JORNADA NBA / playoffs 2021
Brooklyn destroza a los Bucks ganando por 39 puntos con Durant al frente
Nets logra la victoria más abultada de su historia en playoffs y bate su récord de triples
A la exhibición de juego ofensivo local se unió un muy notable partido en defensa
Un lujo para los ojos ver jugar en ataque a estos Nets y un disfrute máximo comprobar la mágica elegancia de un Kevin Durant imparable. Segundo partido de la serie Nets-Bucks y segunda victoria de Brooklyn, esta segunda con una exhibición ofensiva de primer orden y un resultado de escándalo: 125-86.
Esos 39 puntos de ventaja constituyen el triunfo más amplio de los Nets en playoffs en toda su historia, un récord acompañado por otro récord de la franquicia, el de triples anotados: 21 con un 50% de efectividad. Todo en un partido en el que los locales llegaron a dominar por 49 puntos en el último cuarto cuando se jugaban ya los minutos de la basura sin ningún jugador estelar en pista, sí, ¡49 puntos de diferencia! Una auténtica humillación.
Paliza sin concesiones, dominio de principio a fin, exhibición a partir de una naturalidad apabullante... y todo eso sin Harden en juego y defendiendo a muy buen nivel en la primera parte, con un equipo local ametrallando al rival desde el triple y mostrando una superioridad insultante, casi aterradora.
Los Bucks reducidos a la mínima expresión, con rostros apagados, con gestos alicaídos, con un lenguaje corporal altamente preocupante, con sus estrellas sin ninguna capacidad de reacción y con su banquillo sin soluciones al desastre que se estaba fraguando en la pista minuto a minuto.
Lo de Durant, de quitarse el sombrero. ¿Tuvo alguna vez Durant una lesión de Aquiles? No lo parece. Es un milagro de la ciencia y un milagro del cuerpo especial del jugador, si no no se comprende. Hoy, 32 puntos, 6 asistencias y 12 de 18 en el tiro de campo con 4 de 6 desde el triple jugando solo tres cuartos, con jugadas excepcionales, incluidos dos uno contra uno ante Giannis Antetokounmpo resueltos con un tiro exterior y con una penetración sensacional para cerrar el tercer cuarto con ventaja de 30 puntos para los locales (95-65).
Ni la defensa individual ni la zonal pudo con Durant en la primera mitad, con Budenholzer poniendo sobre el alero sin éxito alguno a P.J. Tucker, que se cargó pronto con faltas, Khris Middleton, Jrue Holiday, Giannis Antetokounmpo y Bryn Forbes. ¡Durant se pasó a todos por la piedra con una elegancia abrumadora!
Todo había empezado en un desequilibrante primer cuarto. ¡Porque el partido se rompió ya en el primer cuarto! Mate de Blake Griffin en rebote ofensivo, 2+1 de Durant ante Anteto y la ventaja crece que te crece hasta el 36-19 del primer cuarto, que luego se elevó a un 65-41 al descanso, al citado 95-65 en el final del tercero y casi alcanzó los 50 de ventaja en el cuarto final cuando ya se jugaban minutos de basura con ningún jugador estelar en la pista.
Brooklyn contó, además de con el imparable Durant, con 22 puntos y 6 asistencias de Kyrie Irving, que no necesitó forzar la máquina, con 13 tantos, 6 rebotes y 4 pases de canasta de un Bruce Brown que hizo un partidazo y con otros 13 puntos de Joe Harris. Mike James también alcanzó la decena, otra vez buenos minutos del base, y Blake Griffin lo hizo bien en la primera mitad.
Los de Steve Nash bombardearon desde el triple y terminaron con 27 asistencias y solo 8 pérdidas, por la relación de 14-16 de unos Bucks desconocidos que no estuvieron nunca en el partido.
Anteto terminó con 18 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias en tres cuartos, sufriendo otra vez desde los libres, Khris Middleton estuvo mal y fue por rachas (empezó con 0 de 8 en el tiro, luego metió 6 seguidos y terminó con 7 de 20) para acabar con 17 puntos y Jrue Holiday estuvo en 13 tantos. Bryn Forbes y Brook Lopez lo hicieron bien en la primera mitad y luego desaparecieron. Mal la segunda unidad de Bucks. Bobby Portis, por ejemplo, se ha desintegrado de manera inexplicable.
Lo que prometía ser una eliminatoria apasionante, una especie de 'final anticipada' en el Este, se está convirtiendo en un golpe brutal sobre la mesa de los Nets, que tras perder a Harden en los primeros segundos de la serie están 2-0 y destrozando a su rival. O Budenholzer y los suyos se ponen las pilas o nos vamos a quedar sin duelo en un santiamén. El resto de los equipos de la NBA mira con creciente desconfianza a unos Nets que asustan.