LeBron dice que lo mejor de su contrato es poder coincidir con su hijo
LeBron James Jr. tiene 16 años y cuando se una a la NBA su padre podría jugar todavía en ella
LeBron James firmó hace escasos días una extensión de contrato con Lakers cifrada en más de 85 millones de dólares por 2 años, una prolongación de contrato que le une al equipo angelino hasta 2023. Pero ha sido ahora cuando el MVP de las últimas Finales ha explicado qué es lo que más le motivó a la hora de firmar el acuerdo.
Esa motivación no es otra que alinear la recta final de su carrera deportiva con el paso al profesionalismo de su hijo mayor, LeBron James Jr. Bronny tiene ahora 16 años y anda aún jugando al baloncesto en la secundaria.
Es importante firmar ese gran contrato a su edad, lo es también hacerlo con un equipo campeón, Lakers, que tiene visos de ser la escuadra a batir en el futuro cercano, no es una cuestión menor que la extensión le lleve a cumplir 20 temporadas en la NBA, pero lo más importantes es alinear su futuro con el de su hijo.
"Lo mejor es que el año que seré agente libre será el mismo en el que mi hijo mayor se gradúe en la escuela secundaria", ha asegurado James a los periodistas en una videoconferencia.
La estrella de Lakers ha añadido en dicho encuentro virtual que "así tendré algunas opciones para ver lo que quiero hacer en adelante, estar cerca de mi familia, estar más cerca de mi hijo o seguir jugando este juego que amo".
Lo cierto es que James ya ha hablado en el pasado de la circunstancia de coincidir profesionalmente con su hijo. Incluso, como recuerda ESPN, en 2018 preguntado por si podría darse la posibilidad de que jugaran juntos en el futuro, LeBron respondió muy habilmente "O jugar en contra".
Está claro que la posibilidad de que LeBron quisiera compartir equipo con su hijo al final de su carrera podría incidir de forma anómala en el puesto de elección de Bronny en el draft, siendo un elemento distorsionador. Por eso, y por otras cuestiones, James siempre se ha ocupado de decir que le encantaría coincidir con su hijo en la NBA, pero sin afirmar nunca que quisiera compartir equipo con su primogénito.