Los Knicks arruinan el debut de Harden con los Clippers

Debut amargo de James Harden con los Clippers. El escenario no podía tener más empaque, el Madison Square Garden, pero Clippers no dio la talla en el último cuarto ante unos Knicks que ofrecieron una imagen muy convincente, ganando cómodamente pese a la noche insípida de Jalen Brunson, que solo metió 7 puntos.

Victoria local por 111-97 con Julius Randle en 27 puntos y 10 rebotes, RJ Barrett, que venía de estar de baja, con 26 puntos y Mitchell Robinson con 13 tantos, 15 rebotes y 4 robos. Pero los que de verdad marcaron la diferencia en el partido fueron los suplentes locales, con un enorme Donte DiVincenzo al frente de las operaciones decisivas del cuarto final.

DiVincenzo pareció por momentos tener el don de la ubicuidad. Estaba en todas partes: defendiendo, atacando, exhibiendo pasión, discutiendo... y fue ese espíritu, el de los Knicks agerridos de Thibodeau, tan marcados por las exigencias defensivas de su entrenador, el que terminó derrumbando a unos Clippers decepcionantes que tendrán que trabajar bien el ensamblaje de sus piezas.

Harden partió como titular y no se le vio mal. Hizo 17 puntos y 6 asistencias en 31 minutos de juego. Este es un Harden de 'segunda generación'. Algunos querrán no ver en él aquel anotador compulsivo de los Rockets, algo indudable, pero no es menos cierto que en su paso por Nets y Sixers Harden ha mostrado madurez y ha sabido adaptar su juego, cada vez más generoso y más capaz de pensar en el bien colectivo. Tendrá ocasión de seguir desarrollando esa visión en los Clippers.

Más allá del debut de Harden, a Clippers le sobró el último cuarto, un cuarto que perdió 35-21 tras solo capturar 3 rebotes en los últimos 12 minutos y perder nada menos que 7 balones, mientras que Knicks presentaba una gran efectividad de cara al aro, anotaba con facilidad al contraataque y asistía 12 de sus últimas 13 canasta.

Terminó el tercer cuarto 76-76. Las espadas estaban en todo lo alto, pero el inicio del último cuarto ya marcó tendencia. Parcial de 7-0 para forzar un tiempo muerto, y después de ese tiempo el despegue sin freno hasta lograr una máxima ventaja de 17 puntos con DiVincenzo, Hartenstein y compañía haciendo un muy buen trabajo en ese despegue.

Clippers embarrancó en un partido plagado de pérdidas de balón. Más de 40 entre ambos equipos, 19 los locales y 22 los visitantes. Embarrancó en el rebote, mostrándose frágil en su propio aro, y presentó un muy mal balance defensivo, que se tradujo en 26 puntos encajados al contraataque.

Kawhi Leonard hizo 18 puntos, Russell Westbrook 17 y Norman Powell 14. Jornada gris de Paul George, que pareció empezar con cierta fluidez en el juego para terminar sin gracia ofensiva. Y, por si fuera poco, lesión de rodilla de Mason Plumlee. Habrá que esperar a ver cuál es su estado.