Exhibición de los Bucks para destrozar a unos desconocidos Miami Heat

Brutal exhibición de Milwaukee Bucks y tremendo varapalo para Miami Heat. El que prometía ser otro duelo de altos vuelos y encarnada competencia se convirtió desde el salto inicial en una desgarradora paliza en el primer cuarto (46-20) que dejó el partido visto para sentencia, un partido que terminó con un avasallador 132-98 para ponerse los Bucks 2-0 en la serie tras amasar una máxima diferencia de 36 puntos.

Los 26 puntos de diferencia en el primer cuarto igualan el récord histórico de mayor diferencia de puntos en un primer cuarto de postemporada.

Victoria sin oposición, fraguada en ese primer cuarto y en la incapacidad durante el resto del partido de Miami de recortar lo más mínimo la gigantesca distancia perdida en ese desigual arranque.

Gran partido de Giannis Antetokounmpo, que casi siempre tomó la línea de juego más beneficiosa para su equipo. Leyó muy bien el partido el griego, que dominó la cancha a su antojo y evitó sus acciones alocadas de penetración como elefante por cacharrería ante la defensa rival formada. Se movió muy bien por la pista esta vez. Su juego, muy bien templado, le dio muchísimos réditos a los Bucks. Terminó con 31 puntos, 13 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y 6 de 7 desde el libre tras el 6 de 13 del primer juego.

Los otros dos grandes jugadores de Milwaukee fueron Bryn Forbes y Jrue Holiday, ambos enormes.

Forbes se disfrazó de Stephen Curry en el primer cuarto masacrando al rival y terminó el partido con 22 puntos en 20 minutos tras anotar 6 de 9 desde el triple. Partido para enmarcar del joven jugador. Mientras, lo de Holiday en estos playoffs está siendo la constatación de un hecho: ha llegado para hacer mucho mejores a estos Bucks. Hoy, nuevo ejemplo clarificador por su defensa y su modo de organizar el juego: 11 puntos, 7 rebotes y 15 asistencias dadas en tres cuartos, con solo 2 pérdidas de balón. Calidad y veteranía a raudales. La comparación con Eric Bledsoe parece no tener el más mínimo sentido.

Además, 17 puntos de Khris Middleton tirando solo 5 veces a canasta y papel necesario y destacado para el desarrollo perfecto del colectivo local de jugadores como Pat Connaughton, Donte DiVincenzo, Bobby Portis o Brook Lopez.

Bucks terminó con 22 triples anotados (Miami solo encestó 8) tras meter 10 en el primer cuarto (igualando la mayor cantidad de triples en un cuarto en la historia de la NBA) y 15 al descanso, cuando venía de solo lograr 5 en el primer partido. Esos 22 triples constituyen un récord en playoffs de la franquicia.

Pero es que, además, la lucha por el rebote fue sangrante para los de Florida: ¡61 rebotes locales con 21 en ataque por 36 totales del equipo visitante! Desastre sin paliativos en este capítulo del juego del conjunto de Spoelstra, al que se le vio ya en el segundo cuarto con cara de pocos amigos viendo el desaguisado que estaban perpetrando sus jugadores en la cancha, unos jugadores que solo hicieron 13 faltas encajando 132 puntos. Dureza e intensidad cero, como si no fuesen Miami Heat.

En Miami, horribles partidos de Jimmy Butler, cuyo defensor primario volvió a ser Antetokounmpo, y Tyler Herro, el de Herro en realidad fue un partido inexistente, mala noche en el tiro de Kendrick Nunn e intrascendente papel de un muy superado Trevor Ariza. Lo de Herro, por cierto, empieza a ser preocupante.

Lo mejor de Miami Heat fue Dewayne Dedmon con 19 puntos y 9 rebotes en 21 minutos, muchos de ellos anotados en momentos de partido real. Goran Dragic hizo 18 tantos y un gris Bam Adebayo sumó 16.

Los Bucks venían de ganar el primer encuentro de la serie en la prórroga tras solo meter 5 triples, lo que no deja de tener su mérito y lo que suponía una seria advertencia para Miami . Pues bien, en el primer cuarto del segundo partido ya llevaban metidos 10. Toda una demostración de fuerza del equipo de Budenholzer que no se circunscribió al lanzamiento perimetral, ya que el primer cuarto de Milwaukee nos dejó baloncesto de muchos quilates, baloncesto total a partir de un esmerado e intenso trabajo defensivo y una ofensiva capaz de destrozar el rival desde las cercanías y desde las lejanías del aro a partir de un fantástico movimiento de balón.

Brutal en ese primer cuarto Forbes, un tirador excelente que estuvo desatado: 14 puntos en 6 minutos con 4 triples de 5 intentos en el primer acto. Se le veía a Forbes 'enfermo' de felicidad, necesitado de bola, elevado unas micras del suelo, convencido de que podría meter cualquier tiro, sin importar la distancia ni la oposición del rival. Una de esas noches con duende.

Excelente el primer cuarto de Antetokounmpo, que abrió el marcador del partido con un triple y una penetración y que terminó el cuarto con 9 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias ofreciendo una excelente lectura del juego y moviéndose con comodidad en todos los ámbitos. Y enorme Holiday, defendiendo, viendo el juego, asistiendo. Suyos en el primer cuarto 7 puntos y 7 asistencias.

A ellos hay que añadir los papeles de Connaughton y DiVincenzo, la intimidación de Brook Lopez... y todo ello con Middleton casi invisible, un Middleton que despertaría en el segundo cuarto para hacer imposible cualquier remontada rival.

El partido terminó prácticamente nada más empezar. Parcial de 19-4 de salida, 20 puntos de ventaja poco después, máxima de 28 puntos de ventaja en el primer cuarto con un tremendo 46-18 y final de los primeros 12 minutos con ese humillante 46-20.

Bucks estaba con 18 de 25 en el tiro de campo y 10 de 15 desde el triple por el 8 de 23 y 1 de 6 de unos Heat irreconocibles, sin tensión en defensa, con fallos de comunicación en pista incomprensibles, sin ideas en ataque, muertos. El rebote, una sangría: ¡17 a 4 en el primer cuarto! Milwaukee sumaba 14 asistencias y Miami solo 4. Un auténtico baño.

Baste decir que el único jugador de Miami que funcionó en ataque en el fatídico y crucial primer cuarto fue Dewayne Dedmon, que metió 9 de los 20 puntos de su equipo. El resto, para olvidar, simplemente nefastos.

A partir de ahí, control ejemplar de la situación de los hombres de Budenholzer, que nunca bajaron la guardia, ni siquiera en el comienzo del último cuarto, cuando ganaban por 30 puntos y seguían defendiendo con firmeza y agresividad.

En el segundo cuarto, Forbes ya llevaba 19 puntos en solo 8 minutos de estancia en la pista. Anteto y Middleton brillaron en ese segundo cuarto, Milwaukee llegó a tener 31 de ventaja (67-36) y al descanso se llegó con un esclarecedor 78-51 (Forbes 19 puntos, Anteto 18, Holiday 11 asistencias...). El rebote era una locura: 31-14, los locales sumaban 22 asistencias y estaban en 15 triples de 29 intentos. La defensa de Miami ridiculizada hasta la médula.

Y todo siguió igual a lo largo de una segunda parte intrascendente, con 107-78 al final del tercer cuarto y ventajas de más de 30 puntos tanto en ese tercer cuarto como en el último, donde lo único llamativo fue una dura falta de Nemanja Bjelica a Anteto con mediación y pacificación de Portis con sus particulares maneras, seguida de un ejercicio de control futbolístico del griego por mitad de la cancha con el juego parado. Hasta ese punto estaba relajado y eufórico el griego, que a 9 minutos del final fue sentado ya por su entrenador.

Estos Bucks empiezan a despegar de verdad. Fantástico su partido de hoy, a la par que decepcionante el de Miami Heat, que va a tener que ponerse las pilas ya.