Kevin Love no podrá jugar las semifinales de la Conferencia Este

Los aficionados de los Cavaliers difícilmente perdonarán a Kelly Olynyk el agarrón del brazo que dio a Kevin Love en el cuarto y último partido de la serie entre Celtics y Cavs. Love se dislocó el hombro izquierdo en la acción y no podrá jugar las semifinales de la Conferencia Este.

La franquicia ha confirmado hoy el alcance de la lesión que le obligó a abandonar el partido de Boston tras las pruebas médicas que se le han realizado en Cleveland. El ala-pívot sufrió una dislocación glenohumeral inferior anterior acompañada de un desgarro del labrum, el anillo fibrocartilaginoso sobre el que rota el húmero en la articulación del hombro, y una contusión ósea en la cabeza del húmero.

Pese a que un optimista Love aseguraba ayer, una vez que le recolocaron el hombro, que confiaba en estar presente en la segunda ronda de los playoffs, no será así. El jugador de los Cavs no podrá estar presente en las semifinales de la Conferencia Este que, salvo sorpresa, debería enfrentar al conjunto de Cleveland con los Bulls, según ha anunciado el equipo en un comunicado. No hay fecha de momento para su regreso.

Polémica acción de Olynyk

La confirmación de la baja de Love no hará sino alimentar la polémica generada tras el partido por la acción de Olynyk. Love no dudó en acusar al jugador de los Celtics de haberle lastimado intencionadamente. “No tengo duda de que lo hizo a propósito”, aseguró las estrella de los Cavs a la prensa.

Por su parte, Olynyk negó rotundamente la acusación del jugador de los Cavs. “Es ridículo”, aseguró al Boston Herald el jugador de los Celtics, “Nunca haría daño de forma intencionada ni a Love ni a nadie. El agarró mi brazo, yo agarré el suyo y estábamos peleando por un balón suelto. Esos enganchones ocurren continuamente en esta liga”.

La baja de Love es un serio contratiempo para los Cavs en su pretensión de hacerse con el título de la NBA. El ala-pívot ha promediado este año 16,4 puntos y 9,7 rebotes por encuentro. Su baja obligará a David Blatt a dar un mayor protagonismo a jugadores como Tristan Thompson o el veterano Kendrick Perkins.