Warriors gana a Memphis en el último segundo con una canasta de Poole

Gran partido el vivido en el Chase Center con un desenlace que se saltó cualquier marco previsible. Los Warriors perdieron por expulsión a Stephen Curry en la recta final del juego, pero fueron capaces de ganar con una canasta de Jordan Poole en el último segundo.

El baloncesto es muchas veces imprevisible y, como la vida, da sus vueltas inesperadas. Estando el partido en plena vorágine final Jordan Poole erró un triple teniendo al lado a un Curry desmarcado al que no le sentó muy bien la jugada. El caso es que segundos después, frustrado, Curry cometió un error de principiante, como fue arrojar su protector bucal, lo que le costó la expulsión a 1:14 del final.

De la expulsión no cabe ninguna duda. De hecho, su entrenador, Steve Kerr, comentó tras el partido: "Él sabe que no puede cometer ese error". Warriors se quedaba sin un hombre clave, como Grizzlies se había quedado un poco antes, a 2:33 del final, sin otro hombre clave, Jaren Jackson Jr., al cometer su sexta falta.

Y el final del partido mereció la pena, a pesar de tener su cuota de caos. En él se pudo ver una falta dura de Draymond Green sobre Ja Morant faltando 26,6 segundos, un importante triple de Klay Thompson (120-118 a 14,1 segundos del final), una jugada magistral de Morant para doblar el pase bajo canasta para el mate de Brandon Clarke (120-120 con 6,3 segundos por jugar). Y la jugada final, la definitiva.

Quedaban 2,6 segundos y Donte DiVincenzo sacaba desde el fondo de la canasta de Memphis. Entonces surgió la divina conexión. Excelente timing de DiVincenzo para dar el pase en el momento justo y muy buena definición bajo el aro de Poole para poner el 122-120 en el segundo final. Muy mal Ziaire Williams en su marca a Poole.

Ganó así Warriors en un final vibrante pero bastante desordenado. Lo hizo para ponerse 24-24 en la tabla clasificatoria y para dejar un poco herido a unos Grizzlies que jugaron sin Steven Adams y que encadenan 4 derrotas seguidas después de venir de 11 victorias consecutivas. Pero tampoco hay que alarmarse. Porque no es que Memphis haya tenido un nivel bajo en esas derrotas, ya que 3 de esos 4 partidos los ha perdido por 1, 2 y 2 puntos. La frontera entre el triunfo y la derrota muchas veces resulta muy permeable.

Crucial para ganar el que Warriors se pusiera las pilas en defensa en el último cuarto tras encajar 42 puntos en el tercero.

Curry fue el máximo anotador local con 34 puntos, Klay Thompson metió 24 y Jordan Poole hizo 21 y 7 asistencias. Buenas aportaciones de Jonathan Kuminga y de Draymond Green, autor de 8 puntos, 13 rebotes, 7 asistencias y 3 tapones, tirando solo 3 veces y anotando las 3.

Warriors sobrevivió a sus 21 pérdidas de balón (¡14 en la primera parte!), que no es poco, y Grizzlies echó en falta a Adams en el rebote y erró 11 libres que le costaron el partido.

Los Grizzlies tuvieron a Ja Morant con 29 puntos y 12 asistencias, a Desmond Bane con 20 puntos tras mejorar después del descanso, a Brandon Clarke con 19 más 8 rebotes y a Jaren Jackson Jr. con 17 tras un mal primer tiempo, un Jaren Jackson Jr., y esto es noticia, que no puso un solo tapón.

Además, gran partido del español Santi Aldama, que brilló con luz propia en la primera parte para terminar la noche con 13 puntos y 3 rebotes en 21 minutos tras meter 5 de sus 5 tiros de campo, con 2 triples sin fallo.