Lección de baloncesto de los Cavs para meterse otra vez en las Finales

Ya tenemos Finales de la NBA: Warriors contra Cavaliers. Es decir, las mismas que en 2015 y 2016. Y esta vez de la forma más salvaje, con los californianos llegando con un 12-0 y con los de Ohio alcanzándolas con un 12-1. El 5º juego de las Finales del Este no tuvo color.

Cleveland venció a Boston 102-135 para hacerse con su 4º título de conferencia. Lo logró a partir de otra paliza y otra lección de baloncesto amparada en el magistral liderazgo de LeBron James, que vivió una gran noche al convertirse en el máximo anotador de la historia de los playoffs pasando al mismísimo Michael Jordan.

Pero no estuvo solo LeBron. También brillaron Kevin Love en el primer cuarto, Kyrie Irving en el tercero y Deron Williams desde la suplencia.

Celtics 102 Cavaliers 135 (1-4)

Desde el principio se vio venir la debacle local y la fiesta sin fin visitante. Kevin Love empezó a fabricar esa fiesta anotando 10 puntos en los 6 primeros minutos de juego. Por entonces, Cleveland ya ganaba 10-21, ventaja que se fue ampliando hasta el 16-37 al borde del final del primer cuarto.

Sin haberse jugado los primeros 12 minutos, los Cavs ya amasaban una ventaja de 21 puntos, con Celtics en un 5 de 18 en el tiro, con LeBron expandiendo su juego y dominando la pista a su antojo, con Kyle Korver enchufando 2 triples nada más salir a la cancha y con Irving regalando alguna jugada personal impagable. Boston contuvo por un momento el temporal y el primer cuarto acabó 27-43.

Un primer cuarto en el que el trío estelar visitante sumaba 30 puntos y el equipo local solo 27. Cavs había anotado el 64% de sus tiros de campo y llevaba 6 triples de 11 intentos. Boston no sabía donde meterse.

Y ya no supo donde meterse en todo el partido, porque el segundo cuarto discurrió por los mismos derroteros. Deron Williams sentó cátedra partiendo desde la suplencia. Se mostró imparable y recordó por momentos al mejor D-Will, a aquel que maravillara en Utah Jazz, y solo el tremendo acierto del local Avery Bradley, 19 puntos en la primera parte, rebajó la debacle e insufló cierto ánimo a la afición local.

Se llegó al descanso con 57-75. Cleveland llevaba un 58,5% en el tiro de campo y LeBron James perseguía sin tregua a Michael Jordan ofreciendo un espectáculo maravillos en pista. Al descanso, ¡LeBron ya había sumado 20 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias, 3 robos y 7 de 8 en el tiro! Estaba haciendo lo que quería. Deron Williams llevaba 14 puntos tras un impresionante juego ofensivo, Love 12 con 7 rebotes e Irving 11. Todo funcionaba a las mil maravillas.

Por si fuera poco, Irving anotó 11 puntos en los 3 minutos y medio primeros del tercer cuarto. El acabose. Todo se disparó aún más. Boston deambulaba sin rumbo por la pista, Cleveland se llegó a poner con 30 de ventaja (65-95 y 70-100) y todos estaban pendientes en exclusiva de si LeBron superaba a Jordan. Lo hizo. Un matazo y un triple posterior a 2:40 de la conclusión del cuarto convirtió a James en el máximo anotador de la historia de la NBA en playoffs.

Se llegó al final del tercer acto con 74-109 para los visitantes. LeBron era todo felicidad en la banda, visiblemente emocionado por pasar a Jordan. Sus compañeros le abrazaban a medio camino entre el cariño y la admiración. La fiesta ya había empezado, ya que el último cuarto no sirvió para nada más que para festejar en el caso del equipo visitante.

Llegaron a tener los Cavs 39 puntos de ventaja para ganar al final 102-135, situar el 4-1 en las Finales del Este y acceder a las Finales destrozando el factor cancha. A la conclusión, todos saludaban y felicitaban a LeBron, pero también todos se pasaban a insuflar ánimos al lesionado Isaiah Thomas, que recibió calurosos mimos de James e Irving. Eso sí, impresionante la afición local animando a los suyos en el cuarto final cuando caían por más de 30 puntos.

LeBron finalizó el partido con 35 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias jugando solo 3 cuartos. Irving añadió 24 con 7 asistencias, Love, 15 con 11 rebotes y D-Will logró 14 en solo 17 minutos de acción. Los visitantes metieron 19 triples con un 46% de acierto.

En Boston, 23 puntos de Avery Bradley y mal día de Al Horford. El dominicano se quedó en 8 puntos y 3 rebotes tras estar en pista 27 minutos.