Knicks gana su octavo partido seguido y se pone cuarto en el Este

El milagro de Tom Thibodeau parece no tener fin. Los Knicks crecen y crecen ante la mirada absorta de sus rivales. ¡Suman los neoyorquinos 8 triunfos consecutivos! Algo que ya no se recordaba en la Gran Manzana. ¡Y New York es ya el cuarto en la Conferencia Este!

Victoria en la prórroga ante Atlanta Hawks. Por 137-127. Y ahora los Hawks bajan a la quinta plaza (32-27). Plaza que ocupan los Knicks (33-27). Nadie pudo concebir algo semejante cuando estaba a punto de comenzar la temporada. Nadie.

Venía Atlanta de conseguir 9 victorias en sus últimos 11 partidos. Llegó al Madison con ese poderío. Y estuvo a punto de marcharse del Madison sin perder comba. Pero la prórroga fue un muro para los de Nate McMillan. Se notó la pérdida de Trae Young. Porque los Hawks se quedaron sin su estrella en la recta final del tercer cuarto. Lesión de tobillo. Habrá que esperar a ver qué revelan las pruebas médicas.

Mientras, Knicks volvió a tener un líder incontestable: Julius Randle. El ala-pívot anda en un estado de gracia cegador. Va de exhibición en exhibición. Ante Atlanta... 40 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias. Estuvo por encima del 50% en el tiro de campo. Encestó 6 triples. Metió 12 de sus 13 tiros libres. Convertido en una mala bestia. Está haciedo una temporada de quitar el hipo.

Dos suplentes de lujo ayudaron lo suyo. El veterano Derrick Rose y el novato Immanuel Quickley. El primero sumó 20 puntos. El segundo, otros 20, de los cuales 5 llegaron en la prórroga.

Reggie Bullock hizo 18. Todos desde el triple. RJ Barrett no tuvo su día en el tiro. Pero metió 16 tantos. Y Nerlens Noel trabajó el rebote y la intimidación.

Espectaculares los Knicks desde el triple. Y resolutivos al máximo en la prórroga.

Al tiempo extra se llegó gracias a Bogdan Bogdanovic. Randle había puesto el 122-119 con una canasta anotada  8 segundos del final. Pero Atlanta contestó de forma celérica y contundente. Lo hizo con un triple de Bogdanovic que puso el 122-122. Apenas 2 segundos después de la canasta de Randle. Y no pudo este sellar el triunfo local en la última jugada del partido. La prórroga sería la solución.

El tiempo extra tuvo poca historia. Knicks arrasó en él con un 15-5 para el definitivo 137-127. Empezó la prolongación con un contundente 10-0. Parcial demoledor. Con dos triples consecutivos clave de Bullock y Randle.

Atlanta se quedó sin triunfo. No sirvió al final el esfuerzo de sus titulares. Ninguno de ellos bajó de 17 puntos.

Otro partido enorme de Clint Capela. Con otro doble 20. Firmó 25 puntos, 22 rebotes y 12 de 17 en el tiro. Young se fue lesionado en el tercer cuarto. Ya llevaba entonces 20 puntos, 14 asistencias y 4 robos. Había llegado al descanso con un doble-doble (18 puntos y 10 asistencias). A un descanso con marcador altísimo: 69-69.

Además, 20 puntos de Bogdanovic. John Collins sumó 18. Y Kevin Huerter 17. Todo para morir en la orilla. Allí, en la playa, triunfantes, estaban los Knicks.