La February Madness de Stephen Curry
La estrella de Warriors promedia 37,8 puntos en febrero tras meter 42 triples en 6 partidos
El juego de Curry es elogiado por su entrenador y por sus compañeros de equipo
Está en uno de los mejores momentos de su carrera, y llegado el mes de febrero su juego ha explotado hasta unos niveles fascinantes. Es Stephen Curry ejerciendo del mejor Stephen Curry. O lo que es lo mismo, es Curry desplegando su demoledora ofensiva.
Curry promedia 37,8 puntos, 5,8 rebotes, 5,3 asistencias y 1,5 recuperaciones de balón en los 6 partidos que ha afrontado en febrero, pero lo más alucinante ha sido verle meter 42 triples en esos 6 juegos. Sí, ¡una media de 7 triples anotados por partido!
Los porcentajes de tiro de la estrella de Warriors impactan: un 56,8% en el tiro de campo, ¡un 50,6% desde el triple tirando prácticamente 14 triples por noche! y un 94,6% desde los libres. Cifras apoteósicas.
El base de Golden State le metió 10 triples a Dallas y 11 a Orlando, situando ya su récord NBA en 17 partidos con 10 o más triples, con una ventaja abismal sobre el segundo en este apartado, su compañero Klay Thompson, que está en 5 partidos con 10 o más triples.
Febrero ha visto cómo Curry hacía un partido de 38 puntos, otro de 40 y otro de 57. Su peor anotación en los 6 compromisos que ha afrontado se cifra en 28 puntos, y en los otros 5 ha metido 30 o más.
Por eso, Curry empieza ya a estar en las quinielas por ser MVP, galardón que ya ha ganado 2 veces.
Lo único que frena su ascensión en la lista de candidatos a MVP es que Warriors está con marca de 14-12, buena para el equipo, pero insuficiente para llegar tan alto.
"El juego habla por sí solo", aseguró anoche Curry, tras otra exhibición espectacular de juego, cuando se le preguntó por si merece estar en la lucha por el galardón. "Trato de no distraerme con eso porque contamina el momento", añadió.
Elogios en su entorno
Warriors tiene marca de 3-3 en febrero porque Curry está en vena ofensiva. Y su entorno no se corta a la hora de elogiarle.
Su entrenador, Steve Kerr, lo tiene claro: "Para él parece rutinario lo que es asombroso", afirma el técnico, que considera que Curry "es de otro mundo", en unas declaraciones publicadas por ESPN.
Mientras, su compañero Andrew Wiggins no para de alucinar con Curry: "El espacio que genera, no importa quién le esté defendiendo, es simplemente un placer verlo", añadiendo que no es lo mismo ver a Curry por televisión que tenerle al lado en un partido. Se siente fascinado el alero de Golden State con la factura del juego de su compañero.
Steph causa impacto entre los suyos, y el mexicano Juan Toscano-Anderson tira de una frase cada vez más común para definir el juego de Curry: "Es literalmente como un videojuego... es irreal".