Durant y Curry vuelven a destrozar a los Cavaliers

Warriors es hoy por hoy un equipo imbatible. Imponen los de la Bahía de San Francisco, cuyo ritmo de juego es inigualable, cuya intensidad defensiva no tiene parangón y cuya fluidez ofensiva está lejos del alcance del resto de los equipos.

Regresó al banquillo Steve Kerr tras estar fuera más de un mes y medio. Y nada cambió. Nueva exhibición ofensiva de Kevin Durant y Stephen Curry con 33 y 32 puntos, nueva lección defensiva de Klay Thompson mejorando mucho en ataque, nuevo partidazo frustrante de un LeBron James que lo dio todo y no obtuvo nada y nuevo golpe en la mesa de Warriors, un equipo que tritura a los rivales.

Victoria local por 132-113 para ponerse 2-0 en las Finales y 14-0 en los actuales playoffs. En un partido con un histórico doble triple-doble a manos de Stephen Curry y LeBron James.

Warriors 132 Cavaliers 113 (2-0)

El partido estaba 81-73 para Warriors y se jugaba el tercer cuarto. Entonces, Stephen Curry hizo magia. Fue una jugada antológica en la que exhibió un manejo de balón insuperable con ambas manos y un movimiento de pies celérico para bailar al mismísimo LeBron James, que se esforzó al máximo en defensa para ser incapaz de detener el espectáculo de Curry y su canasta en el uno contra uno.

Esa jugada supuso el principio del fin para LeBron y su equipo, que no se sabía muy bien cómo había llegado perdiendo solo 67-64 al descanso. Bueno, sí se sabía. Porque en Cleveland juega una fuerza de la naturaleza llamada LeBron James.

El primer cuarto fue muy similar al del primer partido. Tremenda ofensiva de ambos equipos para un 40-34. Carlos Santana había tocado el himno nacional estadounidense con su guitarra eléctrica y esa interpretación pareció dar el pistoletazo de salida a una desbandada general en el buen sentido de la expresión. Juego a un ritmo trepidante. Y ahí Golden State no tiene rival, porque corre y juega en abierto como nadie.

Arrancó muy bien Cleveland, con LeBron James a todo trapo y Kevin Love muy acertado, pero un parcial de 10-2 en 2 minutos ya dio una ventaja de 10 puntos a los locales (26-16). Era el primer aviso. Klay Thompson estaba haciendo un formidable trabajo en la marca de un desdibujado Kyrie Irving y los Warriors fueron capaces de dominar el cuarto pese a perder 8 balones, ¡el doble de los que perdieron en todo el primer partido!

Curry se fue de ese primer cuarto con 15 puntos... ¡tras meter 10 de 10 en tiros libres! Y Durant ya era una máquina que dominaba todas las facetas del juego. Tremendo el duelo de aleros con LeBron James. Dos jugadores en estado de gracia.

El segundo cuarto pareció encender todas las alarmas en Cleveland cuando los locales se pusieron con 12 de ventaja (47-35) con un triple de Klay Thompson. No estaba LeBron en pista. Y sin James los Cavs se desvanecen. Fue regresar el de Akron a la cancha y cambiar el panorama. Su impulso, sus ganas de involucrar en el juego a todo el equipo, sostuvo a Cavaliers en el partido. 

Draymond Green estaba con problemas de faltas, y así estuvo todo el partido, y Cleveland aguantó el tipo hasta llegar al descanso con un apretado 67-64 tras anotar Irving sobre la bocina a pase de LeBron, ¡su 10ª asistencia del partido!

Al descanso, se habían invertido los papeles en robos-pérdidas respecto al primer partido. Warriors ya había extraviado 13 balones y Cavs había pasado del 0-20 del primer juego al 10-7 al descanso del segundo. Durant llevaba ya 15 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 3 tapones y 3 robos y LeBron estaba en 18 puntos, 10 asistencias y 6 rebotes. Pero lo importante para Cleveland era que jugadores como Richard Jefferson, Iman Shumpert y Kyle Korver estaban aportando.

Pero fue llegar el tercer cuarto y todo terminó. Apoteósico cuarto de Curry con 12 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y baile de videojuego ante LeBron, que ya en este cuarto alcanzó el triple-doble. 

James forzó su cuerpo hasta poner a los suyos a 4 puntos (86-82), pero a partir de ahí la máquina de baloncesto de Warriors elevó al máximo su potencia hasta hacer añicos al rival. Durant, Curry, Thompson, todo fue una fiesta hasta ponerse 16 arriba (102-86). Poco importaban las 5 faltas de Draymond Green. La defensa local, su circulación de balón, su celeridad de miras ante el aro y su acierto desde el triple definían todo: 102-88 al final del cuarto.

El último acto fue pura fanfarria. Warriors no bajó el ritmo, Irving intentaba quitarse el sambenito de un mal partido, pero ya era tarde, Curry andaba tumbado en la banda con una toalla encima, Durant se empeñaba en destrozar al rival y Golden State llegaba a acumular 22 puntos de ventaja. 

A 3:47 del final, Tyronn Lue retiró a un LeBron James que se fue con una cara de frustración absoluta. No era para menos.

Ganaba al final Warriors con 33 puntos, 13 rebotes, 5 tapones y 6 asistencias de un inconmensurable Durant y 32 tantos, 10 rebotes, 11 asistencias y 14 de 14 en libres de un decisivo Curry, al que no le importó perder 8 balones. Además, 22 puntos de Klay Thompson, que defendió a lo grande, y buena aportación cuando estuvieron en cancha de Draymond Green y Shaun Livingston.

Victoria local perdiendo 20 balones, pero anotando 18 triples con acierto. Porcentajes del equipo: 51,7-41.9-91,7. Para ganar fácil, como así fue. Con 67 puntos en la primera parte y 65 en la segunda.

Cleveland cayó con 29 puntos, 11 rebotes y 14 asistencias de James, que hizo un 12 de 18 en el tiro. Kevin Love metió 27 puntos y Kyrie Irving 19 en una mala noche. Pero para mala la de J.R. Smith. Se le pedían más tiros y terminó con 0 puntos en 14 minutos tras tirar 2 veces.