millones de dólares por 4 temporadas y Arenas 111 millones por 6 campañas, según informan diversos medios estadounidenses.
Espectacular resulta el salto cuantitativo que supone el nuevo contrato de Paul, que en la recién acabada temporada todavía arrastraba su contrato de novato, por lo que cobraba algo más de 3,6 millones de dólares. Mientras, Arenas también incrementa notablemente su ficha, si bien esta temporada ya percibía cerca de 12 millones de dólares.
Pero a diferencia de Arenas, Chris Paul no podrá empezar a percibir su nuevo sueldo multimillonario hasta la temporada 2009-2010, ya que todavía le resta una campaña bajo el antiguo contrato, que se cifra en 4,5 millones de dólares para la próxima temporada 2008-2009.
El base de los Hornets ha firmado una extensión de contrato por 3 años a los que habrá que sumar un cuarto en el que tendrá derecho a ejercer la ‘player option’, es decir, será el propio jugador el que decida permanecer fiel al contrato o salirse del mismo para entrar en el mercado.
La franquicia apostaba por un acuedo de 5 años (4 de extensión más 1 en el que Paul pudiera acogerse a la ‘player option’), pero finalmente los plazos se han acortado una temporada, lo que permitirá al base formado en Wake Forest quedarse como agente libre un año antes de lo que hubiera querido su equipo.
Según ha explicado el agente del jugador, Lance Young, el acuerdo con el general manager del club, Jeff Dower, fue rápido y no presentó inconveniente alguno, tal y como demuestra el hecho de que los Hornets vayan a pagar al joven armador, de tan solo 23 años, el máximo salario estipulado por el convenio vigente de la NBA para jugadores de la antigüedad en la competición que tiene Paul, que lleva 3 años en la liga.
Bien se lo ha merecido Chris Paul. Y es que no es para menos teniendo en cuenta la portentosa temporada que ha firmado el jugador, que se ha convertido por méritos propios en el mejor base de la NBA tomando así el relevo del gran Steve Nash.
Paul concluyó la temporada regular promediando 21,1 puntos por partido, 11,6 asistencias y 2,7 robos de balón. Y lo hizo en uno de los mejores equipos de liga, ya que los Hornets fueron segundos en el Oeste en la fase regular con 56 victorias y llegaron hasta las semifinales de conferencia donde cayeron derrotados por San Antonio Spurs.
Por todo ello, Chris Paul luchó hasta última hora con Kobe Bryant en pos del preciado galardón de MVP de la temporada regular, un galardón que fue a parar, finalmente, a las manos del escolta de los Lakers.
Washington conserva su particular ‘Big Three’
Mientras, uno de los tres agentes libres más cotizados de la liga ya tiene equipo, y ese equipo es el mismo en el que ha jugado en los últimos años.
Los Wizards de Washington conservarán la próxima campaña su ‘Big Three’, ya que tanto Antawn Jamison como Gilbert Arenas cerraron acuerdos con su club.
El último en hacerlo a sido el ‘Agente Cero’, que, en su línea, lo ha hecho a su manera, es decir, de un modo un tanto anómalo.
Arenas cerró el acuerdo con los Wizards estando en China, donde está protagonizando una gira de promoción de una compañía de calzado. Desde allí y sin agente, el ex de Arizona y de los Warriors, ha firmado por 6 temporadas con el equipo capitalino, que le abonará por ellas un total de 111 millones de dólares, 16 millones menos de los previstos inicialmente.
Las declaraciones de Arenas a The Washington Post no pueden ser más significativas, a la par que razonables: “¿Qué puedo hacer por mi familia con 127 millones que no pueda hacer con 111 millones?”.
El caso es que esos 16 millones que se ahorrará la franquicia serán bienvenidos y podrán invertirse en el futuro en reforzar la plantilla, motivo por el cual Arenas ha renunciado a ellos.
El extravagante base, seleccionado 3 veces para el All-Star, decidió salirse de su contrato con los Wizard, del que le restaba una temporada, para poder constituirse en agente libre y negociar su futuro, pero desde el principio mostró su máximo interés por proseguir su relación con Washington a pesar de que sobre su mesa hubo más de una oferta.
A pesar de su aciaga temporada 2007-2008, Arenas firma así un acuerdo contractual de altísimo nivel. Tanto es así, que se trata del sexto mejor contrato de 6 años que se rubrica en la NBA desde 1999, sólo superado por Kobe Bryant, Jermaine O’Neal, Rashard Lewis, Chris Webber y Tim Duncan.