Paul Pierce juega su último partido de baloncesto
El alero se despide de la NBA y de la práctica deportiva jugando 22 minutos ante Jazz
Paul Pierce jugó el domingo su último partido de baloncesto. No fue el más alegre de su carrera, ni mucho menos, pero sí fue uno de los más emotivos. El jugador se despidió de la práctica deportiva en su California natal, pero lo hizo perdiendo y quedando eliminado de los playoffs.
Clippers cayó 91-104 en el 7º partido de su serie contra Utah Jazz. El Staples Center es, por lo tanto, el último pabellón de baloncesto en el que Pierce plantó sus zapatillas para jugar. Lo hizo durante 21 minutos y 30 segundos como suplente para sumar 6 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia y 1 robo, meter 2 de sus 4 tiros de campo y acertar con 1 triple.
Se ponía así fin a una larga, prolífica y exitosa carrera en la NBA que se prolongó durante 19 años y que le llevó 2 veces a las Finales y a la conquista de un anillo en 2008, cuando fue MVP de las Finales con Boston Celtics, su equipo del alma.
De esos 19 años, 15 los pasó en Boston, donde fue y es un ídolo. Luego estuvo en Nets, Wizards y Clippers, donde militó en los 2 últimos años de su carrera.
Se va con 39 años 'The Truth', un jugador especial, pleno de calidad, lleno de sentido práctico en los minutos decisivos. Se marcha con 1.343 partidos de temporada regular y 170 de playoffs a sus espaldas. Es decir, con 1.513 partidos en su particular zurrón.
Emotivos mensajes
Tras el partido, las redes sociales se llenaron de emotivos mensajes dirigidos al jugador. Muchos procedían de sus seguidores, pero también hubo bastantes escritos por compañeros de juego en la NBA. Jugadores como Kobe Bryant o Dwyane Wade no fueron ajenos a ese fenómeno.
Pierce ya había anunciado antes de comenzar la temporada que éste sería su último año jugando al baloncesto, por lo que le ha dado tiempo a despedirse poco a poco.
Hace unas semanas aseguraba: "Solo puedo decir gracias a todos los aficionados que me siguieron durante mi carrera apoyándome en mis momentos buenos y malos". El agradecimiento tiene que ser mutuo, porque el baloncesto tiene mucho que agradecer a Pierce. Se ha ido un grande.