Chris Paul es expulsado por Scott Foster en su regreso a Phoenix

Era una ecuación de máximo riesgo. Las incógnitas de la misma: Chris Paul, Scott Foster, regreso a Phoenix. ¿Qué podía salir mal? La relación de Paul con el árbitro Scott Foster es ya un viejo camino de espinas y Paul estaba evidentemente tenso en su vuelta a Phoenix.

Se aproximaba el descanso. Quedaban 23,2 segundos para que acabara el segundo cuarto. Chris Paul protestó y habló largo y tendido con Foster en una conversación que parecía discurrir por cauces educados, pero llegado un momento el colegiado dio un respingo por algo que le dijo el base y terminó expulsándolo. La leyenda negra Paul-Foster tiene desde hoy un nuevo capítulo. Y no parece que vaya a ser el último.

La cosa había empezado mucho mejor para Chris Paul. Su exequipo proyectó un vídeo tributo para celebrar su primera visita a Phoenix tras su salida de la franquicia. Se proyectó antes del inicio del partido. Luego su partido, que estaba siendo bueno, se truncó.

Se enfrentaban dos equipos con dinámicas muy distintas. Phoenix Suns, al que todavía le queda tiempo para poder estrenar su nuevo big three, está en buena racha: esta es su quinta victoria consecutiva. Golden State Warriors anda en las antípodas, en plena crisis: suma 7 derrotas en los últimos 8 partidos.

Phoenix llegó a tener 23 puntos de ventaja jugándose el tercer cuarto. Todo parecía decidido en el último, y por eso ambos equipos se relajaron y retiraron de la pista a sus hombres esenciales. Pero entonces los suplentes de Warriors casi remontan el partido, y a 1:48 del final Frank Vogel tuvo que reponer en pista a Kevin Durant, Devin Booker y compañía porque el partido se le había complicado a los Suns. En ese momento el marcador era de 114-108.

Con Durant y Booker ya en liza la cosa aún empeoró un poquito más, y Warriors se puso a tiro de piedra: 118-115 faltando 19 segundos. Pero el equipo local fue capaz de templar sus ánimos y ganar 123-115.

A Warriors no le ha llegado en buen momento la suspensión de Draymond Green. El equipo no está bien. Ha encadenado una horrible racha de resultados, lo que se hace más grave si se piensa que casi todos los partidos con derrota los ha afrontado como equipo local.

En cuanto a hoy, Durant lideró a Suns ante su exequipo con 32 puntos, 8 rebotes y 15 de 15 en libres, con Booker en 25 puntos, 8 rebotes, 10 asistencias y 13 de 14 en libres. Entre ambos lanzaron 29 libres, idéntica cifra que todo el equipo de los Warriors. Pero es que Phoenix... ¡tuvo a su disposición 52 tiros libres a partir de que a su rival le pitaron 34 faltas! Una locura.

En Warriors, 23 puntos y 6 triples de Klay Thompson, 17 puntos en 22 minutos de un muy activo Dario Saric y 16 puntos y 6 asistencias, con 1 de 8 desde el triple, para un discreto Stephen Curry, que asistió a la definición del partido desde la banda, ya que Steve Kerr mantuvo en juego a sus suplentes como premio a que habían sido ellos los que pusieron al equipo con opciones de triunfo.

En cuanto a Andrew Wiggins, pues tras un breve paréntesis volvió a las andadas. No está bien, como no están bien estos Warriors.