J.J. Barea lidera el triunfo de Mavs ante unos Warriors sin Curry
Segunda derrota de los actuales campeones con el puertorriqueño como principal verdugo
Los Warriors sufrieron anoche su segunda derrota en lo que llevamos de temporada. La ausencia de Stephen Curry marcó un partido en el que los actuales campeones mostraron una imagen muy alejada de la habitual y terminaron perdiendo por más de 20 puntos con J.J. Barea como verdugo.
El base puertorriqueño, nuevamente titular por la baja de Deron Williams, volvió a mostrarse acertado en todas las facetas del juego. Anotó 9 de sus 12 tiros y 5 de los 7 triples que intentó (18 de 26 en sus últimos cuatro), repartió 6 asistencias y terminó con 23 puntos.
Fue el máximo anotador de unos Mavs que se impusieron con una holgura inesperada a los líderes de la competición tras anotar 14 de 27 desde el triple y el 52 % de sus tiros de campo.
En el otro lado, poco antes del comienzo del partido se confirmaba la baja de Curry por unas molestias en la pierna izquierda, que también podrían impedirle jugar hoy ante Houston, y los Warriors no lograron recomponerse en su ausencia.
Los Warriors, otro equipo sin Curry
Klay Thompson y Draymond Green no tuvieron éxito a la hora de suplir en la ofensiva al ausente y su 8 de 30 conjunto en el tiro facilitó que un equipo local mucho más acertado fuera adquiriendo cada vez mayor ventaja.
Sin Curry, la ofensiva de los Warriors estuvo muy lejos de su habitual fluidez y a los de Luke Walton les costó encontrar posiciones cómodas de tiro ante la presión defensiva de los Mavs.
Ian Clark fue el mejor visitante, 21 puntos, y Dirk Nowitzki anotó 18 para Dallas, con Zaza Pachulia capturando 15 rebotes y Charlie Villanueva sumando 5 puntos en 12 minutos.
Los 23 puntos de diferencia con que acabó el partido -los Mavs llegaron a estar 30 arriba (83-53)- suponen la peor derrota encajada por los Warriors desde 2013, cuando perdieron por 31 ante los Rockets.
La de anoche supone también que el registro de los Warriors cuando Curry ha sido baja pase a ser de 1 victoria y 6 derrotas a lo largo de las últimas 3 temporadas, lo que evidencia la enorme influencia del base en el buen juego de su equipo.