JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2019-2020
Atlanta vence a Charlotte en un partido polémico con dos prórrogas
Trae Young lidera a los locales y Terry Rozier le da 40 puntos a los visitantes
Fue un partido extenso, emocionante y polémico, un juego con alta puntuación y destacadas actuaciones personales. Al final, Atlanta venció a Charlotte 143-138 tras 58 minutos de juego en el que no faltó casi de nada.
Trae Young fue la estrella local con 31 puntos, 16 asistencias y 6 triples; Terry Rozier fue el líder visitante con 40 puntos (récord personal en la NBA), 8 triples y solo una pérdida de balón. Pero ambos sufrieron sus contratiempos.
El de Young llegó al final del último cuarto. Dispuso de 2 tiros libres para ganar el partido. El primero lo metió y el segundo lo falló. Restaba 1,8 segundos para el final y el partido quedó 122-122 para encaminarse a la prórroga.
En el primer tiempo extra llegó la polémica. Surgió en los segundos finales. Dos revisiones arbitrales dieron la espalda a los Hornets y, en particular, a Rozier. Primero, los árbitros le impidieron lanzar 2 libres al considerar que no había sido falta y después le pitaron una falta en ataque a 0,8 segundos del final cuando buscaba el triunfo. Final de la prórroga: 131-131.
El segundo tiempo extra solucionó el partido. Crucial la sangre fría del novato De'Andre Hunter, que metió 3 libres consecutivos para poner con 3 de ventaja a Atlanta con 13 segundos por jugar.
Además de la actuación de Young, enorme John Collins con 28 puntos, 11 rebotes y 12 de 13 en el tiro de campo y brillante el joven Cam Reddish con 22 tantos.
Además de Rozier, Charlotte tuvo a Devonte' Graham con 27 tantos, 10 asistencias y 4 robos con 0 pérdidas y a Caleb Martin con 23 puntos. El español Willy Hernangómez no jugó.
Atlanta dominó el rebote, metió el 55% de sus tiros de campo, tiró bien de 3 (los dos equipos lo hicieron)... pero erró 11 libres y presentó una relación robos-pérdidas de 1-15 por el extraordinario 9-3 de los visitantes. Sí, ¡Hornets solo perdió 3 balones en 58 minutos!
Al final, derrota de los Hornets y cabreo monumental de su entrenador, James Borrego, por la actuación arbitral.