Sixers gana en Cleveland con Embiid en el centro de la polémica

Restaban 4 minutos y 12 segundos para acabar el partido cuando los árbitros pitaron falta ofensiva de Joel Embiid sobre Evan Mobley. Era la sexta falta del camerunés, hombre clave del partido, pero Doc Rivers pidió revisión y los árbitros dieron marcha atrás en su decisión.

Esa jugada marcó la recta final del partido, con la afición de Cleveland indignada hasta el extremo con la terna de colegiados, con el entrenador local, J.B. Bickerstaff, inconforme por la explicación dada por los árbitros y con el partido enrarecido en sus momentos decisivos.

Antes de esa jugada crucial, de esa eliminación-no eliminación de Embiid, Sixers había puesto un poquito de tierra de por medio tras un tapón del camerunés a Mobley con canasta de James Harden y con un triple de Embiid sobre la bocina de la posesión, un triple contra el tablero que puso el 99-108 en el marcador.

Luego vino lo que vino, con 101-108 en el marcador, la jugada de la discordia, la falta de Embiid sobre Mobley que fue y dejó de ser ante la mirada atónita de los Cavaliers, la rectificación arbitral muy pero que muy al límite que permitió a la estrella visitante permanecer en la pista.

Donovan Mitchell intentó aprovechar el ambiente enrarecido que dejó la jugada y los Cavs se pusieron 107-110, pero un triple de Tyrese Maxey puso a los Sixers en el camino definitivo del triunfo, para acabar el partido 109-118, no sin antes Embiid intercambiar algunas frases bien tensas con algunos aficionados locales que le increpaban cuando el partido aún estaba por decidirse.

Embiid fue el jugador del partido desde cualquier punto de vista, terminando con 36 puntos, 18 rebotes, 4 tapones y 12 de 19 en el tiro, y los Sixers firmaron su sexto triunfo consecutivo para seguir terceros en el Este con 46-22, por el 44-28 de Cleveland, que sigue cuarto.

James Harden, siguiendo en su excelente onda de juego, sumó 28 puntos y 12 asistencias y Tyrese Maxey hizo 23 puntos.

Buen partido de Shake Milton y mala noche de Tobias Harris.

Sixers estuvo por encima del 50% en el tiro de campo, lanzó bien de 3, dominó el rebote y consiguió ganar perdiendo 18 balones.

Subió el nivel defensivo de Philadelphia en la segunda mitad, y eso resultó clave en el triunfo.

Cleveland contó con un notable Caris LeVert, que partiendo desde la segunda unidad sumó 24 puntos y 6 asistencias, incluyendo una extraña jugada de 3+2 para cerrar la primera parte, un 3+2 que solo le dio 4 puntos porque erró un libre, y que fue posible gracia a un 3+1 que incluyó una falta flagrante de su defensor.

Buenos repertorios de Cedi Osman -15 puntos- y Evan Mobley -13 más 12 rebotes- y noche muy irregular de las dos grandes estrellas locales: Donovan Mitchell y Darius Garland. El primero logró 21 puntos y el segundo hizo 15. Entre ambos, 2 de 14 desde el triple. No estuvieron especialmente felices en ataque.

Cavaliers no dispuso del lesionado Jarrett Allen, mientras que Ricky Rubio no jugó por tratarse del segundo partido de un back-to-back. Ya dijo Bickerstaff que Ricky estaría disponible, pero que solo lo alinearía en caso de emergencia, una emergencia que nunca existió.