Anoche estaban en liza cuatro equipos del Este que están en plena lucha o bien para situarse en una buena plaza de playoffs (Washington, Philaldelphia y Toronto) o bien para firmar la clasificación a la fase eliminatoria (Atlanta), a la par que otros dos equipos intentaban jugar sus agónicas bazas para no quedar eliminados en esa misma conferencia (New Jersey y Chicago). De los seis, los que salieron mejor parados de la jornada fueron Washington y Atlanta, que se afianzan en la quinta y en la octava posición.
En cuanto a los jugadores hispanos, Horford volvió a alcanzar un doble-doble en la importante victoria de los Hawks sobre los Sixers; Delfino y Calderón no vivieron su mejor partido en la derrota de su equipo, Toronto, ante New Jersey; y Nocioni pasó desapercibido en una nueva debacle de Chicago, que fue derrotado con claridad en su cancha por los Wizards.
Philadelphia 85 Atlanta 92
Paso atrás de los Sixers en su lucha por la quinta plaza del Este y paso adelante muy importante de los Hawks para clasificarse para los playoffs por primera vez desde 1999.
Atlanta está cada vez más cerca de sus objetivo. Mike Woodson, con un ejército de jugadores muy jóvenes, está a punto de devolver al equipo de Georgia una ilusión que durante los últimos años había quedado ahogada temporada a temporada. Lo está haciendo con un equipo cargado de futuro en el que sólo dos componentes han disputado la post-temporada: Mike Bibby con Sacramento y Joe Johnson con Phoenix. El resto está a la espera de vivir su primera experiencia en las eliminatorias por el título. Les espera, si todo marcha bien, Boston, el equipo que ha dominado la liga desde el principio. La derrota, previsible, no podrá empañar un gran año.
En el Wachovia Center, la juventud de Atlanta no fue un impedimento para la victoria. Parecen jóvenes maduros estos Josh Smith, Marvin Williams, Josh Childress o Al Horford. Éste último, jugador de primer año, volvió a firmar un doble-doble (10 puntos y 12 rebotes en 34 minutos con 5 de 8 en el tiro de campo).
El dominicano apoyó bien al triángulo configurado por un enrachado Joe Johnson (22 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias), Josh Smith (18 puntos, 10 rebotes y 3 tapones) y Marvin Williams (18 tantos).
Atlanta había anotado 55 puntos al descanso mientras que su rival llevaba 57 a la conclusión del tercero, pero este dato no fue concluyente debido al discurrir ultradefensivo del tercer acto donde un parco 13-15 dejó el marcador en 57-70.
Así comenzó la última parte, un período en el que Philadelphia llegó a acercarse a 4 puntos. Sin embargo, poco después un mate de Horford colocaba a los suyos con 11 de ventaja (72-83 a 5:29 del final). Con ese colchón en el electrónico, los de Woodson supieron acomodarse a las circunstancias y con una gran madurez controlaron la situación sin pasar apuros hasta que el duelo concluyó.
Todo ello a pesar de su pobre balance defensivo, que permitió a los locales hacer subir al marcador 29 puntos en contraataques. Ese fue uno de los pocos peros que se le puede poner al gran trabajo defensivo desarrollado por el equipo de Georgia, que dejó a su rival en unos porcentajes de tiro bastante discretos. Atlanta dominó el rebote, supo dominar el ritmo del partido en los minutos finales y, en general, seleccionó con acierto sus lanzamientos.
Philadelphia sigue, a pesar de la derrota, en plena lucha por el quinto puesto con Washington y Toronto, aunque los Raptors ven cómo se les acerca el octavo clasificado, que es precisamente Atlanta.
En los Sixers, los mejores fueron los dos Andre, Iguodala con 25 puntos y 9 rebotes y Miller con 18 puntos, aunque sólo distribuyó 3 asistencias. Desde la segunda unidad cabe destacar el buen partido de Williams y Carney.
New Jersey 99 Toronto 90
Los Raptors sigue cayendo por el tobogán sin que su cuerpo técnico sea capaz de atisbar soluciones. Anoche encadenaron su tercera derrota consecutiva y lo que hace unos días era un desastre, quedar séptimos, ahora puede ser un mal menor, ya que como sigan por este camino pueden verse amenazados por el octavo, que es Atlanta.
Ante los vaivenes de Sam Mitchell, algunos jugadores parecen haber perdido el rumbo: el italiano Bargnani está desaparecido (0 puntos en 16 minutos) y sólo emerge de vez en cuando, ante la indefinición en el puesto de base los dos armadores alternan actuaciones positivas con notables desaguisados (anoche entre Ford y Calderón repartieron 7 asistencias) y suplentes de calidad como Delfino y, sobre todo, Kapono no parecen encontrar su sitio.
En el IZOD Center volvió a repetirse la historia. En los dos primeros cuartos los Raptors no ajustaron bien sus movimientos defensivos y en el tercero y el cuarto, una vez mejorada la defensa, no hallaron las claves ofensivas.
Las dos estrellas de los Nets sumaron 60 puntos, 12 rebotes y 11 asistencias. Carter aportó 32 puntos, 7 rebotes y 5 pases de canasta y Jefferson 28, 5 y 6. Ambos resultaron imparables y decisivos, teniendo especial mérito la actuación de Carter debido a sus molestias en el tobillo derecho.
En su apoyo salieron dos recientes adquisiciones: Devin Harris (12 puntos, 5 rebotes y 7 asistencias) y Stromile Swift (10 puntos y 6 rebotes), que cuajó uno de sus mejores partidos desde su llegada desde Memphis.
Por parte de los Raptors, destacó nuevamente Nesterovic, que está haciendo un final de temporada más que notable. El esloveno hizo 22 puntos, 14 rebotes y 3 tapones (10 de 12 en los lanzamientos de campo). Junto a él sólo se salvó Bosh (18 puntos, 10 rechaces y 6 pases de canasta).
Una canasta de Parker nada más iniciarse el último cuarto empató el encuentro a 76, pero a partir de ese momento los Raptors se desconcentraron y recibieron un parcial que acabaría siendo decisivo, un 13-2 que puso el luminoso en 89-78. Bastaron esos 3 minutos de despiste para dar por zanjada la situación, una situación que no llegó a buen puerto para los canadienses porque ni supieron parar a Carter (anotó 10 puntos en los primeros 6 minutos del último cuarto) ni pudieron echar mano de su arma más mortífera. Y es que el mejor equipo de la liga en el lanzamiento triple se descolgó ante los Nets con 3 triples de 22 intentos, un auténtico boquete en su línea de flotación. Y el barco antes de llegar al puerto se hundió.
El resultado permite a los de Lawrence Franks aferrarse a unas matemáticas imposibles. Aún no están eliminados, pero es sólo una cuestión de tiempo.
Chicago 87 Washington 99
Los Wizards se hacen fuertes en la quinta posición del Este gracias a la incapacidad del juego interior de los Bulls, que anoche fue borrado del mapa por un equipo, Washington, que no es que destaque por su fortaleza en la zona.
Ausente Gooden, el juego interior de Chicago quedó en manos de dos jóvenes talentosos, Thomas y Noah, pero los dos naufragaron. Su fragilidad, unida a la de sus compañeros, hizo internacional a Haywood, que firmó la mejor anotación de su carrera (25 puntos y 10 rebotes). Fue el mejor de los Wizards, bien secundado por Butler (18 puntos y 8 rechaces) y Songaila, que desde la titularidad aportó 14 tantos y 8 rebotes. Además, desde el banco se sumaron al buen juego Mason y Blatche.
El equipo capitalino pudo contar con Stevenson, pero no con Jamison tras los fatídicos últimos 6 segundos de su partido ante los Bucks, segundos en los que perdieron el partido y a los dos jugadores citados por lesión. La ausencia de Jamison hace aún más grave la deserción de los Bulls del juego bajo los tableros.
Y es que no sólo fue el recital anotador de Haywood lo que dejó en ridículo a los hombres altos de los Bulls. Para más inri el partido acabó con 53 rebotes para los locales y 28 para los visitantes, que se vieron desbordados.
Pero sería injusto descargar todas las culpas en los jóvenes Thomas y Noah cuando jugadores más expertos como Hinrich, Deng o el argentino Nocioni no aportaron nada. Nocioni acabó, por ejemplo, con 5 puntos y 1 asistencia en 17 minutos. Y no fue el peor.
En Chicago, Gordon, con 18 puntos, y Hughes, con 16, intentaron aminorar un desastre que se vio maquillado a última hora, ya que a 3:42 del final los locales perdían por 21 puntos de diferencia (74-95).
Arenas volvió a ausentarse. Tras dos partidos jugados una vez recuperado de su lesión de rodilla, anoche no se vistió por precaución. Su equipo ganó. Que cada uno extraiga sus conclusiones.