Markkanen y Kessler doblegan a los Celtics

Utah Jazz se aferra a la competición para no perder de vista los playoffs. En esa capacidad para aferrarse a sus esperanzas hoy se ha llevado por delante a Boston Celtics en un partido tremendamente igualado que ha acabado 118-117.

Will Hardy es un gran conocedor de los entresijos de Boston. No en vano llegó esta temporada a Utah después de ejercer en el cuerpo técnico de los Celtics. Y ese conocimiento siempre es un punto a favor.

Luego están las improvisaciones a las que obliga el juego. Boston perdía 118-117 y tenía 5 segundos para ganar el partido. El tiempo muerto de Joe Mazzulla había designado a Jayson Tatum como jugador que tenía que recibir la bola para buscar la canasta triunfal, pero la bola nunca le llegó, la bola fue directamente para Grant Williams, que tomó una decisión más que discutible al encarar el cuerpo a cuerpo bajo el aro con Walker Kessler, uno de los mejores taponadores de la liga. Y Kessler taponó sin apenas esfuerzo el intento final de Williams.

Fue una pena para Grant Williams, porque hasta ese momento era uno de los jugadores de la noche. Llevaba 12 puntos en el cuarto final cuando se envalentonó en la jugada final, y terminó el partido con 23 puntos tras meter nada menos que 7 triples.

Por otra parte, Tatum, jugador llamado a decidir el partido, no tuvo una noche muy afortunada que digamos. Se fue de Salt Lake City con 15 puntos tras fallar 8 de sus 12 tiros de campo.

Utah jugaba su primer partido en casa en todo el mes de marzo. Sus aficionados no veían a su equipo desde el 28 de febrero. Desde entonces 6 partidos seguidos como visitante, que contrastan con la localía que han emprendido este sábado, que les llevará a jugar 4 seguidos en casa.

Fueron competitivo los Jazz, que llegaron a estar 19 puntos abajo. Lo fueron con Lauri Markkanen en 28 puntos y 10 rebotes y con Walker Kessler en 12 puntos, 14 rebotes y 3 tapones.

Talen Horton-Tucker hizo 19 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias, probando en la recta final las mieles de la alegría con la canasta que puso el definitivo 118-117 en el marcador y las de la tristeza cuando perdió en los últimos segundos un balón que le pudo costar el partido a su equipo.

Importantes también las aportaciones al equipo local de Ochai Agbaji (16 puntos) y de Kelly Olynyk, jugador pegamento por antonomasia, que terminó con 13 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias. Hasta 10 de los 11 jugadores que se vistieron de corto con Utah anotaron.

Boston fue incapaz de ganar a pesar de meter 22 triples (Utah anotó 17) y se perdió por completo en la lucha en los tableros, ausentes del partido Robert Williams III y Al Horford. Una calamidad los Celtics en el rebote, cediendo 17 en su aro. Si a esas dos bajas se añade la de Marcus Smart... pues eso, la defensa de los Celtics se tambalea sin esos tres elementos en juego.

Eso sí, no hay que olvidar que Utah jugó sin Jordan Clarkson y Collin Sexton, lo que obliga a Hardy a una importante reestructuración de su juego exterior, aunque, hay que incidir en ello, funcionaron muy bien Agbaji y Horton-Tucker.

Destacar también el excelente trato del balón que tuvieron ambos equipos, con poquísimas pérdidas de balón en el partido.

Boston tuvo a Jaylen Brown con 25 puntos y 6 asistencias, al ya citado Grant Williams con esos ya mencionados 7 triples para terminar con 23 tantos y a Malcolm Brogdon con 16 puntos.

Tampoco pudo contar Celtics con el lesionado Payton Pritchard.